Good old days [Hector]

por **Astrid Dagmar** Dom Jul 03, 2016 1:30 am

Aún desarmada, Astrid no se encontraba indefensa. Por suerte, no era ajena al combate cuerpo a cuerpo donde se requiriera usar las manos, sin más. Sin embargo, de forma inconsciente, la Rubinus se sentía mucho más segura si al llevar su diestra hacia la altura de la cadera, por dentro de la capa, encontraba una empuñadura a la que aferrarse. Una espada, una daga, lo que fuese. Aunque, por supuesto, siempre iba a preferir lo primero. A lo largo de los años había adquirido la manía de realizar tal acción cuando se sintiese amenazada o tuviese que mantenerse alerta, hasta el punto de hacerlo casi sin darse cuenta.

Precisamente por ello, y por haber perdido su vieja cimitarra en una misión (bueno, más que perderla, destrozarla por razones que no vienen al caso), la mujer había decidido comprarse una espada nueva. O algo que funcionase como tal, claro. No podía ir por ahí rompiéndose los nudillos o abusando de su propia magia para poder defenderse a sí misma o a otros. Podría crearla ella a partir de cualquier metal debido a una de sus habilidades, pero prefería no abusar de ella (por no decir que, en comparación con lo que podría hacer un herrero, la calidad de sus creaciones siempre sería menor.)

Tras la invasión acontecida en Chaos Urbanis, apenas se había movido de la ciudad, salvo para realizar algún que otro encargo independiente o si se requería su presencia en otro lugar. Los Rubinus Vigilis se habían dedicado a intentar promover ayudas para reconstruir la urbe, así como a socorrer a los diversos civiles que habían sufrido los daños colaterales del conflicto. Esto le llevó a conocer a un señor cuya herrería se encontraba cerca de la sede donde ella solía trabajar, de modo que no era raro que intercambiaran palabras de vez en cuando. Por supuesto, lo consideró de confianza a la hora de comprarse una nueva arma.

—No, Joachim. Una espada de dos manos no me resulta cómoda.—Ya había anochecido y el pobre herrero iba a cerrar en cualquier momento, pero Astrid no quería irse sin dejarle claro cómo quería el producto, aún si tenían que conversar fuera de la tienda. No quería hacerle trabajar de más si se equivocaba. Al fin y al cabo, el arma que llevase consigo no era un asunto que habría que tomarse a la ligera. —No es cuestión de fuerza. Puedo con ella, pero no me sentiría a gusto.— Lo peor es que el pobre hombre estaba sordo y tenían que hablar a voces. Se encogió de hombros, sonriendo levemente, en un gesto de complicidad hacia el señor, que suspiraba con un poco de frustración.

—Es lo que le recomiendo. Usted es ágil, así que manejar un arma pesada tan sólo compensaría su velocidad y le otorgaría más fuerza de ataque. Merece la pena.—Lo habían hablado una y otra vez, pero la morena parecía seguir en sus trece. —Le llevaría un trabajo innecesario. Me conformaría hasta con un cuchillo de cocina,—bromeó. Claro que no se conformaría con eso, pero el hecho de seguir usando el mismo tipo de espada le era primordial para mantener el estilo de combate que había estado empleando siempre. Volvió a explicarle una vez más lo que necesitaba, provocando que el hombre asintiera varias veces de modo impaciente.

—¡Está bien, está bien, señorita Dagmar! Lo que usted quiera, no se preocupe. Mañana me llegarán materiales nuevos, así que me pondré con el encargo. ¡Pero déjeme cerrar la tienda de una vez!—gruñó, en un tono despreocupado, devolviéndole el gesto de complicidad a la morena. Después de eso, no tardaron en despedirse, de modo que Astrid continuó su camino hacia la sede Rubinus, que se encontraba a un par de calles más atrás. No tardaría mucho en llegar.

