Quien busca...haya. {Privado con Ulbrecht Jäger}

por Invitado Lun Ene 04, 2016 10:01 am

En realidad la nekomata de cabellos azabaches sabía perfectamente donde tenía que ir y para que iba allí y si lo hacía en persona justamente era porque llevaba años ofreciendo favores a una persona que ahora lamentablemente había logrado la molestia de la fémina. Aun así, Kuroka en el fondo de ella misma tenía...corazón y prefería por todos esos años en los que aquel individuo había servido a su padre, darle la lección por ella misma, era su forma de decir que en el fondo se apreciaban los años de servidumbre, pero ya llevaba tiempo sin cumplir el contrato acordado con el Sr. Toujou y como tal, Kuroka no soportaba ver descontento a su querido padre.

Entró en un establecimiento en el cual un joven de cabellos naranjas y largos hasta los hombros, abrió sus ojos al verla entrar en el lugar. El silenció del mismo y una expresión que no se sabía si era de maravilla o miedo, hacía que Kuroka sintiera en su interior una especie de placer que provocó en ella una sonrisa, hermosa a la vez que peligrosa.
Sus pasos se acercaron al mostrador en donde había una amplia cristalera con armas blancas y puso sus manos sobre el mostrador observando las mismas de manera juguetona y hasta casi infantil, ruborizando sus mejillas al ver una daga con la empuñadura labrada en plata con piedras violetas, su color favorito. -Hermosa...si señor...me llevo esa.
-Esto...claro...señorita Toujou...pero...no tiene que pagar nada puede llevársela...hace juego con...
Kuroka adelantó su cuerpo acercando su rostro al joven abriendo sus enormes ojos felinos de color ámbar. -¿Con mis ojos? -Dijo mirándolo con una hermosa locura sádica en ellos al muchacho que reaccionó como se suponía ya que no se esperó el repentino movimiento de la nekomata.
-Yo... -El titubeo del muchacho no hacía mas que indicar que sabía con quien estaba tratando y aun más, sabía el motivo por el que ella estaba en la tienda.
-Shhh calla...no digas nada. -Comentó la azabache entrecerrando sus ojos a la vez que acercaba su rostro al del joven hasta que sus labios carnosos y maquillados con un brillo con sabor afrutado, chocaron los del contrario, besándolos con una dulzura que engaño al varón, respondiéndole el beso como si fuera algo deseado de siempre. Kuroka al sentir aquella pasional respuesta se apartó de inmediato observándolo traviesa con una sonrisa del mismo tipo que su mirada algo sonrojada. El joven sorprendido se relamió los labios saboreando el maquillaje afrutado de la fémina y al poco tiempo, mientras Kuroka sacaba un pañuelo de su bolso, el chico comenzó a sentirse mal hasta que cayó al suelo.
-Dile a tu padre que pague todo lo que debe, o lastimosamente perderá a un hijo. -Se limpió con el pañuelo los labios y por precaución tomo un pequeño frasco con un liquido de color verde que le hizo realizar una mueca de desagrado con el sabor. -Como lleváis años sirviendo a mi padre tenéis una semana. -Dicho esto, la nekomata cogió la daga que tanto le gustó y guiño el ojo seductoramente. -Me llevo esto por cierto, ya que hace juego con mis ojos nyajajaja. -Dijo traviesa riendo y salió de la tienda.

por Invitado Vie Ene 08, 2016 3:06 pm

Indudablemente, era molesto para alguien como yo el tener que estar sirviendo como comitiva de vigilancia a la hora de cuidar a una pseudo princesa mafiosa venida a menos que hacia gala del uso de los poderes otorgados por el dinero que su papi consigue mediante trabajos sucios. Podría estar haciendo mejores cosas en lugar de jugar a ser el perrito faldero de la princesa negra, pero desgraciadamente ordenes son ordenes y debo obedecer los mandatos de mis superiores, entre los cuales se incluyen el proteger desde las sombras a la señorita en cuestión, cuyo nombre es Kuroka Toujou si mal no recuerdo lo que los informes decían. ¿Entretenido? No lo es, ni por asomo, pero es un mal necesario a cumplir porque ella y su familia son parte de quienes invierten su dinero en los recursos y armas usados por la revolución a la hora de combatir contra el detestable y estancado gobierno, que apoya mas a los seres indeseables y a los infrahumanos que a los humanos normales que deben pelear contra seres injustos. Hipócrita es mi visión del mundo, tal vez una simple pataleta que llevo adelante para justificar mis acciones, pero hasta ahora pude llegar hasta donde llegué sin hacer uso de artes místicas ni juju de esa índole.

