[Misión de Gremio Rango 5] [Cacería Especial (Balrog)] [Darth Nihilus, Arno Mireault, Fingon Sindar, Owen Hawk, Shiro Ritsu, Kuro Usagi & Gissel Gremory]

por **Gissel Gremory** Sáb Mar 05, 2016 5:17 pm

No era tampoco ninguna novedad que la Cazarecompensas tomara trabajos libres para un bando u otro, después de todo, ella ya era una espada sin amo que vagaba libremente y básicamente hacia lo que quería. Llevaba ya un tiempo siendo parte del Brüder Of Fire, gremio fundado por aquel rubio descarado y de mal carácter que conocía tan bien, una persona tajante con la que en un pasado no tuvo problemas en agarrarse a golpes cuando la paciencia de la pelirroja llegaba a cierto límite…Ese era su nuevo “destino” de momento, aportar un poco al gremio y luego simplemente ver qué camino seguir. Ansiaba cierto gusto que había adquirido en el gobierno, tantos años de entrenamiento militar forjaron en ella una personalidad compatible referente a muchos aspectos…aunque para su desgracia, era una mujer que se dejaba llevar por las emociones fácilmente si conseguías picarla en el punto adecuado.

Esa mañana todo inició como de costumbre en el gremio, siendo un día magnifico estaba en sus planes ir a entrenar un poco al bosque del Cosmos, pasar tiempo libre haciendo lo que mejor le salía…meterse en problemas. Si, su humor era magnifico hasta que se topó con cierto rubio presumido en cuestión, quien no tuvo mejor idea que informarle sobre una nueva misión a la que debía ir. ¿Qué carajos?, a la Valkiria no le gustó nada aquello, le replicó y hasta puede que amenazara con romperle la cara, pero a fin de cuentas, solo eran esas típicas discusiones que tenían desde que se conocieron largo tiempo atrás…Uno intentando implementar la supremacía de su existencia por encima del otro, lo que generaba ciertos roces o hasta el inminente peligro de incendiar la sede del gremio.

Claro…cuando esos dos entraban en ira, lo mejor era que se alejaran hasta que todo pasara y cuando la fémina creyó por fin librarse del asunto, se le ordenó ni más ni menos asistir a como dé lugar. ¿Qué generó aquello?, una mirada filosa con ligero enojo altanero, orgullo en su máxima expresión en cada sonrisita y un sutil “Púdrete” que solía dedicarle bastante seguido. ¿Qué más podía hacer?, negarse no era una opción si deseaba permanecer en el gremio…Así que sin más, procedió a retirarse para darse una ducha rápida, preparar algunas cosas que seguramente controlaría antes de partir.

Asunto zanjado, ella fue abriendo lentamente los ojos a medida que recordaba los sucesos previos, sin embargo esa mirada tajante como segura de sí misma proclamaba una pronta victoria si es que se movían bien las piezas en el tablero de ajedrez. Por ese entonces dedicó una mirada inquisidora hacia el volcán, analizándolo con sumo cuidado e inevitablemente sintiendo admiración…Apenas un ligero suspiro abandonó sus labios cuando la brisa caliente meció hacia atrás esos largos cabellos de manera hipnótica, los que solo conseguían enmarcar más la figura de la ex guerrera gladius. Si bien la temperatura era lo suficientemente elevada como para sofocar, ella se encontraba bastante cómoda a causa de dos factores ciertamente importantes. Primero, su elemento primario y natural siempre había sido el fuego, generando una tolerancia al mismo mucho mayor. Segundo, tantos años desempeñando un puesto como Guerrera Gladius en el mismo Chaos, le añadió cierto gusto por las altas temperaturas…Incapaz de sofocarse o hasta sudar, para ella era como si fuese un simple día de primavera algo caluroso, pero no molesto.

-Hraesvelgr, mantente cerca y cuidado por donde andas. Esta será una misión un poco larga, chico, pero es necesario que veas, aprendas y te fortalezcas- Admitió en un tono de voz sutilmente imperativo hacia el cuervo tormentoso que remontaba el vuelo ante dicha orden, alejándose un poco del Kitsune que también permanecía detrás de la pelirroja…Sus dos mascotas relativamente recientes que de momento solo eran simples acompañantes, pero no por eso menos queridas. La fémina poseía buena mano con las bestias, del mismo modo en que había criado de manera ejemplar una loba alfa, un cerbero y un snowman…también pensaba actuar del mismo modo con tales “cachorros”.

