Re: Pensamientos Disparejos [Priv. Astrid Dagmar]

por **Kiss Shot** Jue Abr 07, 2016 10:23 pm

Astrid era una mujer llena de curiosidad, eso realmente le agradaba mucho, pues las preguntas le mantenían distraída y no hacían del viaje algo tedioso en primer lugar, al abrir su casco mantuvo aquella pequeña sonrisa, luego de esto respondió siéndole, por primera vez, bastante sincera. Realmente mi vida es muy solitaria, no tengo amigos o familia, y le dí la espalda al gobierno desde que escapé de aquel instituto, desde entonces soy una plaga para ellos, así que si, me conocen bastante bien por estos lugares. Dijo en aquel momento, cerró su casco y estando ahí nuevamente habló. Desde entonces no he tenido rumbo alguno.. Me he ganado tantas cosas juntas... que es dificil describir quien soy en realidad, la herramienta de unos.. el odio de otros.. hasta de mis amores.. Siempre fui un fracaso.

Comenzó a hacer ruido con su motocicleta y nuevamente arrancó, de forma suave para que Astrid se acomodara bien. Por eso... me da algo de curiosidad saber que se siente tener una familia.. cargar con orgullo un apellido.. el mio.. no vale nada ahora. bajó un poco la voz, fue allí cuando fue tomada por la cintura.. sensación curiosa, muy distinta a como si te sujetara un hombre, más delicadeza.. más cuidado, sin olor o respuesta agresiva por parte de quien le sujetaba... extraño, era la primera vez que una chica tocaba su cadera, y aunque no pareciese la gran cosa, un Sucubo ponía bastante atención a esos detalles. N-no hay problema.. B-bueno.. ¡Sujetate fuerte! Exclamó para dar inicio a su largo paseo, aceleró de golpe y como por arte de magia, el vehiculo se impulsó hacia delante en tan solo un segundo, de 40 Km/h pasaron a 90 Km/h en 5 minutos.

La motocicleta hacía gran ruido, y se escuchaba aún más fuerte con el eco que producía el lugar tan cerrado, no se veía demasiado en frente, tan solo oscuridad que parecía no tener fin, Hikari se mantenía bastante firme sobre el manubrio, obviamente no podía desconcentrarse o el golpe que sufrirían sería fatal por la velocidad, Pero claro, tenía que cuidar de Astrid también, puede que ella no esté acostumbrada a tal velocidad. ¿Cómo estás ahí atrás Astrid? Exclamó desde donde estaba, así si que se tardarían menos en llegar, almenos hasta la costa.

por **Astrid Dagmar** Jue Abr 07, 2016 11:36 pm

A Astrid le dio la impresión de que se encontraba junto a una muchacha insegura y con una autoestima por los suelos, debido a los sucesos que habían ocurrido a lo largo de su vida, en concreto relacionados con aquél instituto. Claro que no sabía nada de ella, pero por la poca información que iba adquiriendo con lo que ella contaba, iba haciéndose una pequeña idea. – Tú eres Kuroi. – Y así, Astrid llegó a la conclusión más obvia de todo este post de rol. – Sé quien te apetezca ser. La cuestión está en mantenerse fiel a los principios que sigue uno mismo. – Era gracioso que ella hablase precisamente de eso. – Eso no significa que no te equivoques en pensar de una manera u otra. Creo que la vida nos pone a prueba con este tipo de cosas, ¿no crees? – Se encogió de hombros. – Si huyes de tus principios, si te escapas de rectificar tus errores, si no tienes un objetivo, si te rindes… Ahí podríamos empezar a hablar de un fracaso. – Quizás no debió decir exactamente eso. – Pero yo te veo con un propósito claro a seguir.

Frunció el ceño al seguir escuchando lo que decía Kuroi. ¿Tanto le habían hecho menospreciarse en aquel manicomio que ahora lo hacía de manera inconsciente? ¿O había algo más que le hiciera comportarse de ese modo y pensar así sobre sí misma? – Tu apellido, sea cual sea, valdrá lo que tú quieras que valga. –[/b] Sintió una repentina curiosidad por saber cuál era, pero prefirió preguntárselo más adelante. Quizás ni siquiera tenía intención de revelárselo. – Es posible que algún día haya alguien orgulloso del que portas. Quizás seas tú misma, de hecho. – Trató de evitar hablar sobre la sensación de tener una familia, puesto que no se sentía cómoda con ciertos recuerdos propios. Si bien algunos le hacían enternecerse y volverse nostálgica, la opinión que tenía sobre ella misma con respecto a su familia no era muy positiva.

