Animals [Priv. Rosette Lestrange][+18]

por **Atreyu** Dom Oct 09, 2016 9:02 am

La reunión terminó antes de lo previsto, normalmente solía quedarse hablando con los ancianos, pues de cada anécdota que le contaban aprendía algo nuevo, aunque fuera sobre el comportamiento o costumbres, el saber no ocupa lugar y cuanta más información se tenga, más preparado puedes estar ante cualquier tipo de situación. Que sea un ser longevo no significa que lo conozca todo, había cosas que estaba empezando ahora a descubrir, como el miedo. Más de diez mil años han tenido que pasar para que el dios oscuro descubriese esta emoción. Quedó tan expuesto como cualquier insignificante criatura. Hasta los seres más poderosos pueden sucumbir a ella y quedar paralizados por el pánico.

El recorrido entre Oishi y El Lago era relativamente corto si se hacía volando, aun así y sabiendo que llegaría antes que ella, lo hizo tan rápido como pudo. Estaba impaciente por encontrarse con Rosette, por reanudar aquel combate que tuvo de detener por dos razones. La primera era la resistencia física de la mujer, por mucho que se contuvo los ataques más poderosos, llegaron a un punto en el que ambos estaban doloridos y magullados, cierto es que lo estaban disfrutando. Así como él, la paladina no tenía miedo del dolor, disfrutaba con esta sensación, le excitaba, el daño recibido en su propio cuerpo, el aroma de la sangre, el escozor de las heridas, el ruido de los cuerpos golpeados. Todo ello era una sinfonía perfecta para sus sentidos. La segunda era la cercanía de sus cuerpos, la amaba, se sentía tan irremediablemente atraído por ella que suponía un esfuerzo colosal no caer en la tentación de hacerla suya. No había nada que desease que cambiara, era perfecta, la mujer mas maravillosa con la que se había cruzado, compleja y fuerte, bella y frágil. Esa fragilidad humana era la que le frenaba, tenía miedo de perder el control y hacerle daño sin querer. De que se asustara al conocer su verdadera naturaleza, violenta y oscura.

Abstraído en sus pensamientos, miró hacia abajo para comprobar que ya se encontraba sobrevolando el lago. Un majestuoso espacio tan diferente a cualquier otro lugar, que se podría decir que se había ido hasta una zona de Spatium, el agua cristalina adquiría un tono violáceo al reflejar los colores de la puesta de sol del peculiar cielo de Chaos. Quería encontrar un punto especial para su encuentro. Cerca del agua, para poder admirar el reflejo de la luna sobre ella, las noches en ese lugar eran todo un espectáculo y quería enseñarselo a Lestrange. Hacia el norte, había una pequeña superficie semicircular, quedando recogida del resto de la llanura gracias a un entrante de la tierra en la montaña. Un rincón bastante apartado de la parte principal de la zona. No es que esperaba encontrarse con alguien, pero dotaba al amplio espacio de una sensación de intimidad que le gustaba.

Descendió del cielo cambiando de forma, caminando lentamente cerca de la orilla, deteniéndose de frente al sol, contemplando el magnífico escenario que le brindaba su tierra. Se acercó a un árbol y dejó apoyada en una rama su largo abrigo rojo junto con la camiseta, dejando la parte superior de su cuerpo al descubierto. Se quito el calzado, quedando tan solo vestido con sus pantalones. Camino por la orilla mojando sus pies descalzos, comenzando una serie de estiramientos para desentumecer el cuerpo antes de que llegara su contraria. Esta noche iba a ser intensa, más le valía dar lo mejor de sí, pues cualquier cosa podía pasar.

por **Rosette Lestrange** Dom Oct 09, 2016 10:00 am

La paladina corría de un lado a otro de la habitación buscando todo lo que iba a necesitar para el combate. Nada más llegar a sus aposentos descubrió de buen grado que los sirvientes del castillo limpiaron el desastre producido por Morrigan. Rose pensó en ir para agradecerle la ayuda, el haberle salvado la vida e intentar socializar como lo haría una amiga. Estaba descubriendo demasiadas cosas nuevas en un breve periodo de tiempo. Amor y amistad, dos sentimientos extraños para una mujer que toda la vida sintió rencor y burla dirigida a toda criatura que se cruzaba. Esperaba entablar una buena amistad con la Gladius, en parte le hacía ilusión tener una “amiga”, nunca tuvo una y sería la primera en su vida. Ya tendría tiempo de hablar con ella y llevarle esa botella de vino que quería, seguro eso le alegraba.

Dentro de los cajones había ropa limpia nueva, incluso le hicieron la colada, los sirvientes eran muy efectivos… pero claro, tras el accidente del cheff con el ministro pocos buscarían enfurecerlo o a la paladina. Dejó las alforjas a su lado para guardar la muda que necesitaría tras acabar el combate, la vez anterior acabó con la ropa destrozada y de no ser por la maga hubiera acabado desnuda. Allí sólo estarían los dos, sin espectadores ni curiosos, se dejarían llevar por el afán de lucha. De no ir preparada acabaría desnuda junto el ministro, y sus miradas eran poco discretas, en esa situación dios sabe cómo reaccionaría. Escogió un par de prendas, las guardó dentro de la alforja y se levantó para seguir guardando lo necesario.