Solo con mi astucia, solo con mi fuerza. Solo con el poder que es otorgado por la tecnologia desarrollada por humanos, lo mejor del mundo y lo que demuestra una vez mas que la supervivencia no es la del mas fuerte, sino la del mas apto y el mas cabrón. "La supervivencia del que juega sucio" es un buen mote, pero en una batalla cosas como "honor", "justicia" o "caballerosidad" no existen. En situaciones de vida o muerte, aquello que te permite seguir vivo un segundo mas y ver morir a tu oponente es la verdad absoluta.

Por eso debía de tragarme mi orgullo y estar escondido fuera de la tienda de armas, esperando a que la mujer a quien protegía saliera y estuviera todo en orden. Ella es, ciertamente, quien pagaba mis "juguetes", pues curiosamente la señorita Toujou habia tomado cierto "cariño", si se le puede llamar así, por mi persona y mis ideales. Puede que simplemente me viese como una herramienta mas, pero es lo que soy siempre y cuando pueda hacer lo que yo considero que debe hacerse. Ademas, ahora mismo estoy en busca de conseguir ciertas cosas que en Tempus aun se mantienen en secreto y que están en periodo de prueba por parte del ejercito, materiales especiales que no se encuentran en ningún otro lugar del mundo gracias a que es un objeto creado mediante el uso de la avanzada tecnología del reino en cuestión.

-Espero que sus negocios hayan transcurrido sin inconveniente alguno, señorita Toujou.-Fueron mis palabras mientras daba un paso hacia adelante y salia de entre las sombras del callejón junto a la tienda en cuestión, tras asegurarme de que efectivamente la mujer habia puesto su increíble figura fuera del edificio y estaba guardando una daga en alguna parte de sus ropajes extravagantes-Seria desagradable tener que hacer una limpieza inesperada que, sin duda, generará preguntas indeseadas.

No ha sido una espera muy larga, pero se que no eran los únicos negocios que ella debía atender por el día. Y, aun si lo fueran, mi trabajo era cuidar de ella constantemente, teniendo mi ojo avizor sobre su figura para que ningún peligro le acechase. En caso de que algo de esa clase sucediese, era mi trabajo ocuparme de que la eliminación de tal peligro sea mediante las maneras mas brutales y perjuicio extremo, es decir, asesinando a todo lo que se ponga en mi camino si está entre mi persona y la de Kuroka.

por Invitado Sáb Ene 23, 2016 5:06 pm

Su sonrisa se borró en el justo momento en que salió de la tienda. Para Kuroka alguien travieso pero que no era pura maldad en sí, hacer algunas cosas no era tan divertido como hacía parecer, pero las apariencias había que mantenerlas y su deber, su familia estaba por encima de muchas cosas y ese padre suyo lo amaba con toda su alma, así que si el señor Toujou pide a su querida hija algo, ella lo hacía sin mas. Los ojos de la felina se movieron a un lado mientras que guardaba la daga obtenida con mucha delicadeza y cuidado al escuchar aquella voz salir de las sombras haciéndose visible aquel cuerpo perfectamente envuelto en un traje bastante caro que merecía la pena mirar con mas detenimiento.

Sin mucha dilación movió el rostro para ver mejor el portador de tal prenda y hermoso tono de voz. -¿Y usted es?.- Preguntó sonriéndole de forma hermosa observando el rostro del varón perfectamente esculpido en aquel material humano. - Hmm ¿Limpieza? -Los ojos dorados y felinos de la mujer se abrieron y una risa se escapó algo divertida que provocó que cubriera parte de sus labios con su mano. -¿Acaso eres uno de los nuevos "limpiadores" de mi padre? Nya vaya vaya... -Caminó acercándose al hombre inspenccionándolo mas de cerca. -Al menos está mejorando bastante al escoger el nuevo género, no solo tienes buen porte, también hueles bien...humano. Me pregunto si sabrás igual -Se inclinó un poco casi poniéndose de puntillas completamente, tomo de forma suave su barbilla y en un movimiento lento dio una pequeña lamida en la mejilla contraria, apartándose del joven tomado distancia.
-Hmm... -Miró hacia arriba pensativa unos segundos saboreando marcando con su indice su barbilla -No está mal. -Pronunció con una enorme y hermosa sonrisa volteándose y continuando su camino despacio.

