No siempre vas a poder evitar una batalla. [Priv. Frederik L. Damgaard]

por **Kuro Usagi** Sáb Ago 27, 2016 5:12 am

Llevaba muchos kms recorriendo no solo a pie, sino a saltos para atravesar obstáculos con más facilidad. Desde hacía ya muchas horas que estaba así sin tomar descanso alguno, aunque esto no suponía de momento algún problema para mi pero obviamente cuando sentía que me agotaba algo, paraba a tomar un respiro para luego seguir mi camino. ¿Hacia donde me dirigía realmente? Parecía estar dirigiéndome a cualquier lugar, sin tener realmente algún punto fijo al que ir. Aunque eso no era cierto, pues bien tenía en mente como siempre el ir a visitar cada zona de cada reino. Pues solo había visitado pocas zonas de los tres reinos y de momento la que más me había encantado era el Valle Chocobo, de Tempus. Pues había sido la primera vez que había visto caer la nieve con tranquilidad, sin pensar que hubiese una misión de por medio. Siendo así que no contaba la vez en la que visite ese reino por una misión importante, la cual resulto todo un exito. Aunque recordaba que no nos dio mucho tiempo de descanso y luego tuvimos que volver a una misión importante en Chaos, donde solo participaba el ejercito del Lord sama pero prefería omitir el pensar en estos instantes precisamente en ese momento. Del cual sucedieron tantas cosas que apenas a veces mi cabeza podía digerirlo y prefería estar disfrutando del viaje todo lo que podía, siendo que esta vez lastimosamente no me acompañaban Tsubasa y Guadaña-San. Las cuales me hicieron pasar buenos momentos que no olvidaría y que por ello actualmente estimaba a ambas chicas. Esperando poder algún día ir por ahí de nuevo.

Actualmente me encontraba dirigiéndome hacia Oishi. ¿Por qué ahí precisamente? Por el hecho de que decían que era un lugar demasiado tranquilo, cosa que me animaba a visitarlo sin temer de que hubiera conflictos o cosas así, aunque en mi mente en esos instantes no pensaba que en todos lo lugares siempre van a haber un pequeño conflicto quiera o no. Mientras pegaba grandes saltos cuando mis zapatos apenas rozaban el suelo y tomaba impulso para seguir saltando grandes alturas hacia delante. Hubo un momento en el que pude fijarme que habían pájaros raros, de un tamaño algo medianos y de un color cenizo. —¡Hola!— Les salude bastante animada a estos como si nada, mientras estaba en el aire. —¿Qué se cuentan?— Pregunte, a lo cual ellos solo siguieron batiendo sus alas. —¡Ya veo! Yo estoy yendo hacia Oishi. Me dijeron que es un lugar hermoso y si o si debía de visitarlo.— Dije cruzándome de brazos en el aire, como si realmente me hubieran contestado, cuando no era así. No recibiendo obviamente respuesta alguna, mientras caía lentamente y volvía a pegar otro brazo para volver hasta ellos. —¡También dijeron que su comida es fabulosa!— Solté emocionada mientras asentía con la cabeza como si me diera la razón a mi misma, aun estando de brazos cruzadas, aunque después las deshice. Estos se me quedaban de repente mirando de repente. Obviamente era normal que me miraran, era extraño ver a una chica con orejas llegar de un salto y hablar con otros como si nada. ¿No? Aunque por mi parte a mi no me extrañaría, a no ser que fuese un bicho de estos típicos asquerosos de los cuales siempre rehuías o los típicos que inspiraban terror nada más verlo y te helaban la sangre. Además de que yo hablaba más fácilmente con los demás en mi forma natural.

Volviendo a lo que estaba. Cuando volví a llegar de nuevo al suelo y pegue otro gran salto con fuerza, los pájaros ya no se encontraban ahí cuando llegue hasta arriba. Me extrañe por el hecho de que no había avanzado, es más, quise retrasarme un poco para ver a los pájaros un poco más al ser lo único con lo cual podía estar hablando en estos instantes. Miraba por todos lados curiosa y confundida. Siendo así que de nuevo no tenía con quien hablar. En esos instantes me encontraba mirando hacia atrás, dando resultado a que cuando mire hacia delante, me la pegué contra una pared. Ni si quiera me dio tiempo a reaccionar para evitarlo, hasta sentía como comenzaba a caer lentamente contra la pared de un edificio gigante y alto, hasta que finalmente me despegue de esta y comencé a caer ahora con velocidad de cabeza. Teniendo el rostro rojo por el golpe y los ojos cerrados obviamente por el impacto. Estaba semi ida por el golpe, pero pude reaccionar a tiempo, abriendo al instante los ojos y dando un giro hasta dejar de nuevo mis pies hacia abajo, pudiendo así caer de pie, aunque no pude evitar tambalearme y caerme de senton al suelo. —W-waah.. Por poco..— Susurre asustada, pensando que realmente casi me comía el suelo y seguramente este no sabía bien.