Traviesa aprovechó la ausencia del ministro para saquear su reserva personal de vino, cogiendo dos botellas. Una para Morrigan, que escondió a conciencia en la habitación para que no la encontraran, y la otra la guardó junto al resto de las cosas en la alforja. Quizás al albino le apetecería un poco de vino después del combate. La paladina siempre pensaba en las necesidades de su señor, incluyendo las más básicas. Se puso las alforjas sobre el hombro y abrió las puertas que daban al exterior. Antes de salir echó un último vistazo a la habitación, fijándose en la urna de cristal que colocó cerca de la cama, en el interior se encontraba la rosa que le había regalado horas antes. Respiró hondo y salió, puso las manos sobre el borde, en el mismo lugar donde estuvo el ministro. Se concentró en su cuerpo, controlar su cuerpo… esa ya conocida molestia en su espalda apareció, era el preludio a la aparición de las alas. Rompieron la piel con brutalidad, estaba condenada a tener ese par de cicatrices en su espalda para siempre. Tomó impulso y alzó el vuelo, como imaginaba fue más fácil que la vez anterior, lo controlaba.

Desde las alturas el mundo parecía otro, y el viaje se le hizo más corto de lo pensado. El lago era uno de lugares más bellos de Chaos, un lugar que no parecía de allí, entre tanto calor y horrores costaba creer que existía un lugar con bonito. Sobrevoló la zona buscando el lugar donde estaba el ministro. Antes de salir había preguntado por él, y los guardias le informaron de que salió antes que ella con bastante prisa. Sería la primera vez que llegaba antes que ella, causándole molestia. Después de varias vueltas divisó lo que era una figura en el suelo. El lago no era muy transitado, así que descendió en picado, aterrizando de rodillas, levantando una nube de polvo. Se levantó, batiendo las alas suavemente para despejar el polvo. Entonces vio al ministro a unos metros de ella, sin la parte superior de la ropa ni el calzado, solamente el pantalón. Desvió la mirada, se relajó y pensó. En el transcurso del combate los dos acabarían peor, o controlaba esas emociones y se concentraba o el combate no duraría nada. Lanzó las alforjas lejos de ellos dos, así evitaría que sufriera daño por el combate. Guardó las alas de nuevo, así se iba acostumbrando al dolor que le provocan, tarde o temprano ni se daría cuenta. Acortó la distancia entre los dos para contemplarlo mejor. Estaba estirando en la orilla del lago, preparándose para el combate. La paladina entrelazó los dados tras la espalda y caminó hacia él, parando a su lado.- Es precioso…- Susurró viendo al frente. Una sonrisa maliciosa apareció en sus labios. La paladina retrocedió un poco, y golpeó el agua provocando que mojara al regente.- Perdón, fue un accidente.- Se disculpó falsamente.- Cuando usted quiera, empezamos.- Preparada para entrar en combate en cualquier momento.

por **Atreyu** Dom Oct 09, 2016 10:16 am

Tan solo llegó unos minutos más tarde que él. Era prácticamente imposible adelantarse a la mujer. Su sentido del deber y puntualidad eran impecables. Pero por una vez consiguió adelantarse. Sonriente, se detuvo mirando cómo descendía del cielo con esas preciosas alas negras y cambiaba de apariencia al tomar tierra. La capacidad de aprendizaje de Lestrange le maravillaba, en un solo día pudo dominar el cambiar de apariencia a su voluntad, al menos, en una situación normal. Ahora quedaba ver como reaccionaria cuando se sometía a más presión. Ya se encargaría él personalmente de que dominara por completo su nueva forma.

Rosette se acercaba a él, admirando la belleza del lugar, estirándose y caminando de manera sensual por la orilla. Minipunto para el dios oscuro, ya había conseguido impresionarla con el lugar, eso hizo que su ego se hinchara. La sonrisa de sus labios se iluminaba cuando ella estaba cerca, seguramente su cara seria semejante a la de cualquier idiota enamorado, pero era algo que no podía controlar, tampoco le importaba. Estaban solos, lejos de cualquier mirada indiscreta del reino. No se habían parado para hablar de ese pequeño detalle. Por su parte no había problema en que se hiciera público, en ninguna parte estaba escrito que no podía enamorarse de un miembro de su ejército, al fin y al cabo era su vida, mientras cumpliera con su deber de Ministro de Chaos, el resto era secundario. Pero temía por ella, por la opinión que se pudiera crear y cómo repercutiría esto en la paladina. Aunque hacía meses que ya desempeñaba su labor, pero claro, las malas lenguas siempre dirían que se mantuvo en secreto todo este tiempo.

No portaba su armadura de siempre, como poco, pasaría varias semanas en el herrero, su visita a Rihm la dejo en muy mal estado. Sin embargo, aun a sabiendas que prefería las armaduras que dejaban algo de margen a la imaginación, se presentó con otra similar a la habitual. Cierto es que esta presentaba más piezas de tela y cuero en el pecho, pero sus brazos y piernas seguían cubiertos por placas. Sin duda iba a ser un combate entretenido.

Quería probar su nuevo poder, lo mejor sería atacar de lejos… Sus pensamientos fueron interrumpidos por el espontáneo y provocador acto de Lestrange. Fingiendo inocencia, le salpicó con agua, alcanzando ésta parte de su cuerpo. Una gota que resbalaba por su rostro fue capturada por su lengua al entrar en contacto con la comisura de sus labios, llevó su mano al pecho y de una forma bastante sugerente capturó con ella todas las gotas que pudo desde su clavícula izquierda hasta el borde de su pantalón. Lentamente comenzó a alejarse de la orilla del lago y de su adversaria, dejando que la hierba del suelo acariciara sus pies desnudos.

