Los percances de ser Rubinus [Li Wei]

por **Astrid Dagmar** Lun Oct 17, 2016 12:15 am

—Así es. Li Wei permanece encerrada allí, en Mills. Formó un alboroto, no estoy muy seguro de lo que ocurrió exactamente, pero mi padre trabaja allí, en los calabozos de una de las bases militares, y al ver que era una Rubinus decidió comentármelo…—El joven miembro Rubinus miraba a la sub-líder como si ésta le estuviese intimidando, pero lo cierto era que sentía cierto temor ante su reacción. Ya de por sí parecía bastante disgustada con la noticia… y podría pagarla con él. O eso creía. Realmente, no la conocía de nada, pero tras oír sobre lo sucedido en Rihm tiempo atrás, no veía a la mujer como alguien muy pacífico.

Astrid suspiró, recostándose sobre el respaldo de la silla de madera que tenía en su pequeño despacho. Era bastante humilde, no era como si pudieran permitirse más, pero al menos era un sitio cómodo. Su expresión se suavizó, mostrando esta vez cierta preocupación en sus facciones, justo antes de llevarse el pulgar y el corazón de su diestra al puente de su nariz, como si tratase de aliviarse una leve cefalea originada en dicho punto. —Ah… Bueno, si no le ocurría esto a ella, le ocurriría a cualquiera de nosotros. Es a lo que debemos atenernos si defendemos a civiles a toda costa.—Suponía que era eso, o más bien, quería suponerlo. —Bien. ¿Podrías indicarme en qué zona está, exactamente?

Se negó a perder más el tiempo en cuanto terminó de recibir todas las indicaciones por parte del joven. Spatium Urbanis y la Ciudad de Mills no estaban muy cerca, pero probablemente llegaría en unas horas si escogía un transporte rápido. Después de todo, la pobre Li se estaría muriendo del asco por estar tanto tiempo allí. Probablemente debería haber avisado a Jun, su hermano, pero Astrid no quería entretenerse mucho más y no tenía ni idea de dónde podría encontrarse su gemelo.

Probablemente tendría que pagar alguna fianza para sacarle de allí. No le importaba, tenía algunos ahorros encima y suponía que no debería ser muy caro, pero si aún no había salido del calabozo sería precisamente por ese pequeño pero importante detalle. Total, no sería la primera vez que haría algo por alguno de sus compañeros… y probablemente ella terminaría viéndose en una situación similar tarde o temprano. ”Percances de ser Rubinus,”pensó, mientras se encaminaba a la base en cuestión.

Ya había estado allí antes, siendo revolucionaria. De hecho, estuvo encerrada allí durante apenas unas horas. Por fortuna, en ese entonces no se supo de su pertenencia a dicho bando y simplemente se le tomó como una ladrona cualquiera… y la buena actitud de aquella persona que le encerró terminó por salvarle el pescuezo. Se preguntó si seguiría por allí, pero no era el momento de realizar visitas extraordinarias aparte de lo imprescindible. Además, era bastante probable que hubiera ascendido o hubiera cambiado de puesto. Con ese comportamiento, seguramente habría llegado lejos, aún en el periodo de tan sólo un año.

Tras realizar el papeleo pertinente y pagar lo que debía (que por fortuna no fue demasiado), un guardia le guió hasta la celda donde estaba Li. —Aquí es. Wei, te sacan de aquí.—Abrió la puerta y se hizo a un lado, permitiendo que Astrid pudiera asomarse a verle. Por suerte, las condiciones de aquel habitáculo eran… humanas. Nada en comparación con lo que uno podría encontrarse en Chaos. —Ah, Li. Menos mal.—Suspiró de alivio. No tenía mala pinta, por suerte. El soldado se apartó un poco y decidió esperar al inicio del pasillo, como si intuyera que ambas querrían intercambiar algunas palabras en privado. Intuición o metarol, eso queda a gusto de quien quiera romper la cuarta pared. Pero ese no es el caso. La Rubinus se acercó a su compañera, mirándole rápidamente de arriba abajo en busca de alguna posible herida. —¿Estás bien? ¿Qué te ocurrió?