Apenas pasando unos minutos, reaccione mejor y me fui levantando lentamente del suelo. Sacudiendo mi ropa lentamente, pues se había llenado algo de polvo del lugar. Ya fijándome bien, me encontraba en el tejado de una casa pequeña semi derruida. No sabía donde me encontraba, lo único que tenía en claro es que solo podía ver que todo estaba derruido. Parecía como si nadie más habitara en este lugar, aparte de los quejidos que de vez en cuando mis orejas escuchaba de lejos. Cosa que por suerte me indicaba que aquello que se estuviera quejando, estaba a una distancia moderada de aquí, de momento. —¿Donde... estoy?— Pregunte en un susurro. Mirando hacia cada lado con curiosidad. Sabía que estaba en Chaos, pero no sabía la zona y lo peor era que otra vez me había perdido. Además de estar algo asustada por los quejidos.

por **Frederik L. Damgaard** Lun Ago 29, 2016 12:17 am

Sus obligaciones como revolucionario dentro de ese reino, abarcaban muchos aspectos y sin dudas, el más cansino de todos era la inspección de todas las zonas de posible riesgo. Usualmente era labor de los soldados inferiores pero desde el último accidente con ese soldado que se infiltro bajo sus narices, se había puesto como tarea personal que eso no sucediera de nuevo. Tenía claro que hacerlo era un riesgo muy elevado…no solo podía encontrar soldados externos pero también las fuerzas del mismo Chaos y todavía recordaba lo que ese hombre le hizo…después de todo la herida de su cuerpo apenas y había cicatrizado. Algo que era obvio…era la falta de interés en su propia vida…una ventaja pero a la vez la peor desventaja para el pelirrojo.

De los sitios que tenía en su lista para revisar, 4 estaban en perfecto orden…sin señales de gente del gobierno o posibles enemigos pero aún le quedaba una última que revisar. Ese sitio se encontraba entre los menos favoritos del revolucionario…que aun siendo un dios oscuro, lo encontraba realmente agobiante. Las energías que podían percibirse en el ambiente bastaban para drenar la fuerza de cualquiera que cruzaba esas tierras pero no solo era eso lo que volvía tan…incomodo visitarlas. El dios no era extraño de tratar con la muerte…muchas veces jugo con ella pero nunca se cruzó frontalmente con una de esas criaturas que se levantaban de la tumba aunque claro…siempre que pasaba por esas islas, el coro de gemidos agónicos llenaba sus oídos. Quizás era una de las pocas cosas que realmente ponía de puntas los nervios del dios oscuro.

A su alrededor se levantaban una serie de edificios en decadencia…todos presas del inclemente tiempo que nada perdonaba. Según había escuchado…esas islas antes fueron el hogar de muchas familias de renombre y poder…todas quienes desaparecieron por un accidente de gran magnitud. Las historias hablaban de tesoros ocultos en lo profundo de esa isla, riquezas tan bastas que mil vidas serían necesarias para gastarlas todas. Frederik no era avaro…nunca le intereso el dinero pero algunos de sus soldados se habían internado en más de una ocasión en las vastas ciudades en ruinas…y muy pocos lograron volver vivos a la base. Sabia de sobra que los zombis no eran una cosa de broma…esas bestias podían parecer débiles en apariencia pero juntos, estaba seguro que eran enemigos por demás formidables —Detesto esta zona —Dijo pateando un cráneo cubierto de tierra, viendo cómo se fragmentaba contra un edificio mientras continuaba su camino.

Eventualmente las calles se abrieron, dando paso a una zona más urbana de esa ciudad. Ahora podía observar casas derrumbadas y otras casi en el mismo estado junto uno que otro cuerpo vuelto huesos en los áridos patios. Era asombroso como un simple error del gobierno pudo causar tanta destrucción a tantas personas…sesgaron tantas vidas y sin problema alguno —Es cada vez más obvio para mi…lo ciegos que están los soldados —Murmuró por lo bajo mientras removía con una de sus piernas otro cadáver pero ni bien continuo caminando, su cuerpo sufrió un tenue escalofrió. Fue momentáneo pero percibió una energía distinta a la emanada por los zombis…era la energía de alguien con más vida y se encontraba relativamente cerca — ¿Intrusos? —Se cuestionó por lo bajo mientras echaba a correr por las calles, intentando hacer el menor ruido posible.