A la chica pareció no molestarle el contacto. Notó su leve tartamudeo, pero no le dio importancia. Y… ¿a qué se refería con que se sujetara más fuerte?

En un abrir y cerrar de ojos, habían tomado un impulso tan enorme que Astrid, sin darse cuenta, había agarrado aún más fuerte a su compañera, justo después de cerrar súbitamente los ojos. Para cuando notó que quizás se estaba pasando, aflojó un poco la presión. – Siento si te he hecho daño. A veces no controlo mi fuerza, – murmuró entre dientes, aún sin abrir los párpados y con las mandíbulas apretadas. No tenía una fuerza sobrehumana, ni mucho menos, a no ser que usase la transformación de su mano izquierda (cosa que no pensaba hacer). Pero sí que sabía que podía llegar a lastimarle si no tenía cuidado. – Y… no te preocupes. Voy bien. – Iría bien mientras no abriese los ojos. No estaba acostumbrada a viajar a tanta velocidad.

por **Kiss Shot** Vie Abr 08, 2016 12:22 pm

Sus palabras realmente eran muy dulces, no podía negar eso, pero si supiera lo sucia que estaba su alma y todo el peso muerto que cargaba en su espalda, probablemente le repudiaría como cualquier otra persona con sentido común.. eso era más que obvio, todos lo hacían y fue ella misma quien se ganó la fama de ser una criminal antes de unirse a un bando en concreto.. pero, bueno.. ese secreto podía guardárselo, ella no tenía porque enterarse y a donde iban, nadie hablaba sobre nadie, Chaos tenía esa norma, sin topos, o terminarás empalado en la plaza pública.He cometido tantos errores que no hay vuelta atrás... supongo, la redención no es valida para los demonios.. Dijo la chica mientras conducía, por suerte el camino era muy liso a pesar de las vigas del tren, era fácil conducir y no se escuchaba nada aparte del ruido de la moto, ni la lluvia, ni otros vehículos.. si que era un camino largo, Mills era muy extensa y el tren vía cubría casi toda la ciudad.

Tienes razón.. tengo un propósito.. te aseguró que tendrá éxito.. lo prometo. Habló en un tono demasiado bajo de voz.. pero lo había prometido, cumpliría con ese propósito cueste lo que cueste.. aunque la pelinegra no supiera exactamente lo que iría a hacer. Su apellido era historia Aparte.. solo 4 personas lo portaban ya que era una familia pura realmente nueva, un árbol genealógico totalmente nuevo, y que en sus tiempos, aquel apellido tenía gran fama por parte del gobierno y los mismos bandidos.. pero actualmente, un simple conjunto de letras que nadie reconoce, sin peso, sin orgullo y sin honor.. ese era el apellido que ahora una única persona portaba. Supongo.. que me sentiría más feliz si alguien más estuviera orgulloso de portar mi apellido.. Ja..

Aceleró avisándole primero, realmente logró sobresaltar a la Pelinegro, pues le agarró con bastante fuerza después de acelerar.. le causó un poco de gracia, soltó una pequeña risa, pues estaba bien aferrada, no le incomodaba, almenos así tampoco sentía tanto frío y gracia a la velocidad a la que iban pronto la ropa inclusive comenzaba a repeler el agua, vio de reojo a la chica, sus ojos bien cerrados y su cabeza evitando ver algo.. como una niña. No te preocupes, el vértigo es normal cuando no estás acostumbrada, cuando salgamos de aquí bajaré un poco la velocidad si sigue lloviendo, ¿Vale? Tu solo sostente bien Y.. hablando de eso.. el exterior a lo lejos... comenzó a notarse.. y ella, le pidió un favor. Necesito que abras los ojos un momento, ya casi salimos de aquí, ¿Tienes buena puntería?.. Saca de mi bolsillo un par de monedas y arrojaselas al sujeto que vez al frente, ¡Así no tendremos que deternos!

por **Astrid Dagmar** Vie Abr 08, 2016 7:50 pm

– Nunca hay vuelta atrás, lo hagas mal o bien – sentenció Astrid tras oír lo que había dicho Kuroi. – Pero lo que cuenta es lo que hagas a partir de esos errores. – Al fin y al cabo, de no ser por diversas situaciones que le llevaron a arrepentirse, ella no sería quien es ahora. Por otro lado, su compañera no parecía estar muy convencida del éxito que podría tener el plan que tenía en mente, según pudo apreciar por su tono de voz, a pesar de que sus palabras indicaban todo lo contrario. Era natural tener miedo al fracaso, y la morena tampoco podía estar completamente segura de que todo saliese bien. Al menos podría intentar darle más confianza a ella. – Verás que sí. Todo saldrá adelante si es lo que quieres.