por **Li Wei** Lun Oct 17, 2016 3:14 pm

Acabar encerrada en una prisión de Mills no era precisamente parte de sus planes para pasar el día, en realidad ni tan siquiera lo sería para pasar una hora pero no le había quedado otro remedio después de la que se había montado en la zona de restaurantes. Ni opuso resistencia ni dijo nada tras el arresto, ¿Para qué? Aún si les decía la verdad no tenía ninguna prueba que le respaldara y había testigos de sobra de que ella lanzó el primer ataque, claro que todos esos testigos no sabían el por qué lo había hecho, pero desde luego no se iban a poner de su parte sin más. En cuanto entró a la celda se sentó con las piernas cruzadas y las manos unidas por los nudillos cerrados en puño, con lo que sería las palmas de las mismas en dirección al techo y con los ojos cerrados, así se mantuvo todo el tiempo desde su llegada hasta que los ruidos del exterior le obligaron a abrir los ojos por fin. No sabía ni cuánto tiempo había pasado desde que llegó, para ella el tiempo había dejado de tener valor en el preciso instante en que entró a aquella celda y perfectamente podría haber pasado una semana que no se habría dado cuenta, salvo por la sed y el hambre lógicamente. Lo que vio al abrir los ojos, además de aquella celda en la que había permanecido inmóvil, fue al guardia en la puerta que le había dicho que venían a sacarle, y al apartarse de en medio para dejar paso a la persona que le había sacado de allí pudo ver que se trataba de la Sub-Líder, Astrid. El guardia no se quedó ahí sino que salió fuera como si supiera lo que iba a pasar, o al menos tenido el presentimiento de ello y entonces la mujer entró a la celda para ver cómo se encontraba la administradora, preguntándole que si estaba bien y lo que había ocurrido.

Li se levantó del suelo y sacudió inutilmente su ropa, que para no variar estaba llena de tierra, polvo y sangre, con algunas partes desgarradas pero ella en sí parecía estar bien, había aprovechado para curarse poco a poco mientras estuvo en la celda así que en realidad estaba perfectamente, quitando la suciedad, el pelo suelto y algo enmarañado y la ausencia de la chaqueta que siempre llevaba consigo… hasta ese momento. -Físicamente sí, estoy perfectamente…- Respondió con tranquilidad, sin alzar la voz ni nada parecido pero si se notaba en su forma de hablar que no estaba del todo bien, como si se estuviera guardando la ira dentro haciendo uso de todas sus fuerzas, que no era el caso, pero casi. -Lo que pasó es que me encontré con cierta persona en la ciudad, cierta persona que se suponía habíamos encerrado y de repente no estaba en su celda…- Pues que la sutilidad nunca fue lo suyo y en ese momento tampoco le importaba lo más mínimo, como tampoco le había importado demasiado la que había liado en la zona de restaurantes cuando se encontró con la mujer rubia y no dudó en transformarse en fénix para atacarle con todas sus fuerzas hasta que al final, por pura lástima dejó el combate y se dejó capturar, aceptando la responsabilidad de sus actos impulsivos. -Me contó algunas cosas… como por ejemplo el por qué no estaba en su celda.- La verdad es que había esperado que fuera Jun quien le sacara de ahí, pero tampoco le vino nada mal que hubiera venido ella, de hecho había pensado en hablar con ella en cuanto saliera de la celda pero al parecer se había podido ahorrar el viaje. A pesar de lo que pudiera parecer por su expresión y forma de hablar en la que se podía sentir la rabia contenida, no pretendía ni pensaba comenzar otra batalla ni mucho menos con Astrid, tenía ciertas cosas que preguntarle y quería respuestas, pero no tenía ninguna razón por la cual atacarle, al menos eso esperaba.

por **Astrid Dagmar** Lun Oct 24, 2016 11:53 pm

Ver el estado de Li le hizo pensar que quizás le hubiese venido bien que Astrid hubiera traído alguna muda o algo por el estilo para poder cambiarse, aunque dada la diferencia de altura, probablemente no le estaría bien. Aún así, siempre sería mejor que estar llena de sangre y tierra. Se alivió cuando la chica confirmó que se encontraba perfectamente… en cuanto al físico se refería. Evidentemente, estar encerrada durante a saber cuánto tiempo habría dejado mella en su psique, aunque fuese sólo un poco. —¿Físicamente?—Ladeó la cabeza, arrugando un poco el ceño. En su forma de hablar podía notarse que, evidentemente, algo iba mal. Si bien no eran muy cercanas ni lo habían sido antes, un atisbo de preocupación se asomó de forma natural en el rostro de la sub-líder. —Dime… ¿qué te ha ocurrido?—preguntó, para ser respondida casi de inmediato.

No había que tener ni dos dedos de frente para darse cuenta de quién estaba hablando. Cerró los ojos tras exhalar un suspiro de resignación, preguntándose qué diantres habría pasado. Confiaba en Hikari, pero temía que hubiera tenido algún arrebato o que por el contrario Li hubiera malinterpretado sus acciones en algún momento. No tenía manera de saberlo, al menos no hasta que continuaran hablando. Tampoco iba a preguntarle para confirmar de quién se trataba: hacía tiempo que no encerraban a nadie, principalmente por el hecho de que ese caso era casi imposible que se llevara a cabo. Ni siquiera con criminales de la peor índole, pues estos últimos solían ser retenidos por el gobierno. Ellos simplemente acudían a las autoridades… y ahí se acababa su buena acción del día. No podían hacer más nada, después de todo. Con la cazarrecompensas la situación fue distinta.