Se abrió paso lo más rápido que pudo…fulminando incluso un par de zombis en el camino y tan rápido como avanzo, se detuvo en la entrada a un conjunto residencial. No podía creer lo que estaba viendo…parecía un chiste del destino pero ahí se encontraba uno de los famosos custos. Uno pensaría que sería difícil de deducir aquello con solo verlo pero…esa mujer era bastante singular, lo cual volvía muy fácil su reconocimiento —Oh…una bendición y una maldición…me pregunto cuál será esta noche —Musitó por lo bajo el pelirrojo mientras elevaba su mano derecha y atraía a su palma una gran cantidad de metal, fabricando diez agujas metálicas de 5 metros de largo pero delgadas. Quería saludar como era debido a la mujer por lo que lanzo dos de las agujas hacia la muchacha con aspecto de conejo mientras dirigía las otras tres hacia los cimientos ya de por si frágiles, de la casa

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por **Auros** Lun Ago 29, 2016 12:17 am

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No siempre vas a poder evitar una batalla. [Priv. Frederik L. Damgaard] Baw6yAz

Resultados : 43

por **Kuro Usagi** Lun Ago 29, 2016 1:39 am

Era obvio que no iba a seguir ahí parada ni de broma, pues estaría loca si pensara quedarme un rato más en este lugar. ¿Quien en su sano juicio se quedaría por estos lugares? Daba demasiado miedo escuchar quejidos en muchas direcciones, lo peor era que gracias a mis orejas las escuchaba como si estuvieran algo cerca y eso era demasiado escalofriante para mi. Pues mis orejas no paraban de moverse de un lado para otro, captando los sonidos de cada lado una y otra vez, siendo que muchas veces deseaba que se callaran por lo asustada que me estaban haciendo sentir o más bien hasta me estaba dando mal rollo. En esos momentos me daba ganas de poner tapones en mis orejas para no escuchar nada más y seguir adelante, aunque obviamente mis orejas eran demasiados importantes y era mejor estar siempre alerta. ¿No?

Tome la decisión de irme del sitio, siendo así que pensaba pegar un salto pero en el ultimo instante me percate de algo. Fue entonces cuando me voltee con rapidez hacia un lado. Gracias a mis orejas, me percate del sonido de algo dirigiéndose hacia a mi, por lo que obviamente en un intento de esquivar el ataque el cual se aproximaba hacia a mi, pegue un gran salto hacia un lado pero no fui tan veloz como siempre para esquivar todas las agujas. Siendo así que seis de estas que se habían clavado en mi cuerpo, dos en el hombro, otras dos en el brazo izquierdo y las restantes en el otro brazo en un intento de cubrirme y con ello durante el intento de esquivarlo, no solo me había tropezado, sino que me vine abajo porque la casa también se había venido abajo, siendo así que me había llenado de tierra en el vestido, pues me había caído de espalda hacia abajo. Tosí por el polvo de tierra que se levanto, hasta algunas rocas se habían venido encima aunque por suerte no eran tan pesadas. El dolor intenso que me producían las agujas era demasiado desagradable, ni si quiera me atrevía de mirar la sangre que seguramente estuviera brotando de ahí, después de todo, las agujas habían atravesado mi piel como si fuera mantequilla.

Intente apartar las rocas que se encontraban encima de mi y luego de ello, me senté en el suelo de la casa. Aproveche a quitarme con rapidez las agujas como pude y sin mirar del todo la sangre que de las heridas comenzaron a brotar. Obviamente me dolió, pero ahogue el quejido que había querido salir de mis labios cuando los quite sin pensarlo de ahí. Aunque fuesen demasiado largas las agujas y estas me hubieran atravesado, pero por suerte ya había conseguido sacarlas obviamente. ¿Quien fue el agresor? Ni si quiera me había dado tiempo de mirarle, pero esto no iba a quedar así. Extraño era que mi personalidad aun no hubiese cambiado por la que tomo durante las misiones, la cual salía sola sin forzarla y la cual era obviamente una tapadera en esos momentos. Quizás era porque me había pillado de improvisto. Me fui entonces levantando apenas pude del suelo y fruncí el ceño lentamente. Apenas podía mover bien los brazos, pero sabía que no iba a durar mucho tiempo, ya me había entrenado para este tipo de cosas después de todo. Por algo era una Custos Dei y no solo eso, sino la Secondo Dei, siendo que había avanzado mucho para subir de rango. Sabía que eso se conseguía con mucho esfuerzo y sin descanso, por ello siempre trataba de perfeccionar mis habilidades, para que de ese modo no me oxidara o algo.