Acechándola con la mirada, comenzó a crear una llamarada entre sus manos. - Te propongo una cosa... - Sus ideas siempre tenían una doble intención en lo que al trato de la paladina se refería, aunque esta, debido a su inocencia, no conseguía descubrirlo a tiempo. - Prohibamos entrar en contacto físico con el contrario. El primero que lo haga pierde. ¿Aceptas? - La luz rojiza de las llamaradas que invocó, iluminaron su rostro en la oscuridad, como si se tratara del mismísimo Belzebú. Sus manos incandescentes se sobrepusieron entre sí, y con un violento movimiento al frente, lanzó una llamarada con forma de cabeza de dragón que envolvió el cuerpo de Rosette. - Señorita Lestrange, ya sabe lo que opino del exceso de ropa para los entrenamientos. ¿No cree que debería de haber elegido un atuendo más adecuado para nuestro encuentro? - No pudo evitar morderse el labio inferior tras pronunciar estas palabras. Su mente perversa imaginaba a su adversaria con algo más de su cuerpo visible. Tenía que conseguirlo a cualquier precio.

DATOS DE LA BATALLA:

por **Auros** Dom Oct 09, 2016 10:16 am

El miembro 'Atreyu' ha efectuado la acción siguiente: Dados de batalla

'Dado Cósmico' :
Animals [Priv. Rosette Lestrange][+18] Baw6yAz

Resultados : 36

por **Rosette Lestrange** Dom Oct 09, 2016 12:07 pm

Las gotas de agua salpicaron parte del cuerpo del albino, mojando su rostro y torso, no tardó en darse cuenta de que había sido muy mala idea. Las gotas corriendo por su cuerpo le daban un aspecto más atrayente, que empeoró cuando con la lengua atrapó algunas que caían por la comisura de sus labios. Acto seguido vio embobada como quitaba el agua de su cuerpo, desde la clavícula hasta el borde su pantalón. Tragó saliva con dificultad, la verdad es que los actos que normalmente pasaban desapercibidos ahora le resultaban más estimulantes.

No obtuvo una respuesta respecto a su pequeña travesura, en vez de eso se alejó de la orilla dejando un distancia considerable entre los dos. Se giró siguiendo con la mirada al albino sin entender sus intenciones. El cuerpo entero de Rose le gritó que se preparara al ver las llamas en las palmas de las manos de su superior. Saliendo también de la orilla del lago busco la seguridad de la distancia sin distraerse, escuchando lo que le decía. La distracción de la conversación le impidió reaccionar al repentino ataque, recién se encontraban y ya empezaba la pelea. El cabeza ardiente de dragón la golpeó de lleno envolviendola en fuego. El calor de las llamas no le producía tanto daño como antes, esta vez su piel no se quemaba con tanta facilidad. Era capaz de resistir las quemaduras, no tanto suerte tuvo su ropa. La tela se fue consumiendo lentamente, dejando ya varias partes de su torso a descubierto, por suerte el cuero aguantaba bien el fuego. La paladina sacó las alas de golpe para dispersar la cortina ardiente que la rodeaba. Levantó la mirada para cruzarla con la de Atreyu, con un leve sonrisa en sus labios.-Cierto… le pido disculpas, no lo recordé.- Se disculpó encogiéndose de hombros. Había olvidado la conversación en la batalla anterior, y era un orden directa que olvidó. Sin moverse del sitio se fue deshaciendo de las piezas de metal. ardiendo por el calor, que cubrían sus hombros y piernas. Las lanzó lejos, quedándose con la ropa de cuero y tela que marcaba perfectamente el sinuoso cuerpo de la paladina.-¿Mejor así?- Preguntó con cierta picardía.

Le había pillado por sorpresa el primer movimiento, ese ataque de fuego lo desconocía también, eso le indicaba que en el combate descubriría las habilidades ocultas. Le rodeó en silencio sin apartar la mirada de él, vigilando sus movimientos. Le extrañaba que quisiera un combate a distancia, la última vez buscaba lo contrario, pero sus motivos tendría.-¿Un combate a distancia? Sí usted lo desea, así lo haremos, mi señor.- Una leve reverencia para aceptar el reto, al inclinarse dejó a la vista el escote ocasionado por la tela quemada de su pecho. Se incorporó preparada para responder.-Adelante, pues.- La paladina usó uno de sus viejos trucos. Cerró las manos, y una luz rojiza las iluminó, al abrirla en las palmas tenía sus esferas de fuego, sus preferidas. Tomando impulso las lanzó la primera tanda contra el ministro esperando que las esquivara. Aprovechando el movimiento, lanzó el resto con más fuerza que las anteriores para que cayeran en el sitio donde el ministro debería moverse para esquivar las primeras explosiones. Una vez tocara una de las esferas esta explotaría, provocando una reacción en cadena en las demás, un bonito espectáculo de fuegos artificiales.

La noche sería testigo de la brutal batalla, sin nadie más que les espiara u observará curiosos. Ahora que lo pensaba, nunca estaban solos del todo. Fuera acompañados de otro miembros del ejército o un civil del castillo, la paladina y el ministro casi no habían estado a solas. Muchas veces sentía incomodidad cuando una tercera persona se unía a su conversación o molestaba… por no decir las mujeres que buscaban la atención del albino por una noche. No se podía negar, lo comprendía en ese momento, el ministro era un hombre muy atractivo… no le extrañaba que le intentarán seducir o acostarse con él… desconocía si desde que entró como paladina tuvo alguna aventurilla, y la verdad no quería saberlo, el pensar que una puerta les separaba… El rostro de Rosette adoptó una mueca de molestia, estaba… ¿Celosa? Pensar en eso la ponía celosa, un sentimiento irritante que se moría por ganar de borrar. Espero el siguiente movimiento del regente, de atacar de nuevo le acabaría dando un golpe directo por la rabia… debía controlarse, de momento.