Al dar unos pasos hacia delante para continuar el paseo por aquellas calles de comercio, se volteó lo justo para mirar por encima de su hombro si estaba ahí el hombre y al ver que aun no había proseguido camino ni escondite alguno se paró girándose de nuevo a el. -¿Me acompaña? Aún no me ha dicho a quien tengo el gusto de ver. Estaba mas que acostumbrada a ver todo tipo de varones y tratar con ellos, pero ese hombre produjo en ella algo mas que simple curiosidad, ya que cuando sus ojos miraron los suyos un ahogo extraño le inundó su pecho, una sensación que Kuroka no había conocido con anterioridad a esta. -Haga el favor de no seguirme escondido es algo que no me agrada y ya varios son lo que hacen eso, prefiero si tiene que acompañarme que lo haga realmente, es mas agradable y evita que otros que no deseo que se me acerquen lo hagan.

por Invitado Lun Mar 07, 2016 5:21 pm

Supongo que si fuera otra persona mas abierta a sus emociones, mas confiada, habría detenido mi avanzar y mis ojos se habrían fijado abiertos de par en par en los de la contraria, que habia pronunciado algo que, con toda franqueza, sonaba increíblemente estúpido para alguien como yo. Vamos, que pedirme que deje el refugio seguro de las sombras para pararme en el frente y seguir haciendo mi trabajo es una idiotez grande como una casa, mas cuando mis métodos se benefician mas de la sorpresa y el subterfugio. Es como si me pidieran que me vistiera de blanco y me dibujase una diana que cubriera todo mi cuerpo solo por el mero hecho de que quieren verme así vestido.

Eso sin contar que si estaba a la vista de todos llamaría mucho la atención, mucho mas de lo que lo haría si me mantengo apartado y fuera de ojos indiscretos. Ojos indiscretos que sin duda buscarían hacer uso de mi visita a Rihm para realizar negocios y planes alrededor de mi persona, y yo detesto que hagan eso sin mi conocimiento. Muchos parámetros desconocidos, muchas interrogantes y factores imprevistos contra los que nada se puede hacer y con los que no se puede planear o usar.

Para fortuna de mi interlocutora, mi única reacción fue permanecer en silencio, un silencio sepulcral y absoluto que solo se rompió luego de que negué con mi cabeza con un lento movimiento que iba de izquierda a derecha, una y otra vez.

-Mi presencia declarada y oficial no es bien recibida en ciertos lugares de este mundo, señorita Toujou. He hecho cosas que llamaron mucho la atención hacia mi persona y se me ha ordenado mantener un perfil bajo.-Respondí fríamente, casi como si me tratase de una maquina, algo en lo que estaba seguro un día de estos me convertiría si seguía reprimiendo mis emociones a los extremos que estaba rayando ahora mismo-En especial, creo recordar que la marina de Tempus ha ordenado un protocolo de búsqueda y captura inmediata por ciertos... trabajos que he hecho antes de dejar el reino. Dudo que se hayan olvidado del "asesino de bestias" tan rápidamente.

Tengo mis razones para operar en secreto, y un lugar como Rihm, que oficialmente pertenece al gobierno pero que reúne a los mas bajos grupos y seres que pueblan este planeta, sigue siendo un lugar donde los rumores fluyen como el agua de un río, donde cualquier información tiene precio para quien la busca. Y siempre hay gente que busca información de todo tipo, ya sea para atacar al gobierno inútil que repudió mi cruzada como para aquellos que quieren conseguir un beneficio económico al hacer mofa de un deporte de alta gama como lo es la cacería al creer que pueden compararme con un ser tan bajo como una presa cualquiera. También están los que quieren venganza, especialmente aquellos que se relacionaron con mis victimas pasadas y que, invariablemente, añaden una marca mas a mi expediente pues aumenta el numero de asesinatos y limpiezas raciales que hago.