No podía prometerle que le ayudaría incondicionalmente. Al fin y al cabo, apenas se conocían, y puede que su propósito no fuese únicamente rescatar a sus compañeros de aquel instituto de Chaos. Como todo el mundo, quizás tendría más de un objetivo en la vida, y con total seguridad Astrid pensaba que ambas tendrían que andar por caminos separados tarde o temprano. Después de todo, ella ahora trabajaba según Indivisa Manent, y sabía que en algún momento tendría que estar a cargo de alguna misión que podría estar o no en Chaos.

Tampoco entendía muy bien por qué le daba tanta importancia a estar orgulloso de un apellido. Muchos nobles y algún que otro tradicionalista (como su padre) hacían mucho hincapié en el honor de un apellido… ¿pero realmente era tan importante proteger la imagen que pudieran dar una pocas letras? Entendía que quizás esas letras sin importancia eran una manera de representar a una familia, una serie de personas a las que supuestamente debías enorgullecer. Y sin embargo, ella prefería considerar familiares a sus más allegados, a su propio núcleo. Si había más Dagmars por ahí sueltos… ¿debía sentirse orgullosa de ellos? – Para animarte, podría decirte que si nos sale bien el plan que tenemos en Chaos, me sentiría orgullosa de tu apellido. Pero, si te das cuenta, es bastante absurdo. Si tuviese que enorgullecerme de alguien, sería de ti, en todo caso. – Quizás exageraba. Y también dependía de cómo hicieran las cosas. Pero le bastaría con conseguir que la muchacha estuviese orgullosa de sí misma tarde o temprano.

Quien no lo estaba en absoluto en ese preciso instante era Astrid, que sentía como si le hubiesen dado una patada en la espinilla tras darse cuenta de que Kuroi fue consciente del temor absurdo de la morena. – No creo que sea vértigo… simplemente… – Se interrumpió a sí misma, pensando mejor lo que iba a decir. Qué más daba ya, había visto que por poco se hacía sus cosas en los pantalones. – …De acuerdo. Te agradezco que vayas más lento después. – Aunque fuesen a toda pastilla, al menos tendría una mejor sensación.

Sin quererlo emitió un pequeño gruñido al oír la petición de Kuroi. Tampoco es que pudiera hacer mucho. Al abrir los ojos, clavó la vista en su compañera, mientras rebuscaba en su bolsillo derecho un par de monedas. Lo peor sería cuando tuviese que localizar al tipo que estaba en frente, puesto que tendría que mirar alrededor. Por suerte, no tardó en dar con él. Mientras se acercaban a toda velocidad, Astrid se agarró con un poco de más fuerza a la pelirrosa con la mano izquierda, tomó un pequeño impulso con el brazo derecho echándolo un poco hacia atrás y finalmente lanzó el dinero al hombre que ahí les esperaba. Pensó que quizás fallaría, teniendo en cuenta la rapidez a la que iban y que no calculaba muy bien las distancias, pero tuvo algo de suerte. Después de eso, volvió a la posición anterior. – Bueno, tampoco fue tan complicado.

por **Kiss Shot** Vie Abr 08, 2016 9:14 pm

Grandes palabras de las cuales se arrepentiría en un futuro.. ¿Quién estaría orgullosa de una asesina de sangre fría?... realmente era dulce con sus frases... guardó silencio al escuchar atentamente a sus comentarios y luego negó un par de veces con la cabeza.Astrid, no digas esas cosas.. yo.. realmente no soy una buena persona dejó salir un poco más de sinceridad.. ¿qué estaba haciendo? estaba soltándole realmente muchísima información, más de la que debería... pero a decir verdad.. se sentía mal consigo misma cuando alguien como la pelinegro tenía una idea equivocada y se atrevía a decir tales palabras. Nadie estará orgullosa de mi, Ni tu.. ni mi familia, ni siquiera yo misma lo estoy.. las voces de mi cabeza me recuerdan a diario lo mala persona que soy.