Datos:

por **Auros** Dom Oct 09, 2016 12:07 pm

El miembro 'Rosette Lestrange' ha efectuado la acción siguiente: Dados de batalla

#1 'Dado Cósmico' :
Animals [Priv. Rosette Lestrange][+18] Baw6yAz

#1 Resultados : 29

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#2 'Dado Cósmico' :
Animals [Priv. Rosette Lestrange][+18] Baw6yAz

#2 Resultados : 53

por **Atreyu** Dom Oct 09, 2016 1:27 pm

Satisfecho, observó como la tela, para su gusto en exceso, sucumbía ante el ardor de su fuego, dejando a la paladina más ligera de ropa, quedando reducida prácticamente a nada. El cuero, resistió bien el calor, y la mujer, obediente, se deshizo de las piezas metálicas que cubrían sus extremidades, dejando su cuerpo expuesto. Dejó escapar un pequeño suspiro, inaudible por su adversaria, estaba empezando a despertar su bestia interna. A su mente venían los recuerdos de Rosette tumbada bajo su cuerpo por primera vez, en el primer contacto con su piel, el aroma que desprendía, los golpes que ferozmente le devolvía demostrando que era una guerrera. Apartó esos pensamientos de su mente y volvió a concentrarse en el combate, de lo contrario, acabaría perdiendo contra su contrincante.

- Como demonio que eres, tienes una afinidad especial con la Umbaquinesis, si la llegases a dominar, podrías crear cualquier cosa que pasar por tu imaginación. Ya fuera un dragón, un felino o un temeroso huargo. Tu poder radica en tu mente, cuanto más la expandas más fuerte te harás. Sólo tienes que dejarte abrazar por la oscuridad. No temas, es bella, cálida, te envuelve entre sus brazos y te hacer sentir protegida, segura, fuerte, capaz de cualquier cosa que te propongas. Resistirse a ella no te traerá ningún beneficio, simplemente tienes que dejarte llevar… - Su cuerpo empezó a emanar una energía oscura, concentrada en la parte superior. De cintura para arriba, se podía apreciar una silueta, como si se tratara de un guerrero samurai que sujetaba una katana. La sombra, adoptaba la misma posición defensiva que su amo, preparada para lanzarse contra su objetivo cuando así lo estableciera. Toda esa oscuridad que se manifestaba como una sombra fruto de la prolongación del cuerpo de Atreyu, se abalanzó sobre la paladina cuando el dios oscuro ejecutó el ataque, estirando su brazo derecho al frente, ordenando a la sombra a que se abalanzase sobre la mujer.

- ¿Bella verdad? Eso es sólo el comienzo, puedo enseñarte todo lo que quieras, sólo tienes que pedírmelo y lo haré… Cualquier cosa Rosette. - Tras pronunciar estas palabras dudo por un instante sobre que es a lo que se refería con ellas. “Cualquier cosa” Y con ello no se refería al aprendizaje, si no a la vida misma. Moría de ganas de hacer lo que fuera que complaciera a la mujer que amaba. Su rango estaba por encima de ella y de todo el reino, era la máxima autoridad de Chaos, pero fuera del trabajo, era un hombre enamorado que simplemente quería ver feliz a la dueña de su alma, colmarla de placeres y verla sonreír, sin importar lo que le pidiese.

DATOS DE LA BATALLA:

por **Auros** Dom Oct 09, 2016 1:27 pm

El miembro 'Atreyu' ha efectuado la acción siguiente: Dados de batalla

#1 'Dado Cósmico' :
Animals [Priv. Rosette Lestrange][+18] Baw6yAz

#1 Resultados : 58

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#2 'Dado Cósmico' :
Animals [Priv. Rosette Lestrange][+18] Baw6yAz

#2 Resultados : 12

por **Rosette Lestrange** Dom Oct 09, 2016 2:40 pm

La confianza de la paladina aumentaba con cada movimiento, descubriendo las habilidades que nunca pudo conocer de Atreyu. Al parecer las explosiones tampoco surtieron mucho efecto en él, no le extrañaba, un hombre que convive con el calor y controla el fuego sin duda tiene gran resistencia a este. Se preparó para el siguiente ataque, la verdad es que el combate a larga distancia le estaba resultando incómodo… acostumbrada a la cercanía de los cuerpo en la batalla. Así le costaba disfrutar, incapaz de sentir el calor del otro cuerpo, la respiración agitada por el esfuerzo. En esas circunstancias más se veían como dos novatos lanzándose cosas. No iba a replicarle, fue un reto del ministro y ella aceptó de buena gana, tocaba ver cual de los dos perdía la apuesta.

Esperaba el próximo golpe de Atreyu, sin embargo en vez de eso le habló sobre el poder de la umbrakinesis, un poder enlazado con los demonios. Rose bajó la cabeza pensativa, la oscuridad nunca le había dado miedo, en ninguno de los sentidos, la mayor parte de su vida fue entre las sombras… ahora siendo un demonio notaba ciertos cambios en su naturaleza. La afinidad de la que hablaba con los poderes oscuros, las sombras… en su mano estaba la posibilidad de aprenderlo y controlarlo. Mil cambios en su cuerpo tanto físicos como emocionales ¿Por eso veía al ministro con otros ojos? Había aceptado sus sentimientos por él, pero esos chispazos en su cuerpo cuando la tocaba, acariciaba y besaba… ¿Qué significaban? Le enfadaba no saber lo que ocurría, hasta los celos la invadían, una mezcla explosiva. El poder de la umbrakinesis sonaba bien, le gustaría aprenderla, sobretodo de manos de su amado.-No hace falta que me hable sobre la oscuridad, señor… he vivido mucho en ella, y ahora me entrego completamente a ella.- Levantó la mano derecha acariciando su pecho, el lugar donde estuvo la herida de muerte. Tendría que aprender y controlar su nueva naturaleza como demonio. La verdad es que no se preocupaba mucho, antes ya era una criatura salvaje ¿Y ahora? Sería un bestia mucho peor. -Nunca temí a la oscuridad, ni siendo humana, ni siendo demonio.- Confesó con seriedad, la sentía en su interior y estaba orgullosa.