-Ademas, se me ha contratado para ser su guardia de corps, no su acompañante. Debo ceñirme a lo que el contrato y las ordenes que se me encomendaron indican, porque un profesional depende mucho de la imagen otorgada por su eficiencia y apego al trabajo.-Con eso buscaba zanjar el tema que estaba discutiendo con una mujer que, seguramente, aprovecharía cualquier oportunidad para retrucar y replicar a mis conceptos y palabras, buscando una falla en las mismas para que tenga que hacer lo que diga. Y, en estos momentos, parecía ser que ella quería que yo estuviera a su lado, lo cual no niego sería agradable si no fuera por mis ordenes.

por Invitado Jue Mar 10, 2016 8:23 pm

Era la primera vez que se encontraba con alguien que hacía caso omiso real a las cosas que ella decía o pedía y mucho más aún, la primera vez que se pegaba a un ser masculino y hacia tal gesto felino y éste, ni se inmutaba al respecto. Kuroka sintió una mezcla de rabia y curiosidad infinita que por un lado hizo que no mandara a quitar de en medio a ese humano por tener la osadía de cumplir lo indicado o peor aún ignorarla. Pero tenía suerte el condenado y despertaba algo en ella que aún no podía averiguar.

-¿Eres humano o una maldita máquina disfrazada de humano? -Dijo quizás con un tono serio y molesto, adornado en su hermoso tono de voz con la picaresca de su sarcasmo, que a veces era afilada como un cuchillo y que esta vez quería solo devolver un poco del daño hecho. Debía hacer en el lugar dos recados más. Uno simplemente el hecho de pasarse por aquella zona y que la vieran, el hecho de que la hija de Toujou paseará por una zona en la que la extorsión por parte de su familia y otros negocios tenían que estar a la orden del día, era siempre para aquellos que tenían algún trato con el señor Toujou, como cuando una lechuza pasa por una casa antes de que muera alguien. El segundo encargo, era recoger un paquete que iba a nombre de su padre y ciertamente el lugar donde tenía que ir a recogerlo no era del agrado de la joven nekomata, pero ella nunca rechistaba en absoluto, si su padre mandaba hacerlo ella iba aunque fuera al mismísimo infierno.

Viró el rostro por encima de su hombro para ver a aquel pero no lo halló en su camino, seguramente se habría escondido otra vez. Nuevamente una mueca de desagrado pinceló su rostro de forma leve pero sus ojos se movieron rápidos hacia la izquierda y al echar el rostro hacia atrás, un arma blanca pasó por delante de sus ojos apenas cortando un poco de su cabello, en el brusco pero elegante movimiento realizado para esquivarlo. -Vaya, no esperaba recibimiento menor. -Pronunció casi acostumbrada a los agradables modales que tenían algunos en la zona. Suspiró de manera pesada cerrando los ojos y llevando la diestra a al rostro, apartando de manera juguetona parte del cabello que se había alojado en su mejilla. –Nunca me gustaron las ratas, siempre atacan a escondidas o cuando hay muchas, mientras tanto se esconden siempre del gato. Cobardes y asquerosas ratas. –Dijo de manera clara a sabiendas de que quien lanzó aquella arma blanca seguía observando en el mismo lugar.

por Invitado Lun Mayo 09, 2016 5:03 pm

Poder, podía oír lo que ella estaba diciendo, porque en realidad tan lejos no estaba de ella. Había mucha gente caminando, eso es cierto y seguro como que el sol brilla sobre nuestras cabezas, pero no la suficiente como para evitar que yo perdiera de vista a la mujer en cuestión que me estaba hablando. ¿Una maquina? Seguro que si, yo siempre he pensado que no soy precisamente muy normal por mi falta de emociones, que me equiparan con mucha facilidad con un ser mecánico, e incluso he llegado a oír a personas decir que soy mucho mas frío que un robot, lo cual no es muy difícil que suceda porque ahora los robots de Tempus vienen con una IA avanzada que les hace simular emociones de una manera muy realista, hasta el punto en que no hay mucha diferencia con un humano normal de no ser por sus partes mecánicas y todo eso.

"Ser como soy... eso es un castigo. Pero no voy a apartarme de mi sendero simplemente porque mi personalidad no sea algo que atraiga a los demás de buena manera"-Pensé mientras encendía un cigarrillo y seguía el mismo camino que la mujer demonio de orejas felinas, con el ojo siempre fijo en ella pero con la atención en todos lados, para no perder detalle de nada que pueda suceder en las cercanías. Sabia que, a su manera, ella también ayuda a su padre, aquel que me ha contratado, y por eso hacia lo posible por mantenerla a salvo... oh, vaya, un cuchillo volador que va en su dirección, pero atrapado por las rápidas manos de Kuroka. Si por algo no me preocupé, es porque se muy bien que bajo esa seda hay acero afilado y peligroso-"No, ella no necesita tanta protección. Solo necesita a alguien que se encargue de eliminar a las molestias cuando aparecen, en especial las que están siempre escondidas... como ese tipo que le arrojó el cuchillo."