-Tsk, condenado Jhonatan. Hubieras venido tú, yo no tengo nada que ver con el gobierno- Murmuró muy por lo bajo al mismo tiempo en que hacia crujir los nudillos con delicadeza, prestando atención a todo lo que ahí mismo acontecía…El sonido del viento, el de las pequeñas rocas desprenderse desde la parte más alta y todo sonido natural habido y por haber que era captado por los sentidos de Gissel. Restaba únicamente esperar a los demás miembros, ya que por diversas causas que tuvo antes que atender, se le hacía más fácil adelantarse. Tenía entendido que la mayoría eran todos altos cargos del gobierno, aunque eso no era precisamente alto que la incordiase a molestase. Su única molestía se debía a que por cuestiones de tiempo no podría visitar el bosque, al menos en esa oportunidad

por **Shiro Ritsu** Sáb Mar 05, 2016 7:29 pm

Era sin duda la primera misión del muñequito de cabello largo y rosado, no tenía experiencia alguna con ese gremio de gente ardiente(al cual entró solamente por conveniencia, para ser sinceros) y su maestra no le acompañaba (lo que hacía que nadie midiese sus acciones ilógicas), por si fuera poco, era en un volcán (algo que quizás visto de una manera positiva fuese bueno por no importar causar destrozos, dada la ausencia de vida vegetal) un sitio con altísima temperatura, donde el simple echo de rozar el suelo podría hacer arder la tela... que por suerte no usaba el muñeco, puesto que su vestido estaba compuesto de la misma fibra mágica que su cabello, lo que la hacía resistente al calor de aquel inospito lugar, y donde se reunirían un grupito la mar de
"peculiar", por decirlo de alguna forma, del cual no conocía a absolutamente nadie (y teniendo en cuenta la personalidad del juguete no era algo muy aconsejable).

Sin pensar mucho en los temas problemáticos se tenia que juntar con el resto en las coordenadas de la propia misión, algo que se le daría fatal en circustáncias normales, pero que por la suerte del destino, tomaría menos de lo esperado, sintiendo a los integrantes entre toda aquella amalgama de naturaleza intentando sobrevivir a los constantes infiernos de aquella zona, antes de llegar intentó un análisis a la distancia pero.. sin resultado, tras lo cual optó por seguir su camino a saltitos como si fuese por un campo de flores recién bañadas por el rocío en una mañana primaveral, a la vez que cortaba el calor de su alrededor con unas hebras de su mágico y rosado cabello, abusando de su habilidad.

Una vez cerca de los demás integrantes, el pequeño no hizo más que acercarse lentamente, con una sonrisa tímida y cara de no romper un plato (aunque en realidad se los come) mientras analizaba minuciosamente los datos que podía de aquellos que estaban cerca... pero algo le hizo parar abruptamente. Con impetu saco sin pensarlo su enorme pajarito lleno de energía de debajo de la falda mostrándolo sin pudor. -Vamos Zapdos, sal de ahí abajo!, necesito que me escuches un momentito!-, le dijo a su cuervo mascota con ese eléctrico nombre. -No se que se supone que es un Blrgdfgh pero tenemos que derrotarlo y parece peligroso, así que deberás estar en un lugar más seguro!-, después de decir aquello el chico con elegante vestido blanco guardó incomprensiblemente a aquella negra criatura dentro de su peinado, aunque claramente el tamaño era ilógico, pero no parecía ni detenerle, ni importarle, es más estaba acostumbrado a hacer eso y el ave se sentía bien allí dentro.

Ya con el veredicto claro, se acercó con pequeños pasitos rapidos y juntos a una chica con aspecto frágil, y con una grácil cabellera azulada. Sin duda no era una humana normal (o esas orejas eran postizas), y había dado el mejor resultado de entre todos los presentes. -Holi!, disculpa, este es el grupo que participará en la misioncita?!-, musitó soltando florecítas. -Espero no haberme perdido, soy horrible con las direcciones jejeje~-, remarcó mientras seguía removiendo el calor con su habilidad, lo que le hacía tener un aire fresco alrededor notable para la desconocida.