Quedó pasmada contemplando a la enorme sombra con silueta de samurai formante sobre la parte superior del albino. La impresionante figura le dejó paralizada, imitaba a la perfección los gestos de su amo, y en un segundo lanzó su ataque. Atreyu fue quien se movió, pero fue la sombra quien la golpeó lanzandola lejos. La paladina tuvo que usar sus nuevas alas para detenerse en el aire, dejándose caer al suelo para recuperarse del ataque. Había sido increíble, y ella era capaz de hacer lo mismo con el entrenamiento adecuado. Se limpió el polvo de encima sacuendiendo la ropa con las manos. El rostro de Rose se tornó en confusión con las últimas palabras de Atreyu, entendía que quisiera convertirla en un mejor soldado ¿Pero cualquier cosa?-Yo...- Murmuró con la voz temblorosa.-Hay muchas cosas que quiero, señor...- Continuó, caminando hacia él de nuevo.-Pero no puedo tenerlas todas ¿Sabe? Algunas escapan de mi alcance, y daria la vida por ellas...- Desvió la mirada para no acabar atrapada en los brillantes ojos azules de su contrincante. Los sentimientos por Atreyu afloraron de nuevo, en mitad del combate, causando que sus palabras fueran un puñal en su corazón ¿Qué quería? En esos momentos, simplemente besarlo… -Estaré satisfecha con todo lo que usted me enseñe, es un gran maestro, mi señor.- Le dedicó una leve sonrisa, pero en sus ojos se notaba la tristeza.

La paladina debía continuar el combate o perdería el control sobre ella misma, dejarse llevar por sus impulsos era normal, pero esos en concreto no. Haciendo acopio de todo su control su cuerpo fue cambiando adoptando el aspecto de demonio. Deslizó una de sus garras por el antebrazo cortando este lentamente. La sangre no tardó en brotar de la herida, cubriendo la piel de gotas rojizas que caían al suelo. La paladina cerró los ojos y tomó aire, movió el brazo provocando que la sangre saliera disparada de su brazo. Las diminutas gotas de sangre se quedaron flotando frente a ella, mientras evitaba que más sangre saliera del brazo. Con la mano sana, dio la orden para que esas gotas de sangre salieran disparadas hacia el ministro como proyectiles capaces de atravesar al enemigo.-Nunca tuve oportunidad de enseñarle esta habilidad...- Se relamió el dedo manchado con su propia sangre.-Pero… me hace daño, de usarla mucho podría morir desangrada.- Sonrió, siendo demonio hasta los sabores eran mejores.

Datos:

por **Auros** Dom Oct 09, 2016 2:40 pm

El miembro 'Rosette Lestrange' ha efectuado la acción siguiente: Dados de batalla

#1 'Dado Cósmico' :
Animals [Priv. Rosette Lestrange][+18] Baw6yAz

#1 Resultados : 59

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#2 'Dado Cósmico' :
Animals [Priv. Rosette Lestrange][+18] Baw6yAz

#2 Resultados : 47

por **Atreyu** Dom Oct 09, 2016 3:52 pm

¿Qué era lo que quería Lestrange? Hasta hace poco guardó las distancias con ella, pero ahora era todo lo contrario. Lo único que tenía claro era que su amor era correspondido, poco más conocía de la mujer que tenía enfrente. - ¿Qué es lo que quieres Rosette? ¿Ser más fuerte? ¿Poder? ¿Conocimiento? - La contraria preparaba un nuevo ataque, sus manos adoptaron su forma demoníaca, unas bellas garras de aspecto humanoide que pintaban deliciosamente dolorosas al entrar en contacto con su carne. Se quedó clavado en el suelo observando como Lestrange utilizaba una de ellas para cortar su brazo y dejar brotar la sangre, pudo oler su aroma, lo conocía demasiado bien. Apreto sus puños y cerro durante unos segundos los ojos para intentar no lanzarse sobre ella. Solo pensar en ello agitaba su respiración. Tenerla tan cerca y a la vez tan lejos. Cuando quiso darse cuenta, las gotas de sangre que lanzó Rosette de su herida le alcanzaron, evitó unas cuantas rodando por el suelo, pero el impacto de las primeras no pudo esquivarlo a tiempo por estar distraído.

El simple hecho de estar enfrentándose a ella en la distancia era una tortura. No es como se esperaba. En el anterior combate desde el primer momento lo disfrutó, este le estaba dejando un sabor agridulce, no lograba concentrarse, estaba nervioso y esa estúpida norma que impuso al principio de que no hubiese contacto físico... Menuda estupidez, de todas formas igual que la impuso, podía revocarla, de no aceptarlo su compañera, cosa que dudaba, le daría igual. Esto no era un combate, era una demostración de fuegos artificiales.