Luego de esto ella sacó un par de monedas de su bolsillo y las lanzó satisfactoriamente, el hombre (que también parecía un vagabundo) les dejó pasar abriendo la puerta que se encontraba a unos 20 metros que recorrieron en un par de segundos, listo.. Ahora estaban en las praderas de Spatium.. fuera de las ciudades principales, rumbo hacia Chaos.. y un bonito paisaje estaba ahí afuera, no había lluvia.. por el contrario, el cielo estaba iluminado por las estrellas.. y tenía ciertas tonalidades rojizas, verdes y azules creadas por la maravilla de vía estelar que tenía Spirit Soul.. una luna llena brillante a lo lejos.. y en el suelo.. praderas que se perdían a la vista de cualquiera.. verdes.. con arboles hasta donde llegaban la vista.. un lugar hermoso, que probablemente, la pelinegro se estaba perdiendo Mira hacia arriba Astrid. Dijo mientras poco a poco disminuía la velocidad para evitar el vertigo de la mujer.. tal vez ya había transcurrido dos horas desde que partieron del hotel.

Dime... ¿Te sientes mejor?.. ya iban a una velocidad común, unos 60 km/h mientras avanzaban tranquilamente por la pradera.. con ese aire nocturno tan fresco y limpio.. solitario pero bello. Es algo tarde.. dime, ¿Quieres descansar un poco?.. se que no estás acostumbrada, un poco de aire fresco estaría bien para ti. mencionó la pelirrosada mientras se mantenía expectante, era decisión de su compañera si detenerse o no.

por **Astrid Dagmar** Sáb Abr 09, 2016 11:45 am

Astrid se quedó en silencio después de oír lo que decía Kuroi. Realmente aquél lugar le seguía torturando a pesar de que había logrado escapar de ahí, seguía en su psique y había conseguido introducirse en su propia personalidad. Quizás no fuese la persona más santa del mundo, puesto que la morena no creía en que alguien fuese completamente bondadoso, pero opinaba que la muchacha estaba exagerando debido a las emociones negativas que sentía hacia sí misma. Exhaló un pequeño suspiro que denotaba que estaba en desacuerdo con sus palabras, aunque en un principio había querido disimular su sensación de discrepancia. – Lo que acabe opinando yo sobre ti será cosa mía, – pensó en voz alta. Lo dijo en un hilo de voz, sin darse cuenta que aquellas palabras habían escapado de su mente y, a la vez, como si no quisiera que su compañera le escuchase.

Kuroi le dijo que mirase hacia arriba. No tenía muchas ganas, pero al notar que la velocidad iba disminuyendo, se alivió un poco, redujo la fuerza de su agarre y accedió a ver lo que sea que estuviese en el techo… o en el cielo, en ese caso. No era la primera vez que tenía el placer de ver los cielos estrellados de Spatium, pero tampoco se cansaba de verlos. Casi sin darse cuenta, consiguió relajarse algo más, aflojando sus manos, pero sin dejar de mantenerse firmes en los costados de la chica. Tal vez el hecho de que ahora iban más lento también había ayudado a ello.

Dejó de embelesarse con el cielo nocturno tras escuchar una pregunta de su compañera. – Sí, estoy mejor… Gracias, –le contestó, tras apartar la vista de las estrellas. No veía por qué tenían que detenerse, a no ser que fuese Kuroi la que quisiese hacerlo. Ella, por su lado, no se sentía con apenas sueño y creía que podía aguantar un poco más. – Si tú quieres descansar, adelante. Yo estoy bien. – Además, primero tendrían que asegurarse de ver algún lugar más refugiado donde parar, como algún árbol lo suficientemente grande como para cubrirles un poco en el caso de que lloviera otra vez.