Aquella misión ardiente estaba por comenzar al igual que sus relaciones con la gente que no era su maestra, por lo que lo que sucedería era todo un misterio que intentaba desenlazarse quizás de una manera algo apresurada.

por **Kuro Usagi** Sáb Mar 05, 2016 8:27 pm

Era aun algo novata o podría decirse que nueva en el puesto de los Custos Dei como la Quarto Dei, pero a pesar de eso, yo trataba de esforzarme mucho para no quedarme atrás. Por algo tenía tal cargo, que por ello tendría que demostrar tal cosa de que no era débil o cosas así. Pues no les iban a dejar a cualquiera ese tipo de puesto. ¿Verdad? Además de que me sentía orgullosa de mi puesto y no querría manchar este mismo de ninguna manera, aunque tampoco dejaría de ser yo misma. —¡Yes! ¡Esta vez me daré más a conocer!— Dije más para mi misma de forma entusiasmada, sin darme cuenta de que hable sola. Apenas me pude dar a conocer con anterioridad. Cosa que me había hecho sentir algo solitaria. Aunque tampoco por lo que había sucedido fuera a dar tiempo para darme a conocer o ese tipo de cosas. Ya que estábamos en un combate intenso en ese entonces y tampoco tenía la cabeza en ello hasta ahora.

Recientemente había solicitado ingreso a un gremio llamado Brüder Of Fire. El cual me aceptaron rápidamente. Cosa que realmente agradecí, ya que no pensé que me fueran a aceptar enseguida. ¿Cómo encontré el gremio? Pues sencillamente era muy hablado por muchos lados y me entro curiosidad por saber de que trataba este. Cuando lo supe, enseguida quise ingresar al lugar. También quería contribuir para no quedarme como decoración en este, pues se suponía que debíamos de ayudar todos de alguna manera. Aunque no sabía como contribuir exactamente bien con ellos. Hasta que me informe mejor como siempre. Después de todo. No quería estar en un lugar sin saber exactamente las cosas o me sentiría inútil, además de nerviosa si no hiciera algo bien.

Cuando finalmente me dijeron con que cosas podría contribuir, enseguida lo anote mentalmente para que no se me fuera y así emplearlas en un futuro. Por ello enseguida busque que podría hacer por el Brüder. Hasta que di con un una chica hermosa de cabellos rojizos, la cual parecía no tener un buen encuentro con un chico de cabellos rubios que era el lider del gremio. Pues ambos no parecían llevarse bien por como se miraban o hablaban. Ellos no pudieron verme o al menos desde la distancia en la que estaba. Alejada de estos dos desde cierta distancia que podía ver bien sus rostros al menos. Escuchando más bien gracias a mis orejas largas y azuladas lo que conversaban. Pues gracias a estos podía escuchar bien desde cierta lejanía. Yo como tonta escuchaba escondida en una pared, como si fuera una espía o algo así. Asomando apenas la cabeza para verlos y quien me viera, seguramente se quedaría extrañado por tal cosa. Omitiendo eso y volviendo con lo que escuchaba. Pude saber que le informaba sobre una nueva misión que había. Después de que terminaran de hablar. Cada uno se fue por su lado. Yo por mi parte aproveche entonces en ir tras el rubio y nada más ponerme en frente de él, le casi grite animada que yo también tomaría esa misión. Después de eso. No le daría tiempo a nada, porque me habría ido corriendo rápidamente al lugar de encuentro.

¿Podría hacer bien la misión y caerles bien a los que vayan a ir? ¿Seria difícil de hacerlo? Yo sabía que todo iba a salir bien, ya que no siempre todo tenía que pintar mal o así. Por algo era optimista. Asentí para mi misma y alce mi mano en un puño, sonriendo suavemente. Les haría ver que Kuro Usagi no portaba solo de decoración tal cargo, sino porque realmente me lo había ganado o al menos yo lo veía así. Además de que sinceramente quería aportar mucho de mi y no quedarme quieta en un lado como si nada. Pues que fuera una Custos, no quería decir que tuviera que estar quieta o siendo custodiada.