Y, sin embargo, tuvo que detenerse en seco en un callejón ligeramente ancho (por el cual solía atajar) tras notar una presencia constante. ¿Quizás le estaban siguiendo? ¿O eran imaginaciones suyas? A lo mejor no era más que un gamberro, tal vez un pequeño ratero que tal vez hubiese visto una presa fácil en la mujer. Cuando miró a su alrededor, no vio a nadie más, pero no podía evitar tener la corazonada de que había alguien cerca. Exhaló aire por la nariz, suspirando un poco, pero sin llegar a decir nada. Tampoco quería llamar demasiado la atención, fuese verdad lo que pensaba o no.

Datos:

por **Hector Eachann** Dom Jul 03, 2016 1:58 pm

¿Cuanto tiempo había pasado? Durante años había estado viajando sin rumbo aparente, hasta que finalmente encontró un motivo para su vida, la venganza. Después de conseguir información de una forma u otra por cualquier medio necesario, había escuchado de una tal "Dagmar" y eso le basto como incentivo para no detenerse. Su nombre no bastó, tuvo que investigar sobre ella, donde residía, cuales eran los lugares que recurría, a quienes conocía. Todo esto lo llevo a un único lugar, donde se encontraba actualmente su presa: Chaos Urbanis.

Logro meterse en la ciudad sin ser detectado por los guardias, no sabia si lo reconocerían, pero no quería correr el riesgo, no tan cerca de la conclusión que tenia en mente. La noche lo acompañaba, ideal para la situación, cubierto con su capa negra, era el camuflaje ideal. Llevaba la vaina de su espada en su cintura, amarrada a un cinturón, no iba a usarla pero no estaba de mas llevarla consigo para una mayor seguridad en caso de ser descubierto, después de todo, estaba lleno de venganza pero no era estúpido.

La encontró finalmente, hablaba con un hombre, su conversación podía escucharse en la distancia si se prestaba la suficiente atención; hablaban considerablemente alto. No era de importancia para el hombre, lo dejo de lado, fijándose simplemente en su posible victima. Cuando escucho el apellido Astrid en las palabras del obrero, no pudo evitar cerrar los puños con furia, todos los recuerdos de la tortura volvieron a su mente, sus ansias de venganza aumentaban.

De lejos la siguió hasta que llego a un callejón. Tenia el elemento sorpresa de su lado, aunque no era algo que le entusiasmara. Empezó a calmarse, regulo su respiración, frunció el seño y observo a la victima entrar en lo que seria una trampa mortal; la joven podría escucharlo así como podría interpretarlo como los sonidos del viento, aunque Hector preferiría que lo escucharan. Entró al callejón de manera silenciosa, manteniendo su respiración calmada, ella ya se habría dado cuenta de su presencia para entonces. -¡DAGMAR!- Grito con furia. -¡ALÉGRATE! ¡TU EXISTENCIA ACABARA AQUI Y AHORA!-

Con toda su velocidad y cargado con su ira se lanzo hacia adelante, movió su brazo derecho hacia atrás y lo giro de modo que la palma de su mano quedara mirando al cielo y cerro el puño, para impulsar el brazo con todas sus fuerzas en dirección a la joven, el tiempo anterior que había tenido para regular su respiración había tenido efecto a la hora de canalizar sus fuerzas, por lo que el golpe, si conectaba sin ningún tipo de defensa, iba a traer consigo un daño considerable a la presa del vengador, aun asi, este sabia que no seria suficiente para acabarla, siempre que fuera quien el pensaba que era.

No se alejo después de lanzar el golpe ni posterior a los efectos de este, no iba a darle oportunidades de escapar.

Datos de Combate:

por **Auros** Dom Jul 03, 2016 1:58 pm

El miembro 'Hector Eachann' ha efectuado la acción siguiente: Dados de batalla

'Tirada Rango 1' : 10

por **Astrid Dagmar** Dom Jul 03, 2016 8:34 pm

“—¡DAGMAR!—”

Sí, alguien le había seguido. Le estaba llamando, y no parecía ser muy amigable. Tampoco podía reconocer aquella voz, o más bien, a su cerebro no le había dado tiempo a analizar si pertenecía a alguien conocido. De hecho, antes de que pudiera reaccionar para mirar en la dirección de donde parecía venir aquella persona, escuchó un grito amenazante. Una verborrea que afirmaba el cese de su existencia en ese preciso instante, motivo que quizás fuese fuente de regocijo para quien quiera que desease verle muerta. Desde que era neutral no había hecho demasiados enemigos, pero sí que se había metido en líos importantes que involucraban a peces gordos. Y eso no era nada bueno, teniendo en cuenta que personas de ese tipo podían contratar a un sicario con tan solo chasquear los dedos.