Al menos a esas alturas habían recorrido mucha más distancia que la que habría hecho ella por su cuenta. Sintió una pequeña punzada en el estómago, pero por suerte éste no hizo ningún ruido. Quizás más adelante trataría de hacer malabarismos para agarrar algún snack ligero de la mochila. O mejor no, porque igual acababa haciendo algún mal movimiento y acabarían las dos en el suelo. Y aunque quería disimular su apetito, su estómago volvió a hacer de las suyas, pero esta vez emitiendo un buen rugido. – … – Resopló molesta, llevándose una mano al abdomen. – Puedo aguantar un poco más, pero éste amigo parece estar empezando a quejarse bastante. – Y ahí fue otro gruñido estomacal. – …Si no te importa, sí me gustaría que parásemos un poco. –

por **Kiss Shot** Lun Abr 11, 2016 6:54 pm

Al parecer su cara realmente ocultaba muy bien su verdadera identidad.. pero a quien le importaba, ella era mala.. y ni siquiera por una razón por la cual valiera la pena hablar, además, solo se unió a los revolucionarios para tener apoyo de alguno de los dos bandos.. sin embargo, desde que entró realmente empezó a ver muchas cosas que tenían sentido.. el cambio.. la lucha, todo comenzaba a tener un significado tan claro que poco a poco su forma de pensar se estaba volviendo más recta.. memos vengativa.. ¿Acaso estaba ganando moral?... Inclusive ya no detestaba tanto la compañía ajena... aunque siempre haya sido una herramienta para propositos externos.. borrar legados, separar bandos.. destruir identidades.. terminar con el amor, siempre resultaba metida en medio de problemas.Pero almenos de vez en cuando era libre de decidir.. su corazón y su cabeza trabajaban en pocas ocasiones.. como en este caso.... No respondió ante su comentario.. y el silencio se hizo presente.

Decidió mirar hacia arriba nuevamente... El cielo realmente era hermoso.. su casco de color negro brillaba en contra de aquella escena tan particular al igual que su motocicleta... Astrid no quería descansar... así que aceleró un poco más para continuar.. los prados a los que atravesaban poco a poco se transformaban en bosques con arboles más grandes mientras que la vía improvisada era creada por un camino de rocas indicando el carril.. pronto aquel cielo escarchado era cubierto por las hojas de los arboles.. y la oscuridad era un poco más notoria. Yo puedo continuar, aunque tengo un poco de sueño... remarcó la mujer mientras avanzaban por el nuevo lugar.

Entonces escuchó aquel sonido caracteristico que emitían los humanos... giró levemente su cabeza para ver a su acompañante.. se notaba.. ¿Avergonzada quizas? Entonces resopló... no pudo evitar reir cuando la vio, realmente le causó mucha gracia. Está bien, descansaremos aquí. Poco apoco fue disminuyendo la velocidad.. hasta terminar en la sombra de un Enorme arbol cuyos frutos caían de vez en cuando de las ramas. Estacionó su moto y colocó el pedal correctamente, sacó la llave y simplemente se bajó primero. Muy bien... partiremos cuando tu termines de comer, ¿Vale? entonces se acercó al arbol.. ella no necesitaba comer, así que simplemente esperaría sentada en contra del tronco.

Permaneció sentada observando a su acompañante.. pero.. sus ojos se cerraban poco a poco con pesadez mientras le veía.. estaba.. agotada.. un poco.. solo descansó una hora después de todo.. bostezó por lo bajo.. sin quitarle la vista de encima. Tu.. tardate.. lo que quieras.. Dijo mientras que cerraba sus ojos, necesitaba descansar. Su cola dejó de moverse.. estaba descubierta ante el cesped y el viento.. cualquier cosa podría lastimarla, descuido personal.

por **Astrid Dagmar** Mar Abr 12, 2016 11:39 pm

Pronto, se adentraron por un sendero que cruzaba un frondoso bosque. Las copas de los árboles tapaban parte de la vista del cielo nocturno, pero este estaba tan plagado de estrellas, que aun viéndose menos seguía siendo un paisaje hermoso y digno de admirar. La joven súcubo se quedó callada, así que supuso que no había oído lo que había dicho, por suerte. No mantuvieron conversación alguna hasta poco después, cuando ya decidieron descansar de una vez.

Astrid se bajó de la motocicleta después de que Kuroi la aparcara debajo de un enorme árbol. La morena se preguntó, sin pronunciar palabra alguna, si sería posible hacer una hoguera allí mismo sin que tuvieran problemas. Estaban en pleno campo, así que dedujo que no pasaría nada mientras no fuesen irresponsables. —Si tienes sueño, Kuroi, es preferible que nos vayamos cuando hayas descansado. Yo tendré que dormir también en algún momento.—Normalmente se le empezaban a caer los párpados en cuanto se sentía un poco llena y estaba cansada, así que sabía que tampoco tardaría mucho en caer.