Volvió a abrir los ojos cuando mencionó que le había hablado sobre por qué no estaba en la celda. ¿Qué sabía exactamente? Había varias cosas que descartar, y otras bastante obvias. Una que era imposible que hubiese soltado era aquella sobre sus intenciones personales con respecto a fortalecerse, principalmente porque esa razón no era la principal, ni siquiera la secundaria, si no más bien algo que no tenía importancia al lado de los otros por qués. Aquellas intenciones eran conocidas únicamente por Hikari y hasta la fecha nunca nadie más lo había sabido, de forma que creía incapaz que se lo hubiese comentado a Li. Y lo obvio… era simplemente que no podían retenerla por mucho tiempo.

Notó cierta molestia en su expresión y en su forma de hablar, pero trató de no ponerse a la defensiva en ningún momento. Era ridículo, después de todo, y no tenía tampoco razones para ello. Relajó la mueca de preocupación que tenía desde hacía unos segundos y se cruzó de brazos, dispuesta a escuchar más detenidamente lo que fuera que supiese la administradora. —¿Qué te dijo exactamente?—le preguntó. Teniendo en cuenta su aparente enojo, probablemente no lograría entender que no había manera alguna de haber retenido a la súcubo. Suspiró un poco otra vez, a la vez que varias preguntas se formulaban en su mente. ¿Había sido solo una discusión? ¿Simplemente habían hablado?...No, nada que ver, de lo contrario… Li no estaría encerrada. —¿Qué fue lo que pasó?—Su tono de voz era muy tranquilo, pues quería que la joven dejara de estar tan tensa de forma innecesaria. ”¿Ella también está aquí?” quiso decir. Probablemente no, y evitó hacer esa pregunta por el momento porque quizás pensaría que sus prioridades eran distintas a las que tenía en mente, pero en realidad sólo quería saber hasta dónde habían llegado y si ambas habían pagado del mismo modo.

por **Li Wei** Miér Oct 26, 2016 4:36 pm

No esperaba que el día acabara con una agradable conversación y un abrazo antes de despedirse e ir cada una por su camino pero tampoco esperaba que ambas se dieran de hostias ahí mismo ni que se insultaran mutuamente en una discusión acalorada, realmente solo quería hablar de ciertas cosas en las que había estado pensando para seguir con su camino, uno muy diferente. Aun cuando meditar tranquilamente no era lo suyo, había pasado todo ese tiempo en la celda intentando poner en orden algunas ideas y pensamientos, su mente había recibido quizá demasiada información que no conseguía procesar adecuadamente estando de un lado para otro como solía estar, necesitaba concentrarse en pensar bien lo que iba a hacer ahora. -Si, físicamente estoy sana y curada, aunque con alguna cicatriz nueva para la colección. Mentalmente… tengo demasiadas cosas en las que pensar y algunas necesitan respuestas.- Se cruzó de brazos mientras miraba fijamente a la Sub-líder, teniendo que elevar un poco la mirada por ser algo más baja que ésta pero sin modificar para nada la expresión, dentro de lo que cabía estaba bastante tranquila y había logrado contener su mal humor bastante bien, todo un logro para alguien que lo arrastraba desde hacía unos días. Tierra, ceniza y sangre, realmente no veía necesario que diera demasiados datos sobre lo que había pasado porque era bastante obvio con solo verle la ropa y el aspecto en general que desprendía la morena, además de la ausencia de una ducha, mostraba signos de batalla por donde quiera que mirara.