El tiempo se detuvo durante unas milésimas de segundo cuando notó un impacto en la nuca, provocándole un aturdimiento severo que le hizo dar un traspiés hacia delante. ”Pero qué…” A pesar del desconcierto que se generó por la situación (y por el golpe, claro estaba), Astrid consiguió darse la vuelta mientras se apartaba lo suficiente como para dejar una distancia prudente entre ella misma y el improvisado atacante. Adoptó una postura defensiva con sus puños, aunque las rodillas le flaqueaban debido al atontamiento que padecía.

—¿Quién…?—pausó su pregunta, dándose un poco de tiempo para recobrar el aliento y observar mejor a su contrincante. Por supuesto, no podía entretenerse demasiado, y todas estas acciones ocurrían en cuestión de segundos. En cualquier momento ese tipo (cuyas facciones aún no podía ver con claridad, debido a que se le había nublado ligeramente la vista por el golpe recibido) podría volver a realizar una ofensiva. ¡Qué momento más estupendo para no tener una espada encima, desde luego! Por no decir que no llevaba nada metálico encima. Al menos con eso podría crear alguna pequeña arma improvisada, pero la suerte no estaba de su parte.

Parpadeó lentamente al tiempo que su visión se hacía más nítida. Su mente se había quedado bloqueada, puesto que no era capaz de reconocer al hombre que tenía delante de ella, pese a que había algo en su interior que le indicaba que esas facciones las había visto en alguna otra parte. No recordaba ni cuando, ni donde, pero esa sensación no iba a desaparecer así como así. No era un deja vu, ni mucho menos.

Sin pararse a pensar mucho más, cerró su mano para formar un puño y llevó el brazo hacia atrás para tomar impulso, en un movimiento parecido al que había realizado su oponente. Claro que de esto ella no tenía ni idea. Incluso creía que ese hombre portaba algún tipo de arma contundente, puesto que no consideraba normal la fuerza del impacto recibido. Y no iba a huir: no, desde luego que no. Si el bandido le perseguía, podría poner en peligro a quienes le rodearan, cosa que no le convenía en absoluto.

Finalmente, terminó por echar su brazo hacia delante, en un intento mediocre de arremeter un puñetazo al adversario. Ni siquiera sabía si le había dado o no, puesto que aún tenía la cabeza dándole vueltas. ¡Menudo golpe que le habían dado! —Tú…—Jadeaba, aún tratando de volver en sí. —No sé… no sé quién eres. Pero te advierto… que te costará matarme,—masculló, dándose la vuelta para encararlo otra vez.

datos:

por **Auros** Dom Jul 03, 2016 8:34 pm

El miembro 'Astrid Dagmar' ha efectuado la acción siguiente: Dados de batalla

#1 'Tirada Rango 1' : 9

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#2 'Tirada Rango 1' : 6

por **Hector Eachann** Lun Jul 04, 2016 6:24 pm

Todo pasaba muy rápido, casi sin darse cuenta, recibió un ágil contraataque de Astrid en el pecho, lo que lo hizo retroceder varios pasos hacia atrás, tambaleándose un poco, interrumpiendo también con el ritmo de su respiración. Una sonrisa se dibujo en su rostro y dejo salir un carcajada. -No esperaba menos... Dagmar.- se recompuso lo mejor posible, no podría utilizar su técnica de nuevo, no con la misma efectividad que antes. -Hazlo divertido... No espere tanto tiempo por nada.- intentaba regular lo mas posible su respiración.