Ya omitiendo eso. Me tarde lo mió, aunque no tanto, para llegar al lugar de encuentro. El cual supe por escuchar toda la información que le dio a la chica de cabellos rojizos. La cual me encontré cuando llegué al sitio, además de dos animales que parecían ser sus mascotas. Nada más acercarme a unos pasos de esta, enseguida dije al elevar una mano y sonreír con amabilidad. —¡Buenas! ¡Soy Kuro Usagi! La Quarto Dei. ¡Espero ser una buena compañera!— Soné feliz o eso se podía notar mientras me presentaba a la chica de cabellos rojizos. Luego baje la mano lentamente, sin parar de mostrar una sonrisa sincera. Luego de eso. Observe a mi alrededor. Dándome cuenta que habíamos sido las primeras en llegar al lugar, aunque quizás se me podría haber pasado alguno sin darme cuenta. Pues sabía que iban a venir más a cumplir tal misión.

No se me ocurría que tema sacar. Aunque estaba sintiendo mucho calor al estar cercana al volcán. Estábamos en el reino de Chaos. En el Volcán Ragnarok. Nunca había visitado alguna zona de este reino, por ello no estaba tan acostumbrada al calor abrumador que hacía en el lugar, aunque trataba de no demostrar mucho que este me estaba afectando realmente. A pesar de que tenía una minifalda y una ropa con la cual no debería de molestarme demasiado el calor que hiciera. Pensé entonces en sacar algún tema en lo que viniesen los que faltaran, pero escuche la voz de alguien. Cosa que hizo que mis orejas azuladas su movieran. Moví mi rostro hacia donde provino esa voz, haciendo que mi larga cabellera azulada se moviera al son de este. Se trataba de una hermosa chica de cabellos rosados. Este me preguntaba algo, además de decir un par de cosas más. A lo que yo asentí por lo primero, haciendo que mis orejas se movieran a la vez que movía la cabeza. —¡Yes! Somos del Brüder Of Fire. Estamos esperando a los que faltan.— Le dedique una sonrisa gentil. —Yo soy Kuro Usagi.— Me presente a la chica enseguida. Parecía ser que iba a ser interesante esta misión o es lo que pensaba yo.

por **Fingon Sindar** Dom Mar 06, 2016 8:48 pm

Fingon se había convertido en una persona importante en el gobierno, era un implacable Custos Dei, una de las espadas del Lord, la guardia personal del ser más poderoso y respetable del mundo entero, a estas alturas Fingon ya estaba acostumbrado a que lo enviasen a diversas misiones de poco o ningún riesgo, alguna escolta, reunión o presenciar algún juicio, pero esta misión no era precisamente mandato de lord, era una misión colocada en el tablón del gremio al cual pertenecía, comúnmente las rechazaba porque siempre involucraban la caza de algún animal que causase estragos, al Elfo no le importaban esas cosas, pero cuando ese ser era una real amenaza para el reino la cosa cambiaba, la bestia supuestamente era un ser de fuego, no tenía más detalles, pero decía en el reporte que era un ser lleno de odio y furia hacia todo aquello que estaba vivo.

El Elfo siempre tenía un semblante ameno, y lleno de positivismo, era un emisario de la luz y como tal debía siempre confiar en sus mejores sentimientos con tal de poder contar con ella al momento de necesitarla. Cuando a las cercanías su lobo, un gran Fenrir le acaricio la mano, este con gran energía le respondió rápidamente con caricias en su cuello y cabeza, el lobo aulló suavemente mientras disfrutaba del tacto de quien consideraba su mejor amigo… aunque siempre los libros decían que era a la inversa. Cuando llego a una colina el Lobo cambio su actitud, vio lo que parecía un cuervo tormentoso, un polluelo que apenas comenzó a volar pero aun así eran de temer. Subió a la colina y desde unos mil metros saco un gran rifle de francotirador que en su extremo tenía un gran filo que parecía una espada de dos manos. Se recostó sobre su armadura roja dorada y negra para apuntar con mayor precisión, su respiración se volvió lenta y profunda, su mira le daba una visión perfecta del sitio donde estaban, todos aquellos parecían ser las personas que habían aceptado la misión.

Pudo ver a la compañera de la criatura, una mujer pelirroja, Fingon pensó que era estaba asqueada por alguna cosa, tal vez por el infernal calor que hacía, aunque no mostraba en su piel una sola gota de sudor.

-Estas bien muchacho-Pregunto a su compañero que al parecer era afín al hielo pero solo le respondió moviendo su cabeza a un lado y sacando la lengua mientras jadeaba… al parecer estaba bien..