Mis ojos no estaban para proteger, sino para percibir, y ver como alguien se estaba escabullendo en las sombras de un callejón era mas que sospechoso, en especial cuando el cuchillo habia volado desde esa dirección. Por lo tanto, esto amerita una pequeña limpieza de mugre, alguna que no vuelva a plagar las calles de una respetable ciudad como Rihm. Ademas, el jefe Gaziel me lo agradecería si le digo que fue para ayudar a los inversores de la revolución, porque le permitiría guardarse unos SL en el bolsillo que podría usar para otra cosa y no para organizar una cacería infructuosa... no cuando tiene a un cazador entre sus filas.

Revolver en mano, me acerqué al callejón y, mirando de refilón por el mismo, pude ver que el tipo estaba todavía ahí, deshaciéndose de una capa pesada con capucha que cubría su rostro. Honestamente, mucho no me importaba que es lo que hacia o lo que iba a hacer, porque de por si solo hay un curso a seguir para gente como esa: Morir, morir y no joder a nadie mas en este mundo. Por eso, hice notar mi presencia y, apuntando con tranquilidad mi revolver, abrí fuego una sola vez de manera silenciosa, acertando el tiro justo en medio de la frente del sorprendido asesino.

-Idiota. Es tan solo un novato que seguramente fue contratado por algún comerciante extorsionado por los Toujou. Esto debo comunicárselo a Kuroka, quien lo hará llegar a oídos mas apropiados.-Susurré, tomando una señal identificadora que pueda usarse mas adelante para ver quien ha sido el imbécil que ha querido ir contra el orden normal de las cosas.

Echando una pitada de mi cigarrillo, salí del callejón como habia entrado, completamente solo, y fui hacia donde la mujer felina estaba, aun mirando para todos lados a ver si adivinaba quien habia sido. Lastima para ella, yo llegué primero y, por eso, hice presencia visible a su lado para que supiera que tengo noticias.

-Aquí tiene, señorita Toujou. El que le ha arrojado ese cuchillo ya no está en este mundo.-Susurré calmado, frío como siempre, entregando el pequeño trofeo que habia tomado de mi ultima victima, mostrando una pequeña sonrisa que, en otra situación, tal vez sea encantadora pero que en esta solo resultaba ser algo perturbador-Este trofeo ayudará a saber quien ha querido contratar a un asesino... Y supongo que ha sido alguien a quien se debe ver hoy, porque conocía la ruta que iba a seguir.

por Invitado Lun Mayo 09, 2016 5:52 pm

Kuroka llevó aquella daga que tomó de forma rauda por la empuñadura en pleno bueno, suspirando de forma calmada y pesada bastante acostumbrada a recibimientos de esa indole y otros. Aquella zona de Rhim no es que fuera famosa por recibimientos cariñosos de la índole que una familia como la suya se merecía... ¿O quizás si? Los Toujou, tenían negocios de todo tipo por todas las zonas habidas y conocidas de Spirit Soul. Extorsión, protección a veces... obligatoria, mercado negro, alguas tiendas, restaurantes, bares o centros de "ocio", cualquier cosa era buena que generara dinero y que por otra parte enlazara aquellos contratos de antaño que su familia teía incluso en el mismisimo infierno. Por todo aquello y mas... cosas asi pasaban casi a diario, Kuroka estaba aburridamente acostumbrada.

Kuroka tenia sus porpios negocios o caprichos dicho sea y la revolución era mas que un capricho para la fémina felina. Tenía información detallada de ciertas cosas que no le habían agradado para nada del gobierno y aunque pesaba que no todos eran digos de ser quitados de en medio como si fuera bulgares insectos que rondan a un mismo individuo, creía que muchos que estaban en la revolución compartia muchos pensamientos comunes y dicho sea, era bueno para los negocios de la familia.

Los ojos ambar y felinos de la nekomata miraron con una sonrisa medio oculta mientras desviaba la mirada a la daga sabiendo la procedencia de la misma y no muchos minutos pasaron cuado aquella presencia grata para ella volvió a aparecer a su lado, captando la total ateción de ella, mas guardo silencio observándolo con total detenimiento, disfrutando de aquellos gestos, esa seriedad que hacia tan atractiva la figura del humano, esa rectitud que lo hacia especial entre miles. - No esperaba menos de ti. -Dijo mostrando una sonrisa maquillada en aquellos labios rojos mostrado su agrado y atractivo.