Anduvo hacia ella despacio, sin resultar amenazador. La contraria permanecía sin moverse del sitio, esperando la cercanía de ambos. Podían percibir el calor que emanaban sin tener contacto. La suave brisa de la noche hizo llegar el agradable olor que desprendía su larga melena rubia. La diferencia de estatura dejaba el rostro de la mujer a la altura de su pecho. Su respiración se hizo más pesada y su corazón comenzó a latir más fuerte al sentir el aliento de Rosette contra su pecho descubierto. Quería tocarla, estrecharla entre sus brazos y besarla como lo hizo esta mañana en el palacio. De hacerlo perdería, ganar o perder nunca supuso un problema para Atreyu. Su poder emerge de las emociones que se desatan en un combate, sin importar el resultado final, ser derrotado por “su paladina” sería una sensación de victoria. Pero no quería dejárselo tan fácil. - Voy a tocarte...- Notó como esas palabras agitaron a la mujer. - Revoco la anterior orden. Ahora sólo contarán los golpes físicos, ¿entendido? - Su voz tenía un tono autoritario. Esperó la respuesta de la contraria, y tras ella, su mano ascendió por su cuello, hasta sujetar el mentón de Rosette con su pulgar y su índice, elevando el pálido rostro de la paladina a la vez que bajaba el suyo para robarle un suave beso. - Rosette… - Acarició su rostro con el puente de su nariz, sus labios rozaban cada rasgo de la contraria, una delicia para su tacto. - Me juraste lealtad como Ministro de Chaos. Eso implicaba obedecer todas y cada una de mis órdenes, sin importar su naturaleza.- Sujetó con ambas manos la cabeza de Lestrange, haciendo que la elevase para enfrentarse a sus ojos. - Esta noche seré yo quien te jure obediencia. No importa lo que me pidas, lo haré. Renunciaría a todo… Mataría por tí… Moriría por tí… Solo tienes que pedirmelo.- Sus dientes atraparon suavemente el labio inferior de la contraria para envolverlo en un suave beso. Lentamente lo fue soltando, acariciándola con sus manos, retirando el pelo que caía por un lateral de su rostro y así tener mejor vista de sus ojos color violeta. Lentamente se separó de ella, tenían un combate que terminar, el contacto parece que calmó su cuerpo, ya no sentía esa imperiosa necesidad de poseerla.

Dejó varios metros de distancia caminando hacia atrás, con una traviesa sonrisa en su cara. Ahora la cosa iba a mejorar por mucho. Con pequeños saltos intercambiaba su peso de pie, alzando los puños a la altura de sus hombros. - ¿Preparada? - Se impulsó hacia delante, recortando toda la distancia entre los dos con su empuje, lanzándo un puñetazo directo a la cara de su contraria, seguido de un gancho con su izquierda en el estómago. Giró sobre sí mismo y elevó la pierna izquierda para asestar una patada giratoria. La sangre que fluía por sus venas ardía, una llamarada invadió todo su cuerpo. Se sentía vivo, una corriente eufórica recorría todo su cuerpo. - Así es como nos gusta pelear en Chaos, ¿verdad Lestrange?.-

DATOS DE BATALLA:

por **Auros** Dom Oct 09, 2016 3:52 pm

El miembro 'Atreyu' ha efectuado la acción siguiente: Dados de batalla

#1 'Dado Cósmico' :
Animals [Priv. Rosette Lestrange][+18] Baw6yAz

#1 Resultados : 41

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#2 'Dado Cósmico' :
Animals [Priv. Rosette Lestrange][+18] Baw6yAz

#2 Resultados : 51

por **Rosette Lestrange** Dom Oct 09, 2016 5:59 pm

-¿Qué es lo que quieres Rosette? ¿Ser más fuerte? ¿Poder? ¿Conocimiento?- Una sonrisa en sus labios dejó escapar una leve risilla.-¿Qué es lo que quiero?- Se repitió mentalmente buscando el rostro del dios oscuro. Le quería a él, nada más que a él… un sentimiento tan simple como poseer a la personas que amas. Dos voces dentro de ella, tres modo distintos de ver el mundo, tres mentalidades diferentes… y todas ella concordaban en la misma, amaban al ministro. Ellas dos eran parte de la locura de Rosette, y al mismo tiempo era la demostración de que amaba a Atreyu en todos los sentidos sin importar nada más. Se moría de ganas de confesarlo, gritar a los cuatro vientos que lo amaba. Respiró hondo cuando le vio recibir el ataque, le apenaba herirlo, en esos esos precisos momentos…

Y de pronto sin entender la razón, se acercó a ella con paso sereno sin intenciones de atacar, acortando la distancia entre los dos. Se quedó allí parada mirando al frente, cuando estaban lo suficientemente cerca comprobó de nuevo la diferencia de altura entre ellos dos. Ahora de pie la parecía el doble que recostado. Su rostro quedaba a la altura del pecho de él, su respiración chocaba contra su torso. El cuerpo entero reaccionó con agitación, dudando sobre si era una trampa u otra cosa, pero confiaba en él así que no dijo nada, siguió escuchando.-Oh… menos mal, gracias.- Una amplia sonrisa delataba su alegría al respecto.-Lucharemos como debemos, señor.- Creía proseguir el combate tras haber anulado la orden anterior, pero Rose se encontró con una otra sorpresa. Las manos de Atreyu ascendieron por su cuello dejando una agradable sensación cálida en el recorrido. Entrecerró los ojos cuando atrapó el mentón con sus dedos, obligando a la paladina elevar su rostro para encontrarse con el de él. Depositó un suave besos en sus labios temblorosos, dejándola con ganas de más. La llamó, y Rosette puso todo su atención en él. Las delicadas caricias entre sus rostros provocaba una extraña descarga eléctrica por su cuerpo, despertando emociones con cada roce. Ahora hablaba de ella y su juramento como paladina, el día en que prometió seguirle hasta la muerte o morir por él. Se dejó hacer alzando la mirada para encontrarse con ojos azules de su amado.