Cerca también había algo como una marioneta, tal vez alguno de los guerreros de la misión usaba esta para atacar… a menos que… tenía algo en el cabello, Fingon no sabía si era niño o niña así que prefirió no mirarle mucho para no perder tiempo. Había conocido androides y robots especializados que actuaban de manera casi normal, pero jamás algo con el aspecto de la pequeña… o pequeño que tenía frente a sí.

En los archivos también aparecían otras personas, una de estas era otra Custos, la cuarta, no la conocía personalmente pero le decían que era un prodigio al llegar tan rápido a uno de los puestos más altos del reino, también había otro más, pero de él no sabía nada.

Había otra chica más, una un poco inusual y con tanta energía que a Fingon le cayó muy bien según las fotografías que había en los cuadros de mando del gobierno la reconoció como la cuarto Dei, ella era su compañera, una feliz y enérgica miembro de la guardia del Lord.

El elfo decidió unirse a todos los presentes, se levantó de su posición y bajo la colina mientras le seguía el lobo que portaba sus armas más poderosas, cuando se acerco estaba encapuchado, no le gustaba mucho mostrar su rostro para no darle ventaja a los enemigos al conocer su raza, solo sus ojos fulgurantes color esmeralda resaltaban tras la máscara.

Levanto la mano sobre su hombro en el cual cargaba su rifle de alta precisión, el lobo se movió alrededor de los presentes olfateando todo aquello que pertenecía a los presentes y sacando la lengua mientras jadeaba alegre.

-Saludos! Mi nombre es Fingon Sindar, Quinto Custos Dei del Gobierno- dijo mientras miraba la entrada a lo que el llamaría “Prueba Real”-me imagino que todos están aquí para cazar a lo que los demandantes indican “Aberración de Fuego”- termino diciendo mientras sacaba un pergamino arrugado donde tenía anotado algunos detalles.

-Tu debes ser mi compañera en los Custos verdad-Pregunto el elfo mientras tomaba la mano de la mujer-Fingon para servirle- dijo mientras hacia una pequeña reverencia-Creo que otro de nuestros compañeros también vendrá

por **Darth Nihilus** Jue Mar 10, 2016 6:44 pm

La temperatura era muy alta, y las gotas de sudor bajaban escasamente por mi frente, siempre he sido resistente a las temperaturas, nunca me he explicado porque… un humano no puede tener una naturaleza tan ‘’extraña’’. Seguía mis pasos sobre el camino chamuscado y las rocas del volcán Ragnarok, de mi túnica saque un aparato electrónico, el cual al apretar un botón salió un destello y un holograma en forma de mapa se proyectó en el espacio del dispositivo, la topografía era exacta y algunos vectores de colores se desplazaban bajo la topografía superficial, parecían cuerpos mineralizados… yacimientos hidrotermales, mi frente se arruga considerando una idea… mmm no quizás en un futuro, un negocio minero en un estado con una guerra civil interminable no es una idea muy inteligente.

Una mohín se apodero de mi semblante, los vectores de colores desaparecieron y los datos topográficos dejaron de aparecer en el mapa pues un punto negro tintineante aparecía en la superficie del holograma, era el lugar de encuentro de la misión a la cual había aplicado para un gremio al cual había entrado, y una frase se me pasaba por la mente ‘’Compañeros de Oficio’’ No estaba obligado a ir, sin embargo accedí más que como una oportunidad que una orden, pues la descripción de la misión era reducir a una criatura llamada Balrog, parecía una de las especies más colosales de SpiritSoul, un habito arraigado en mi es una curiosidad interminable que últimamente me ha impulsado a investigar diversas materias de este extenso planeta e investigar una criatura así me daría una gran satisfacción. El Holograma 3D de la criatura flotaba y un panel informativo se habría sobre el mapa holográfico mostrando sus dimensiones y una breve descripción sacada de mi base de datos, al parecer la composición de su dermis es rocosa, parece una criatura que influencia el magma. ¿Se podrá sintetizar un clon domestico? ¿Cuál será su ciclo reproductivo? ¿Cuál será la composición de sus tejidos? La mente me inunda de preguntas, después unas preguntas más turbias me envuelven la cabeza y mi semblante se muestra malicioso, la información se cierra.