Guardó la daga dentro de sus pertenencias sin mostrar atención a lo que traía el varón. -Eso es algo que será grato para mi padre, deberiamos terminar ya la visita, continuaremos otro dia no hay nada mas importante que hacer por aquí. Aunque he de decirte querido que esa muerte no es algo que se quede en el silencio de Rhim. Tampoco me importa era algo necesario, debe dejar de molestar de forma absurda, ya mi padre estaba cansado de esos juegos ciertamente, auque era algo divertido ver como intetaba una y otra vez hacer algo como eso. -Dijo riendo un poco prosiguiendo su camino sin mas, de forma lenta y tranquila ya que de momento ningun loco se le había acercado intentando que la dama felina la acompañara en sus borracheras, pero claro, tampoco pensaba que lo hicieran si el joven estaba cerca de la misma.

Ahora tocaba regresar al automovil que la estaba esperando, en donde tendría que regresar a la mansión Toujou para dar reporte de sus recientes actos y de los actos del joven humano. -¿Ulbrecht verdad? -Dijo para entablar conversación nuevamente intentando no perder la concentración en su camino. -No quisiera olvidarme de su nombre ya que dudo que pueda olvidar a su persona. ¿Sabe que es el primer humano que contrata mi padre?

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SISTEMA MUNDIAL DE SPIRIT SOUL
Categorías	Chaos	Spatium	Tempus	Revolucionarios & Anti gobierno
Territorio	225	240	110	80
Infraestructura	170	320	330	60
Vehiculos	150	150	195	250
Armamento	90	21	21	45
Soldados	80	70	70	110
Prestigio	80	50	120	120
Total:	1435	3747	1531	2085

Quien busca...haya. {Privado con Ulbrecht Jäger}

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MEJORAS MUNDIALES DE SPIRIT SOUL
Categorías	Chaos	Spatium	Tempus	Revolucionarios & Anti gobierno
Vehiculos	Lvl 0	Lvl 0	Lvl 0	Lvl 0
Infraestructura	Lvl 1	Lvl 1	Lvl 1	Lvl 1
Armamento	Lvl 1	Lvl 1	Lvl 1	Lvl 1
Links Necesarios:	Info del sistema	Ramas de mejoras	Tierras dominadas	Contador de puntos

MEJORAS DE CHAOS
Tipo	Nivel	Mejora	Adquirida el día
Mejora de Armamento	1	Armadura reforzada. Los soldados cubren su espalda, hombros, y brazos con armaduras mágicas. (+17 puntos al dado de defensa de cada soldado)	26/5/2016
Mejora de Infraestructura	1	Geisers de lava.Tus murallas son cubiertas por geisers de magma que queman todo lo que se acerca. (+100 hp a cada muralla al defender de una invasión)	21/8/2016

MEJORAS DE SPATIUM
Tipo	Nivel	Mejora	Adquirida el día
Mejora de Armamento	1	Pólvora Delux. Las armas del reino sufren una mejora total. (+20 al dado de ataque de cada soldado)	26/5/2016
Mejora de Infraestructura	1	Se refuerzan las murallas del reino en edificios gubernamentales. (+100hp a todas las murallas al defender de una invasión )	24/8/2016

MEJORAS DE TEMPUS
Tipo	Nivel	Mejora	Adquirida el día
Mejora de Infraestructura	1	Campo tecnológicamente alterado. Un campo electro-magnético rodea tus murallas protegiéndolas del daño enemigo. (+150 hp a todas las murallas al defender una invasión)	26/5/2016
Mejora de Armamento	1	Cañón electromagnético. Los soldados son armados con tecnología de punta. (+15 al ataque de cada soldado)	21/8/2016

MEJORAS DE REVOS & ANTI-GOBIERNO
Tipo	Nivel	Mejora	Adquirida el día
Mejora de Armamento	1	Armas cortantes (Espadas): los forjadores y herreros abdicados a la revolución son considerados los mejores entre las regiones. (+20 al dado de ataque de cada soldado)	26/5/2016
Mejora de Infraestructura	1	Diavolik Force. La manipulación con éxito de materiales para crear tus murallas, hace que la protección que esta otorga aumente considerablemente. (+120 hp a todas las murallas al defender de una invasión)	21/8/2016


Disponible	Hikari Hiroshi	Jellal Slater