—Voy a buscar hojas secas y algunas ramas para hacer una hoguera. Así, si bajan las temperaturas, no tendremos tanto frío. No tardaré.—Se dio cuenta de que la muchacha se había quedado dormida en seguida. Con la tensión que había vivido hacía unas horas, era normal que su cuerpo estuviese deseando reposar pronto. Vio que la cola estaba completamente desprotegida, y, temerosa de que ésta pudiese sensibilizarse demasiado por alguna bajada de temperatura, decidió quitarse el abrigo – puesto que seguía sin tener mucho frío y sabía que entraría en calor tras hacer el fuego – y cubrirla con éste. Lo había hecho con suma delicadeza, puesto que no sabía exactamente qué tipo de presión era la necesaria para que sintiese algo de daño, o incluso para llegar a despertarle.

En silencio, trató de buscar por la zona cualquier cosa que pudiera servirle para hacer el fuego. Apenas se alejaba del árbol donde habían aparcado, puesto que sabía que se perdería fácilmente. Además, tampoco quería dejar sola a Kuroi. Tardó más de lo que pensaba, pero por fin consiguió reunir los materiales suficientes, así que volvió a aquel gran árbol y se dispuso a crear la hoguera rápidamente. No era muy paciente con este tipo de cosas, pero ya estaba acostumbrada.

Cuando las primeras ramas empezaron a chisporrotear y se originó una pequeña llama, Astrid se alejó un poco para alcanzar la bolsa con las provisiones y así ponerse a comer cualquier tentempié rápidamente. Por las noches se saciaba rápido, así que no tardó más de diez minutos. Y, tal y como sabía que ocurriría, cayó en los brazos de Morfeo en un abrir y cerrar de ojos.

Se despertó al notar un golpe en la coronilla. Sin abrir los ojos se llevó una mano ahí, frotándola. —…Pero qué…—murmuró, con la voz ronca debido al sueño. Abrió uno de los párpados y vio un fruto del árbol justo a su lado, así que supuso que debía ser eso. Apenas había amanecido y por suerte la hoguera no se había descontrolado, pero pensó que había sido una irresponsabilidad por su parte dejarla sin vigilancia. Miró de reojo a Kuroi, que seguía dormida, y decidió esperar a que se despertara mientras probaba la fruta que acababa de caer. Tampoco tenía tan mala pinta.

por **Kiss Shot** Miér Abr 13, 2016 7:57 pm

Almenos no moriría de frío esa noche, afortunadamente Astrid era una mujer atenta con las personas, pues no solo hizo una fogata mientras la pelirrosa dormía, si no que se tomó la molestia de quitarse el abrigo para darselo a su sensible cola.. ella apenas y suspiró un poco mientras involuntariamente se movio, realmente era de cuidado, pero estaría segura durante la noche. Durmió muy a gusto, de cierta manera cuando se tiene la mentalidad de estar con alguien las pesadillas no suelen frecuentar en su cabeza y este fue uno de esos casos, logró librarse del sueño y descansar con tranquilidad, no llovió, no hubo frío y nada interrumpió la noche durante lo que restaba de la misma. Realmente estaba muy agotada, se notó pues quedó profundamente bajo aquel árbol enorme.. era bastante linda al dormir a decir verdad, no hacía ruidos extraños y un rostro de mujer inocente con un leve rubor en sus mejillas se notaba, además de eso solo su respiración tranquila hacía que se moviera su pecho.

Despertó un poco tarde, más o menos a las 8:00 AM.. cuando abrió los ojos vio una fogata ya extinta, un par de manzanas en el suelo, su cola tapada con un abrigo y por supuesto, a Astrid comiendo un par de bocaditos que tenían en la mochila, sin embargo ella también comenzaba a sentir un poco de hambre... aunque no dijo nada, bostezó tapándose la boca con su mano derecha y sacó la cola del abrigo femenino, luego se frotó el ojo derecho. con su mano Buen Día... Astrid. Se levantó poco a poco, se sentía mucho mejor ahora que había dormido, por suerte no necesitaba un baño, pues se había dado uno recientemente. ¡Vaya noche! ¿Estás lista para irnos? Pronto tomaremos un Barco hacia Chaos.. ¡En una ruta especial! llegaremos a la bahía putrefacta de la nación, desde ahí iremos nuevamente en mi motocicleta hasta el instituto.