Sigo caminando con mi katana en una mano, uff el calor es soportable pero es muy incómodo el bochorno, el punto de reunión se acerca a algunos metros e información salta nuevamente en el mapa holográfico, mostrándome el logo del gremio y todos los miembros de este, algunos nombre figuran en un color más llamativo los toco y se abren fichas informativas con sus nombres, fotografías e información básica… parecen ser los que asistirán a la misión. Luego a pocos metros puedo observar ya donde están reunidos… una mueca toma mi rostro, no están todos al parecer. Alzo la vista el panel informativo desaparece junto con el mapa del lugar, guardo el dispositivo bajo mi túnica. Los presentes me dirigen una mirada, es la primera vez que los veo, repaso lentamente con mis ojos expectantes, la energía que cada uno emana se estremece y se envuelve con la mía y mi habilidad no tarda en aflorar: Una mujer con un cabello muy largo y rojizo, su semblante es irritado… una valkiria, me imagino que esa seria Gissel Gremory, el segundo era un ser mágico atrapado en una apariencia sintética, un muñeco me imagino que ese sería Shiro Ritsu, luego dirigió la vista a una mujer con unas orejas de conejo. ¿Orejas de conejo?... concentre más mi energía y la deposite sobre todo el lugar, su energía tenía una aura extraña… nada… no podía sentir su naturaleza, la incertidumbre aporreaba mi mente como un martillo… valla. Encajaba en la descripción del Quarto Dei, Kuro Usagi.

Y por último un elfo, un hombre alto, por arriba de los 190 centímetros, calcule a primera vista pues era más alto que yo con mis 180 centímetros, orejas puntiagudas y un largo cabello azabache, ese sería el Quintus Dei, Fingon Sindar. Luego de algunos segundos ante la mirada del grupo, alcé la mano que no estaba sujetando mi katana bajo mi túnica oscura, mi tono era inexpresivo - Soy el Terzo Dei… permítanme acompañarlos en condición de turista - las palabras hacían acariciar mi boca con mi lengua, remarcando la última palabra, aún seguía el lugar en silencio. ¿Debería analizar un poco más la topografía?, al menos hasta que los últimos miembros aparezcan. El terreno compuesto de roca ígnea se ve prometedor, el terreno compuesto de rocas ricas en magnesio y hierro tenía el color ''característico'' oscuro de los silicatos ferromagnéticos, quizás además de yacimientos hidrotermales haya grandes pórfidos mineralizados… cobre… oro… quizás o tal vez otros minerales producto de la constante meteorización de la superficie volcánica.

por **Owen Hawk** Lun Mar 21, 2016 10:06 am

Habían pasado varios meses desde que no participaba en ninguna misión del gremio al cual pertenecía, Brüder of Fire… mejor dicho, lo que acaban de leer sería una mera excusa barata, pues nunca terminó ni comenzó una misión de este. Como General del Gobierno veía a los gremios por encima del hombro, pues pensaba en su tiempo que no servían para nada, solo era pérdida de tiempo y lo único que encontrarías serían fracasados sin lugar a donde ir, sin oficio fijo y con la desesperación de obtener algo de dinero para vivir. Owen no podía estar más equivocado. Fue tarde el momento en el que se dio cuenta de que pertenecer a un gremio tenía sus ventajas: Misiones “suicidas” para fortalecer en batalla, grandes cantidades de dinero, podías conocer a personas de cuya fuerza no encontrarías en otros lugares, compañerismo y, por si fuera poco, en el caso de que participaras activamente en el gremio, realizaras grandes hazañas en las misiones, podía ganar una buena y satisfactoria reputación, dándote a conocer con el nombre, “El Ejecutor”; “Asesino de Bestias”, etc…. Sí, desde luego no sería una buena opción ignorar a los gremios, pero como dije antes, para Owen, llegar a esa conclusión fue un poco tarde, pues lo habían echado del gremio tiempo atrás. Aun así, por un milagro de la vida, consiguió entrar de nuevo para comenzar fuerte en él.

El tablón de misiones estaba repleto de estos. Había mucha variedad: Arreglos de vehículos, búsquedas, detenciones… sin embargo, las misiones que llamaban la atención del joven rubio eran las de cacería. Ni siquiera él supo el porqué, siquiera tenía una estrategia montada y no tenía idea de a quien pedir ayuda para realizar tal misión, pero decidió por llamar la atención por todo lo alto eligiendo una de las peores misiones posibles, una en la cual arriesgabas seriamente tu propia vida, en la que todo podía acabar en un segundo si así fuera. Aun teniendo fe en sus propias habilidades y sin ser ni mucho menos alguien débil, aun no encontraba la respuesta a elegir algo tan suicida.