Esta noche seré yo quien te jure obediencia. No importa lo que me pidas, lo haré. Renunciaría a todo… Mataría por tí… Moriría por tí… Solo tienes que pedirmelo.- El cuerpo entero de Rose entró en una estado de euforia ¿Qué estaba diciendo? El ministro dispuesto a morir por su paladín, eso era imposible… ella era su protectora, su sombra... - Ahora lo comprendo…- Dijo sonriendo como una idiota.-Te lo hemos estado diciendo...-Pero no nos querías escuchar.-Lo supe todo el rato y no lo vi… sigo siendo una imbécil.- Rompió en carcajadas riéndose de su propia idiota, la poca vista que tuvo… todo el rato pensando que esas muestras de cariño, esos besos no eran nada más que un juego para él, una mujer más en su lista…

Con la mano colocó unos cuantos mechones de pelo que cayeron en el momento en que rompió a reír, poniendo estos tras la oreja. El albino amplió las distancias nuevamente para continuar el combate que dejaron a medias. Le vio prepararse, esta vez nada de jueguecitos, solos ellos dos y sus cuerpos golpeados.-Ahí viene.- Quizás debido a su naturaleza de demonio era capaz de ver los movimientos más rápido que antes. El hombre acortó la distancia rápidamente propinando un golpe en la cara de Rose, otro en el estómago y finalmente una patada giratoria para mandarle lejos. Reaccionando al ataque a tiempo atrapó la pierna alzada con ambas manos parando el último ataque.-Los soldados de chaos no somos unos cobardes.- Afirmó. Abrió sus majestuosas alas negra cubriendo la luz de la luna que les iluminaba en ese momento. Una sonrisa maliciosa apareció en los labios de la paladina, batiendo las alas seguidamente para alzar el vuelo con el ministro sujeto. En el proceso en que ascendía la transformación se iba completando, cambiando sus cabellos dorados por ese morado tan brillante y su piel un tanto más grisácea. Una vez en lo alto del cielo acercó el rostro al del albino quedando a pocos centímetros de sus labios.-Lo único que quiero es servirle, acompañarle, morir por usted.- Dejó de mover las alas provocando que los dos iniciaron el descenso en picado.- Porque le amo más que nada, y el pensar pasar un solo día sin usted es un puñetero sufrimiento.- A pocos metros de distancia entre el suelo y ellos, Rosette soltó al ministro lanzándolo contra el suelo, para seguir descendiendo y caer sobre él.-Adelante, hágame suplicar, llorar, sufrir… - Sonrió maliciosa, ahora si era un combate de verdad.

Datos:

por **Auros** Dom Oct 09, 2016 5:59 pm

El miembro 'Rosette Lestrange' ha efectuado la acción siguiente: Dados de batalla

#1 'Dado Cósmico' :
Animals [Priv. Rosette Lestrange][+18] Baw6yAz

#1 Resultados : 37

--------------------------------

#2 'Dado Cósmico' :
Animals [Priv. Rosette Lestrange][+18] Baw6yAz

#2 Resultados : 43

por **Atreyu** Dom Oct 09, 2016 7:08 pm

Su último golpe quedó frustrado, quedando su pierna atrapada por las manos de Rosette. Extendió sus majestuosas alas y se elevó en el cielo con él a rastras. A contraluz de la luna, deleitó su vista con la transformación de Lestrange que adoptó su completa forma de demonio y a voluntad. Desvió ligeramente la vista hacia abajo para comprobar que estaban lo suficientemente alto para que el golpe contra el suelo doliera. Al girar de nuevo la cabeza, se encontró con el rostro de su amada y una perversa sonrisa. Adoraba las muecas de Rosette, tan cínica y retorcida a veces. Durante una fracción de segundo quedaron suspendidos en el aire, mecidos por la agradable brisa nocturna de Chaos. Las alas de Rosette se plegaron, provocando su caída en picado hacia el suelo. Iba a parar de lleno el golpe con su espalda, la única manera de caer sin romperse nada cuando hiciera contacto era usar su capacidad de transformarse. Su piel lentamente fue cambiando de color, adquiriendo un tono rojizo, sus brazos se convirtieron en garras con las que sujetó fuertemente a la pladina por la cintura, su cuerpo aumentó su envergadura y una capa de escamas cubrió toda la piel, a su vez, la oscuridad, tan presente en el dios oscuro, envolvió las escamas con su opaca tonalidad. La mujer apartó sus manos y lo soltó en el aire, ayudando a la gravedad a cumplir con su objetivo. Tocar el suelo con esa apariencia resultó dolorosa, de no haberse transformado posiblemente se hubiera roto un par de huesos como poco.

El cuerpo de la contraria se precipitó sobre el suyo, quedando encima de él, recostada, vistiendo su nueva piel. Poco a poco recobró su apariencia mortal. - ¿Quieres que te muerda como la última vez? - El simple hecho de sentirla encima suyo provocó una oleada de calor incontenible en todo su ser. No pudo evitar sujetarla de las nalgas y apretarla contra su cuerpo, obligándola a tumbarse sobre el. Sus manos vagaban por la espalda de Rosette, tocando la zona donde nacían las hermosas alas negras. Siguió ascendiendo por la parte trasera de cuello, jugando con su pelo, recogiendolo para dejar completamente al descubierto toda la zona. Le encantaba tocarlo, tan esbelto y suave, una piel tan inmaculada. Sus labios crearon un camino de besos húmedos desde la clavícula hasta la mandíbula de Lestrange, percibía su excitación, algún que otro suspiro escapaba de los labios de la mujer.