Realmente no tenía mucha prisa, pero le gustaba andar en su moto, y esta vez el día, aunque frio, era claro y soleado, iría a tope, pero no le diría nada, estaba ansiosa por irse, así que sin perder mucho tiempo se subió en la moto y la encendió de nuevo mientras se ponía su casco, después de un par de minutos se subió, esperando a su compañera. ¿Estás Lista? Esta vez tendrás que sujetarte aún más fuerte, el camino no tiene vías.. Lo cierto es que quería que le sujetara con fuerza, ¡No podía evitarlo! Así era ella, era una linda excusa también para aumentar también la velocidad.

por **Astrid Dagmar** Jue Abr 14, 2016 12:22 am

Astrid estaba segura de que había tenido que dormir en alguna mala postura, porque notaba una pequeña molestia (que creyó ser de origen muscular) en la zona lumbar de la espalda. Pero no sería nada que no pudiera aguantar. Tras terminar de comer la fruta que había caído del árbol, se puso a hacer una serie de estiramientos que creía que le vendrían bien para aliviar el dolor, que aunque era suave, era un verdadero estorbo. Sin embargo, no pudo hacer mucho. Volvió a mirar a Kuroi otra vez. No quería despertarla, puesto que seguro que estaba aún más cansada que ella. Parecía mentira que fuese una súcubo: su apariencia emanaba una inocencia impropia de ese tipo de demonios, a los cuales siempre se había imaginado con un aspecto más… adulto, por llamarlo de algún modo. Claro que, a esas alturas de la vida, había aprendido que las apariencias podrían engañar. Y su compañera parecía ser el perfecto ejemplo en ese caso.

Aprovechó que tenía la mochila cerca para sacar un pequeño paquete de galletas y ponerse a comer otra vez. Aún seguía con hambre, y sabía que iban a tener un día largo por delante, por lo que tenía que alimentarse bien. Le preocupaba Kuroi – para ese entonces ya había entendido por qué rechazaba la comida que Astrid le había ofrecido, pero sabía que tendría que alimentarse de algún modo. ¿Cada cuánto tenía que comer? Por no decir que no entendía exactamente qué era lo que comía. Podría sonar a un pensamiento sumamente inocente teniendo en cuenta el evidente contexto de su alimentación, pero le costaba trabajo imaginarse energías vitales de los demás seres como algo sólido y… comestible. A decir verdad, le costaba entender a los demonios en sí.

Oyó un bostezo y giró la cabeza hacia Kuroi, que se estaba desperezando. —Buenos días, Kuroi. ¿Qué tal dormiste?—le preguntó, ofreciéndole instintivamente el paquete de galletas, como si se hubiese olvidado de todo su torrente de pensamientos anterior. La muchacha parecía llena de energía, o eso pudo notar al ver lo parlanchina que se comportaba. —…¿A qué ruta especial te refieres?— preguntó, extrañada y curiosa a la vez. Conocía bastante bien Spatium, pero se había dado cuenta de que aún tenía mucho que explorar de esas tierras.

Antes de poder hacer nada más, la chica ya se había subido a la moto. Astrid no pudo evitar soltar una carcajada al ver las prisas que parecía tener. —¡Eh, tranquila! Chaos no se va a mover de donde está. Deja que al menos recoja la cosas,—bromeó, mientras guardaba el abrigo en la mochila. No tenía mucho frío y pensó que quizás no le haría falta hasta más adelante, por lo que quizás tenerlo puesto no sería más que un estorbo, por el momento. Después de eso se subió justo detrás de Kuroi, acomodándose en el asiento de la motocicleta y colocándose el casco.

Temía sentir más náuseas al ir a toda velocidad por un terreno que no fuese muy liso. De todas maneras, se fiaba de Kuroi, así que, aún a regañadientes, accedió a lo que decía. —Tendrás que compensarme entonces. La próxima comida la pagas tú.— Lo dijo en un tono despreocupado, para que se diera cuenta de que no hablaba en serio. Extendió el brazo derecho otra vez. —¿Necesitarás enrollar la cola?— Quizás ahora que hacía mejor tiempo aquello sería innecesario, pero no iba a morirse por tener un poco de cortesía. Con la mano libre, agarró firmemente la cadera de su compañera, preparándose por si arrancaba de golpe.