-No te contengas. Estuve esperando esto por mucho tiempo. Mi ansiada venganza.- adopto una pose de combate mientras miraba fijamente a Astrid. -No volverás a encontrarte con el hombre que viste hoy. No volverás a ver a ninguno de tus conocidos. Espero que hayas disfrutado del día, pues, no veras otro amanecer.- Terminó de decir todas las amenazas que se le habían ocurrido, en realidad, buscaba tiempo para calmar su respiración. Retrajo su brazo derecho hacia atrás, mientras que su mano izquierda pasaba a estar frente a su rostro a unos treinta centímetros, casi cerrada.

Recordó entonces lo que la joven había preguntado poco después de recibir el golpe, y nuevamente después de lanzar su ataque. -¿Que quien soy? Tras tantos años de planear el momento... No tendría gracia que murieras sin saber mi identidad. Te haré recordarlo poco a poco.- dijo mientras arremetía para intentar asestar un puñetazo en su contrincante. Podría notarse fácilmente la diferencia entre la potencia de este ataque y el anterior, aun no se recuperaba por completo.

-Cuando sepas mi nombre, no dejare que lo vuelvas a olvidar, Dagmar.- Dijo al momento de impactar. Después de lanzarse hacia adelante, volvió a su posición anterior, sin saber el resultado de su golpe, estaba esperando otro contraataque de la joven en cualquier momento.

Datos:

por **Auros** Lun Jul 04, 2016 6:24 pm

El miembro 'Hector Eachann' ha efectuado la acción siguiente: Dados de batalla

#1 'Tirada Rango 1' : 3

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#2 'Tirada Rango 1' : 1

por **Astrid Dagmar** Lun Jul 25, 2016 2:44 pm

La Rubinus se frotó los nudillos de la mano que había logrado asestar un golpe a su atacante, puesto que había empleado demasiada fuerza en él a pesar de no sentirse en condiciones para ello. ¿El hombre decía que había esperado mucho tiempo? ¿Con qué motivo? Estaba claro por su actitud, por lo que había dicho y por lo que diría después que no apreciaba demasiado a Astrid y que mucho menos quería que estuviese viva, pero aún así, la joven no tenía ni la más mínima idea de quién podría ser.

Su ansiada venganza…

Definitivamente había visto a ese hombre antes, pero no conseguía identificarlo. Sabía que no le estaba confundiendo con otra persona — no sólo porque mencionaba su apellido, si no porque cada vez estaba más segura de que se había encontrado con él mucho antes. Pero… ¿quién era? No tenía apariencia de pertenecer al gobierno, por lo que algún enemigo proveniente de su etapa como revolucionaria podría quedar descartado. Nunca había puesto un dedo encima de los civiles, por no decir que siempre había tratado de mantener el mínimo contacto posible con alguien ajeno a su pelotón.

Consiguió esquivar el puñetazo del contrario, aunque éste le rozó la mejilla izquierda. —Tendrás que esforzarte más si de verdad quieres que no vuelva a abrir los ojos nunca más,—comentó con sorna, tratando de aprovechar la situación para tratar de darle una patada. Desafortunadamente, tropezó con su propia capa en el intento, dando un patético traspiés hacia atrás y cayendo de espaldas.

Genial, ahora él tendría más ventaja para herirle de cualquier modo. Se arrastró hacia atrás para poder conseguir una distancia apropiada para levantarse, ésta vez más preocupada por no recibir un puñetazo en toda la boca (como mínimo) que en la identidad de su oponente. Identidad que no le daría tiempo a olvidar si moría, desde luego, pero que estaba segura que recordaría si sobrevivía a aquel improvisado ataque.
Improvisado para ella, podríamos decir.

—Ni siquiera sé de qué estás hablando. Seas quien seas…—Hizo una pausa para poder levantarse y adoptar otra vez una postura defensiva. Llevó la mano derecha a su cinturón por puro reflejo, acordándose así de que no tenía su espada consigo. Suspiró un poco, dejando entrever la frustración ante tal despiste. —Seas quien seas, necesitarás suerte para hacer que me acuerde de ti.—O no, pero la frase no la estaba usando de forma literal, desde luego. —Tengo la cabeza muy dura,—murmuró, de nuevo con un deje de cinismo que tarde o temprano tendría que controlar si no quería enfurecer aún más al asaltante. ¿Quién sabía lo que lograría con eso?