Cerró los ojos, su nariz rozó el oído de la paladina, dejando un cálido suspiro. Se ayudó de sus brazos sobre la espalda de Rosette para poner fin a cualquier espacio. Sus cuerpos eran uno solo, su excitación hizo acto de presencia y posiblemente esta vez no pasaría desapercibida en la contraria. - Ahora tienes que saber diferente… déjame comprobarlo…- Inclinó delicadamente la cabeza de Lestrange, humedeció sus labios y los acercó a la refinada piel que lucía con su nueva apariencia, el nuevo olor era igual de embriagador, hacía que perdiera igualmente el control, separó sus labios y sus dientes entraron en contacto con la piel de la diablesa, hundiéndolos lentamente. Notaba como la carne se rompía por la presión que ejercía sobre ella, dejando paso a la sangre que salía de la reciente herida. Sin separarse de ella, succiono un poco, tragando el néctar de la vida de su querida Rosette. Su respiración era más pesada, y sus brazos apretaban con fuerza a la contraria, escapar no era una opción. Tras unos segundos de beber su sangre separó sus dientes, lamiendo la herida para provocar un poco de alivio en la paladina. -Dime Lestrange. ¿Qué puedo hacer para complacerte? - Relamio sus labios y miró de frente a mujer. Esta vez era él quien esperaba una orden.

DATOS DE LA BATALLA:

por Contenido patrocinado

Christa Hellemond AdministradoraMensaje privado	Astrid Dagmar AdministradoraMensaje privado
Adam Benjamin AdministradorMensaje privado	Kougyoku Ren AdministradorMensaje privado

Aldara Sashenka NarradoraMensaje privado	Katja Duhn NarradoraMensaje Privado
Atreyu NarradorMensaje Privado	Fingon Sindar NarradorMensaje Privado
Ithel Ibner NarradorMensaje Privado	Kvothe Arliden NarradorMensaje Privado
No disponible NarradorMensaje Privado	Hikari Hiroshi NarradorMensaje Privado

Fingon Sindar
Kuro Usagi	Orion Ärud	Aldara Sashenka	Quintus Dei (Libre)

Ichinose Takumi
Isela Adramelech	Baphomet (Libre)	Libre	Adam Benjamín

SISTEMA MUNDIAL DE SPIRIT SOUL
Categorías	Chaos	Spatium	Tempus	Revolucionarios & Anti gobierno
Territorio	225	240	110	80
Infraestructura	170	320	330	60
Vehiculos	150	150	195	250
Armamento	90	21	21	45
Soldados	80	70	70	110
Prestigio	80	50	120	120
Total:	1435	3747	1531	2085

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MEJORAS MUNDIALES DE SPIRIT SOUL
Categorías	Chaos	Spatium	Tempus	Revolucionarios & Anti gobierno
Vehiculos	Lvl 0	Lvl 0	Lvl 0	Lvl 0
Infraestructura	Lvl 1	Lvl 1	Lvl 1	Lvl 1
Armamento	Lvl 1	Lvl 1	Lvl 1	Lvl 1
Links Necesarios:	Info del sistema	Ramas de mejoras	Tierras dominadas	Contador de puntos

MEJORAS DE CHAOS
Tipo	Nivel	Mejora	Adquirida el día
Mejora de Armamento	1	Armadura reforzada. Los soldados cubren su espalda, hombros, y brazos con armaduras mágicas. (+17 puntos al dado de defensa de cada soldado)	26/5/2016
Mejora de Infraestructura	1	Geisers de lava.Tus murallas son cubiertas por geisers de magma que queman todo lo que se acerca. (+100 hp a cada muralla al defender de una invasión)	21/8/2016

MEJORAS DE SPATIUM
Tipo	Nivel	Mejora	Adquirida el día
Mejora de Armamento	1	Pólvora Delux. Las armas del reino sufren una mejora total. (+20 al dado de ataque de cada soldado)	26/5/2016
Mejora de Infraestructura	1	Se refuerzan las murallas del reino en edificios gubernamentales. (+100hp a todas las murallas al defender de una invasión )	24/8/2016

MEJORAS DE TEMPUS
Tipo	Nivel	Mejora	Adquirida el día
Mejora de Infraestructura	1	Campo tecnológicamente alterado. Un campo electro-magnético rodea tus murallas protegiéndolas del daño enemigo. (+150 hp a todas las murallas al defender una invasión)	26/5/2016
Mejora de Armamento	1	Cañón electromagnético. Los soldados son armados con tecnología de punta. (+15 al ataque de cada soldado)	21/8/2016

MEJORAS DE REVOS & ANTI-GOBIERNO
Tipo	Nivel	Mejora	Adquirida el día
Mejora de Armamento	1	Armas cortantes (Espadas): los forjadores y herreros abdicados a la revolución son considerados los mejores entre las regiones. (+20 al dado de ataque de cada soldado)	26/5/2016
Mejora de Infraestructura	1	Diavolik Force. La manipulación con éxito de materiales para crear tus murallas, hace que la protección que esta otorga aumente considerablemente. (+120 hp a todas las murallas al defender de una invasión)	21/8/2016


Disponible	Hikari Hiroshi	Jellal Slater