La misión trataba de cazar al Balrog, una bestia de colosal tamaño que vive en los volcanes. Era muy famoso, pues nadie aún había conseguido cazar a tal abrasador engendro. Si, de nuevo iba a realizar una misión donde el calor le jugaría una mala pasada, pero lo trataba como un entrenamiento de alto nivel con el fin de deshacerse de ese punto débil tal molesto. Todo era por volverse más completo. Entre leves suspiros, el ángel giraba su cabeza en dirección al tabernero – ¡Perdone! ¿Sabes si hay alguien inscrito en esta misión? - Elevó la voz para que le oyera, pues estaba algo lejos del hombre. – Otro desequilibrado… - Murmuró – Tienes suerte… No eres el único valiente que se atreve a participar en esta misión – Al escuchar aquellas palabras, Owen caminó hacia el mostrador de inscripciones - Ahí verás quienes participan – No le costó encontrarlo, incluso el papel de la misión ya era demasiado llamativo. Por una parte era impresionante, pero por otra lo entendía. Estaban registrados más de un nombre, a la mayoría los conocía, pues eran del Gobierno y sus cargos eran algo de lo que se debía tener conocimiento. - Interesante… Creo poder ver lagunas en esta misión. – Aun sabiendo la fuerza que tendrían sus superiores, el Balrog no era algo con lo que tratar sin preocuparse. Habría que tener cuidado. - Joven. Si te das prisas puedes alcanzarlos – La expresión del rubio cambió de repente – Varios de ellos ya deben de estar allí. Prepárate bien y suerte… Seguro la necesitarás. – Al momento de inscribirse, Owen salía del lugar rápidamente para comenzar con los preparativos. El tabernero, muy curioso, preguntaba su nombre a un conocido del lugar, pues se había olvidado de preguntarle en persona. Se llevó las manos a la cabeza en el momento en que lo supo. - Dios… Y yo tratándolo de manera informal. Tan joven y con ese cargo. - Suspiró – Espero llegue de nuevo a aparecer por aquí –.

El viento azotaba con fuerza el dorado cabello del chico, el escaso aleteo de sus alas eran suficientes para obtener una velocidad alta sin dificultad. Hizo bien en no traer a alguna de sus mascotas, después de todo, se habría arriesgado a que perdieran la vida en combate, además de que viajar volando era la decisión más correcta y eficaz. Esta vez no llevaba su katana, pues pensó que no sería necesaria, es más, sería un grave obstáculo en la batalla entre llamas que se ejecutaría una vez alcanzado el lugar; la adrenalina que se estaba acumulando por cada minuto recorría cada rincón del cuerpo del Ángel. Lo único que le molestaba era el pensar cómo saldrían de allí, o mejor, si saldrían de allí con vida. Owen esperaba eso por encima de todo, tenía un lugar a donde ir y un deber que mantener.

El volcán Ragnarok, famoso por sus enormes volcanes, sus terribles erupciones y siendo el nido del tan temible coloso, acabar con él era un logro total; salir de allí sin derrotarlo no estaba entre los planes. No se consideraba muy amigo del fuego por ahora, el calor era asfixiante y el magma imponía más que el coloso seguramente; ya tenía en mente que para él no le resultaría sencillo terminar la misión, pero… en el momento que lo consiguiera, de seguro habría avanzado de nivel. Consiguió divisar a varios de los participantes. Se sentía un poco más tranquilo con ellos como compañeros. La gabardina de General que llevaba puesta ya no estaba, la había dejado atrás por el calor, dejándose ver en él solo la camisa blanca que portaba, incluyendo sus pantalones, evidentemente. Sus pasos se detuvieron a dos metros de distancia de los presentes. – Mi nombre es Owen Hawk, un Ángel. – Inclinó su torso en señal de saludo y respeto – Soy el General de Libertad de Tempus. Un placer… -

Su mirada estaba llena de vida y en llamas. No estaba acostumbrado al calor, como bien sabemos, pero una llama hambrienta de acción ardía en el interior del divino Ángel. Pronto vería a la bestia, así que sus cinco sentidos permanecían activos con un control en ellos extraordinario… no podía escarparse absolutamente nada o su cuerpo se bañaría en magma pronto.