Datos de batalla:

por **Auros** Lun Jul 25, 2016 2:44 pm

El miembro 'Astrid Dagmar' ha efectuado la acción siguiente: Dados de batalla

#1 'Tirada Rango 1' : 3

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#2 'Tirada Rango 1' : 2

por **Hector Eachann** Lun Ago 01, 2016 8:59 pm

¿Donde esta mi doble 10?//

por **Auros** Lun Ago 01, 2016 8:59 pm

El miembro 'Hector Eachann' ha efectuado la acción siguiente: Dados de batalla

#1 'Tirada Rango 1' : 3

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#2 'Tirada Rango 1' : 1

por Contenido patrocinado

Christa Hellemond AdministradoraMensaje privado	Astrid Dagmar AdministradoraMensaje privado
Adam Benjamin AdministradorMensaje privado	Kougyoku Ren AdministradorMensaje privado

Aldara Sashenka NarradoraMensaje privado	Katja Duhn NarradoraMensaje Privado
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Fingon Sindar
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SISTEMA MUNDIAL DE SPIRIT SOUL
Categorías	Chaos	Spatium	Tempus	Revolucionarios & Anti gobierno
Territorio	225	240	110	80
Infraestructura	170	320	330	60
Vehiculos	150	150	195	250
Armamento	90	21	21	45
Soldados	80	70	70	110
Prestigio	80	50	120	120
Total:	1435	3747	1531	2085

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MEJORAS MUNDIALES DE SPIRIT SOUL
Categorías	Chaos	Spatium	Tempus	Revolucionarios & Anti gobierno
Vehiculos	Lvl 0	Lvl 0	Lvl 0	Lvl 0
Infraestructura	Lvl 1	Lvl 1	Lvl 1	Lvl 1
Armamento	Lvl 1	Lvl 1	Lvl 1	Lvl 1
Links Necesarios:	Info del sistema	Ramas de mejoras	Tierras dominadas	Contador de puntos

MEJORAS DE CHAOS
Tipo	Nivel	Mejora	Adquirida el día
Mejora de Armamento	1	Armadura reforzada. Los soldados cubren su espalda, hombros, y brazos con armaduras mágicas. (+17 puntos al dado de defensa de cada soldado)	26/5/2016
Mejora de Infraestructura	1	Geisers de lava.Tus murallas son cubiertas por geisers de magma que queman todo lo que se acerca. (+100 hp a cada muralla al defender de una invasión)	21/8/2016

MEJORAS DE SPATIUM
Tipo	Nivel	Mejora	Adquirida el día
Mejora de Armamento	1	Pólvora Delux. Las armas del reino sufren una mejora total. (+20 al dado de ataque de cada soldado)	26/5/2016
Mejora de Infraestructura	1	Se refuerzan las murallas del reino en edificios gubernamentales. (+100hp a todas las murallas al defender de una invasión )	24/8/2016

MEJORAS DE TEMPUS
Tipo	Nivel	Mejora	Adquirida el día
Mejora de Infraestructura	1	Campo tecnológicamente alterado. Un campo electro-magnético rodea tus murallas protegiéndolas del daño enemigo. (+150 hp a todas las murallas al defender una invasión)	26/5/2016
Mejora de Armamento	1	Cañón electromagnético. Los soldados son armados con tecnología de punta. (+15 al ataque de cada soldado)	21/8/2016

MEJORAS DE REVOS & ANTI-GOBIERNO
Tipo	Nivel	Mejora	Adquirida el día
Mejora de Armamento	1	Armas cortantes (Espadas): los forjadores y herreros abdicados a la revolución son considerados los mejores entre las regiones. (+20 al dado de ataque de cada soldado)	26/5/2016
Mejora de Infraestructura	1	Diavolik Force. La manipulación con éxito de materiales para crear tus murallas, hace que la protección que esta otorga aumente considerablemente. (+120 hp a todas las murallas al defender de una invasión)	21/8/2016


Disponible	Hikari Hiroshi	Jellal Slater