Que lo primero que preguntara Astrid fuera nada más y nada menos que “¿Qué te dijo exactamente?” le dio que pensar, casi parecía que estuviera más preocupada de la posible información que pudiera tener que de los sucesos en sí y por lo que finalmente preguntó poco después, lo que pasó. Li podía ser muchas cosas, impulsiva, imprudente, salvaje y algo lenta para coger algunas cosas incluso, pero tampoco era gilipollas, estaba claro que no sabía de la misa la mitad y ya lo poco que sabía no le gustaba nada, hasta empezaba a tener miedo de preguntar y enterarse de lo que se estaba cociendo ahí. Tampoco esperaba que se lo fuera a contar, total, ¿Quién coño era ella para saber nada de eso? Nadie, absolutamente nadie, solo una administradora problemática a la que no le gustaba que le infravaloraran constantemente por su apariencia, cosa que ya no sucedería más, sexo o por su cargo de los que algunos incluso se burlaban. -Menos de lo que me gustaría, es obvio que os traéis algo entre manos y no me lo vas a querer contar… Pero si me dijo que le habías soltado tú, entre un montón de absurdeces ególatras en las que se creía que capturar un criminal compensa destruir una ciudad en la que podría haber muerto gente, aunque no llegara a suceder. Todo eso mientras yo intentaba matarla.- No se lo iba a ocultar, por un momento quiso matarla, y por mucho que la rubia de las narices dijera lo contrario, por mucho que lo negara y por mucho que su ego no le permitiera aceptar la verdad, podría haber llegado a matarla de haber querido o, como mínimo, dejarla coja para siempre. Maldita sea su conciencia que le dio lástima y le obligó a detenerse, dejándose capturar para pagar por lo que había hecho durante el combate accidentalmente mientras ella escapaba.

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Christa Hellemond AdministradoraMensaje privado	Astrid Dagmar AdministradoraMensaje privado
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Aldara Sashenka NarradoraMensaje privado	Katja Duhn NarradoraMensaje Privado
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Ithel Ibner NarradorMensaje Privado	Kvothe Arliden NarradorMensaje Privado
No disponible NarradorMensaje Privado	Hikari Hiroshi NarradorMensaje Privado

Fingon Sindar
Kuro Usagi	Orion Ärud	Aldara Sashenka	Quintus Dei (Libre)

Ichinose Takumi
Isela Adramelech	Baphomet (Libre)	Libre	Adam Benjamín

SISTEMA MUNDIAL DE SPIRIT SOUL
Categorías	Chaos	Spatium	Tempus	Revolucionarios & Anti gobierno
Territorio	225	240	110	80
Infraestructura	170	320	330	60
Vehiculos	150	150	195	250
Armamento	90	21	21	45
Soldados	80	70	70	110
Prestigio	80	50	120	120
Total:	1435	3747	1531	2085

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MEJORAS MUNDIALES DE SPIRIT SOUL
Categorías	Chaos	Spatium	Tempus	Revolucionarios & Anti gobierno
Vehiculos	Lvl 0	Lvl 0	Lvl 0	Lvl 0
Infraestructura	Lvl 1	Lvl 1	Lvl 1	Lvl 1
Armamento	Lvl 1	Lvl 1	Lvl 1	Lvl 1
Links Necesarios:	Info del sistema	Ramas de mejoras	Tierras dominadas	Contador de puntos

MEJORAS DE CHAOS
Tipo	Nivel	Mejora	Adquirida el día
Mejora de Armamento	1	Armadura reforzada. Los soldados cubren su espalda, hombros, y brazos con armaduras mágicas. (+17 puntos al dado de defensa de cada soldado)	26/5/2016
Mejora de Infraestructura	1	Geisers de lava.Tus murallas son cubiertas por geisers de magma que queman todo lo que se acerca. (+100 hp a cada muralla al defender de una invasión)	21/8/2016

MEJORAS DE SPATIUM
Tipo	Nivel	Mejora	Adquirida el día
Mejora de Armamento	1	Pólvora Delux. Las armas del reino sufren una mejora total. (+20 al dado de ataque de cada soldado)	26/5/2016
Mejora de Infraestructura	1	Se refuerzan las murallas del reino en edificios gubernamentales. (+100hp a todas las murallas al defender de una invasión )	24/8/2016

MEJORAS DE TEMPUS
Tipo	Nivel	Mejora	Adquirida el día
Mejora de Infraestructura	1	Campo tecnológicamente alterado. Un campo electro-magnético rodea tus murallas protegiéndolas del daño enemigo. (+150 hp a todas las murallas al defender una invasión)	26/5/2016
Mejora de Armamento	1	Cañón electromagnético. Los soldados son armados con tecnología de punta. (+15 al ataque de cada soldado)	21/8/2016

MEJORAS DE REVOS & ANTI-GOBIERNO
Tipo	Nivel	Mejora	Adquirida el día
Mejora de Armamento	1	Armas cortantes (Espadas): los forjadores y herreros abdicados a la revolución son considerados los mejores entre las regiones. (+20 al dado de ataque de cada soldado)	26/5/2016
Mejora de Infraestructura	1	Diavolik Force. La manipulación con éxito de materiales para crear tus murallas, hace que la protección que esta otorga aumente considerablemente. (+120 hp a todas las murallas al defender de una invasión)	21/8/2016


Disponible	Hikari Hiroshi	Jellal Slater