Tome algo de impulso para coger fuerza con mis piernas y pegue un gran salto en el lugar para salir de la casa derruida, siendo que muchas piedras me las lleve de frente, pero no me iban a impedir atacar. Había llegado a una gran altura y mientras caía, haciendo que todo mi cabello, ropa o las orejas se elevaran hacia arriba, agarrando lo segundo obviamente para que la falda no se levantara. Desde la altura en la que estaba, me dispuse a mirar hacia abajo para saber quien era aquel que había osado atacarme sin previo aviso y cuando mis ojos lo localizaron, enseguida supe de quien se trataba. Un ex Novarum, que actualmente ya no pertenecía a tal rango pero eso aun así lo hacia conocido. No por nada siempre me informo sobre quienes son los Novarums, tanto actuales como no. Pues los rangos de estos eran superior a los demás. Con más razón debía de ponerme seria. Utilice una de mis habilidades eléctricas, concentrando en mis piernas electricidad, habilidad llamada Lightning Kick. ¿Podría asestarle un golpe con esta? Sino, seguramente si me esquivara, crearía un boquete en el suelo.

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por **Auros** Lun Ago 29, 2016 1:39 am

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#1 'Dado Cósmico' :
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#2 Resultados : 45

por **Frederik L. Damgaard** Mar Ago 30, 2016 8:25 pm

Dados

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por **Auros** Mar Ago 30, 2016 8:25 pm

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SISTEMA MUNDIAL DE SPIRIT SOUL
Categorías	Chaos	Spatium	Tempus	Revolucionarios & Anti gobierno
Territorio	225	240	110	80
Infraestructura	170	320	330	60
Vehiculos	150	150	195	250
Armamento	90	21	21	45
Soldados	80	70	70	110
Prestigio	80	50	120	120
Total:	1435	3747	1531	2085

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MEJORAS MUNDIALES DE SPIRIT SOUL
Categorías	Chaos	Spatium	Tempus	Revolucionarios & Anti gobierno
Vehiculos	Lvl 0	Lvl 0	Lvl 0	Lvl 0
Infraestructura	Lvl 1	Lvl 1	Lvl 1	Lvl 1
Armamento	Lvl 1	Lvl 1	Lvl 1	Lvl 1
Links Necesarios:	Info del sistema	Ramas de mejoras	Tierras dominadas	Contador de puntos

MEJORAS DE CHAOS
Tipo	Nivel	Mejora	Adquirida el día
Mejora de Armamento	1	Armadura reforzada. Los soldados cubren su espalda, hombros, y brazos con armaduras mágicas. (+17 puntos al dado de defensa de cada soldado)	26/5/2016
Mejora de Infraestructura	1	Geisers de lava.Tus murallas son cubiertas por geisers de magma que queman todo lo que se acerca. (+100 hp a cada muralla al defender de una invasión)	21/8/2016

MEJORAS DE SPATIUM
Tipo	Nivel	Mejora	Adquirida el día
Mejora de Armamento	1	Pólvora Delux. Las armas del reino sufren una mejora total. (+20 al dado de ataque de cada soldado)	26/5/2016
Mejora de Infraestructura	1	Se refuerzan las murallas del reino en edificios gubernamentales. (+100hp a todas las murallas al defender de una invasión )	24/8/2016

MEJORAS DE TEMPUS
Tipo	Nivel	Mejora	Adquirida el día
Mejora de Infraestructura	1	Campo tecnológicamente alterado. Un campo electro-magnético rodea tus murallas protegiéndolas del daño enemigo. (+150 hp a todas las murallas al defender una invasión)	26/5/2016
Mejora de Armamento	1	Cañón electromagnético. Los soldados son armados con tecnología de punta. (+15 al ataque de cada soldado)	21/8/2016

MEJORAS DE REVOS & ANTI-GOBIERNO
Tipo	Nivel	Mejora	Adquirida el día
Mejora de Armamento	1	Armas cortantes (Espadas): los forjadores y herreros abdicados a la revolución son considerados los mejores entre las regiones. (+20 al dado de ataque de cada soldado)	26/5/2016
Mejora de Infraestructura	1	Diavolik Force. La manipulación con éxito de materiales para crear tus murallas, hace que la protección que esta otorga aumente considerablemente. (+120 hp a todas las murallas al defender de una invasión)	21/8/2016


Disponible	Hikari Hiroshi	Jellal Slater