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Christa Hellemond AdministradoraMensaje privado	Astrid Dagmar AdministradoraMensaje privado
Adam Benjamin AdministradorMensaje privado	Kougyoku Ren AdministradorMensaje privado

Aldara Sashenka NarradoraMensaje privado	Katja Duhn NarradoraMensaje Privado
Atreyu NarradorMensaje Privado	Fingon Sindar NarradorMensaje Privado
Ithel Ibner NarradorMensaje Privado	Kvothe Arliden NarradorMensaje Privado
No disponible NarradorMensaje Privado	Hikari Hiroshi NarradorMensaje Privado

Fingon Sindar
Kuro Usagi	Orion Ärud	Aldara Sashenka	Quintus Dei (Libre)

Ichinose Takumi
Isela Adramelech	Baphomet (Libre)	Libre	Adam Benjamín

SISTEMA MUNDIAL DE SPIRIT SOUL
Categorías	Chaos	Spatium	Tempus	Revolucionarios & Anti gobierno
Territorio	225	240	110	80
Infraestructura	170	320	330	60
Vehiculos	150	150	195	250
Armamento	90	21	21	45
Soldados	80	70	70	110
Prestigio	80	50	120	120
Total:	1435	3747	1531	2085

[Misión de Gremio Rango 5] [Cacería Especial (Balrog)] [Darth Nihilus, Arno Mireault, Fingon Sindar, Owen Hawk, Shiro Ritsu, Kuro Usagi & Gissel Gremory]

[Misión de Gremio Rango 5] [Cacería Especial (Balrog)] [Darth Nihilus, Arno Mireault, Fingon Sindar, Owen Hawk, Shiro Ritsu, Kuro Usagi & Gissel Gremory]

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MEJORAS MUNDIALES DE SPIRIT SOUL
Categorías	Chaos	Spatium	Tempus	Revolucionarios & Anti gobierno
Vehiculos	Lvl 0	Lvl 0	Lvl 0	Lvl 0
Infraestructura	Lvl 1	Lvl 1	Lvl 1	Lvl 1
Armamento	Lvl 1	Lvl 1	Lvl 1	Lvl 1
Links Necesarios:	Info del sistema	Ramas de mejoras	Tierras dominadas	Contador de puntos

MEJORAS DE CHAOS
Tipo	Nivel	Mejora	Adquirida el día
Mejora de Armamento	1	Armadura reforzada. Los soldados cubren su espalda, hombros, y brazos con armaduras mágicas. (+17 puntos al dado de defensa de cada soldado)	26/5/2016
Mejora de Infraestructura	1	Geisers de lava.Tus murallas son cubiertas por geisers de magma que queman todo lo que se acerca. (+100 hp a cada muralla al defender de una invasión)	21/8/2016

MEJORAS DE SPATIUM
Tipo	Nivel	Mejora	Adquirida el día
Mejora de Armamento	1	Pólvora Delux. Las armas del reino sufren una mejora total. (+20 al dado de ataque de cada soldado)	26/5/2016
Mejora de Infraestructura	1	Se refuerzan las murallas del reino en edificios gubernamentales. (+100hp a todas las murallas al defender de una invasión )	24/8/2016

MEJORAS DE TEMPUS
Tipo	Nivel	Mejora	Adquirida el día
Mejora de Infraestructura	1	Campo tecnológicamente alterado. Un campo electro-magnético rodea tus murallas protegiéndolas del daño enemigo. (+150 hp a todas las murallas al defender una invasión)	26/5/2016
Mejora de Armamento	1	Cañón electromagnético. Los soldados son armados con tecnología de punta. (+15 al ataque de cada soldado)	21/8/2016

MEJORAS DE REVOS & ANTI-GOBIERNO
Tipo	Nivel	Mejora	Adquirida el día
Mejora de Armamento	1	Armas cortantes (Espadas): los forjadores y herreros abdicados a la revolución son considerados los mejores entre las regiones. (+20 al dado de ataque de cada soldado)	26/5/2016
Mejora de Infraestructura	1	Diavolik Force. La manipulación con éxito de materiales para crear tus murallas, hace que la protección que esta otorga aumente considerablemente. (+120 hp a todas las murallas al defender de una invasión)	21/8/2016


Disponible	Hikari Hiroshi	Jellal Slater