por **Kiss Shot** Vie Abr 15, 2016 8:16 pm

Realmente el camino no era la gran cosa, un par de bares en medio del bosque a donde se conseguía miel de maple, un poco de cerveza y pocos trabajadores, sin embargo no había tiempo para derrochar su dinero de esa forma.. y tampoco podía ir a comer con Astrid con ella, pero era cierto que jamás había pasado tanto tiempo sin comer.. ¿Tres días quiza?.. su estomago le dolía un poco, y no se sentía en sus 5 sentidos tampoco, pero lo disimulaba bastante bien, tampoco es que no lo pudiera soportar, su cola estaba de lado junto a una de las piernas de Astrid, supuso que allí no molestaría para nada, espero a que ella se subiera y se sujetara bien, luego escuchó su comentario.. le causó nuevamente una pequeña risa. Oh.. no, ahora que lo pienso es mejor continuar de largo hasta la costa, allí tomaremos un barco.. uno en donde pueda entrar mi motocicleta también.

Antes de arrancar nuevamente acomodó sus espejos, se abrochó el casco y esperó a que Astrid se acomodara bien, pero justo cuando le sujetaron de la cintura.. su estomago hizo un ruido muy particular... ¡Vaya! Al parecer no solo los humanos hacían ese sonido, fue bastante audible, Hikari solo dejó salir un suspiro, luego una risa y le respondió a la pelinegra. Cuando llegemos A Chaos te invitaré al mejor bar, lo prometo. La motocicleta resonó con fuerza. No, de hecho me incomoda un poco, ahora que no hace frio puedo dejarla libre.. espero que no te incomode ahí. Quitó el pedal y arrancó de golpe, y como un rayo comenzó a atravesar el bosque en una gran linea recta, lo bueno es que no habían arboles de por medio, pues era un camino hecho con el tiempo. El viento resonaba mientras que ellas se mantenían a una gran velocidad, esta vez iba mucho más rápido, casi a 120 Kilometros por hora, realmente muy veloz, pero ella era muy buen conductora y por como iba, se notaba que estaba más que acostumbrada.

No dijo nada durante el viaje, duró casi dos horas en la que no disminuyó en lo más minimo la velocidad.. pero era claro que estaban llegando a su destino, rápidamente comenzó a bajar de ritmo.. a uno en donde Astrid pudiera almenos abrir los ojos, la sentía bien sujeta, como un gato a una bola de estambre, algo normal, supuso.. pero el sonido de las gaviotas el al agua chocando contra la costa... estaban muy cerca... pero debían buscar una embarcación que les llevara sin que les pidieran algún tipo de identificación.. conocía a la persona indicada. Desvió por la zona pesquera hasta llegar con un sujeto muy joven, un pescador local con el cual se conocían, tenía un bote camaronero y este, al escuchar la moto saludó a lo lejos a la chica pelirrosada. Vamos hacia Chaos, cerca a Nihil, vengo a cobrarte el favor... Esperó una respuesta. Suban, estábamos por partir.

Tal vez no era la gran cosa, ni el barco más lujoso del planeta, pero un par de horas llegarían a las costas de Chaos, Hikari Dejó su motocicleta junto con los cascos en un pequeño angar a donde guardaban varias cosas para la pesca, junto con Astrid terminaron en un barco que iba dirigido hacia su destino.. poco a poco, estaban bastante cerca. Se que no es la gran cosa... pero llegaremos muy rápido.. cuando lleguemos a tierra firme, descansaremos en un lugar genial que conozco... ¿Qué te parece?, Suelo ir sola ya que no tengo muchos amigos.

por **Astrid Dagmar** Vie Abr 15, 2016 11:13 pm

Astrid no sabía exactamente cuánto tardarían en llegar al puerto. ¿Toda la mañana? ¿Quizás al final del día? ¿O tendrían que para otra noche más en pleno campo? Confiaba en la orientación de Kuroi, así que no respondió nada cuando propuso cambiar de ruta. Ella respondió negativamente a la pregunta de la morena sobre si necesitaría guardar la cola, así que bajó el brazo y rodeó la cintura de su compañera con éste. Nada más realizar este gesto, escuchó un ruido que venía de la joven. Enarcó una ceja, riéndose un poco, pero extrañada a la vez. —¿Me lo dices a mí o a tu estómago?— Le dio un par de palmadas suaves en la espalda, antes de volver a colocar la mano sobre su cintura. —Eso te pasa por no querer comer. ¿Estás segura de que no quieres nada ahora? Si no aguantas durante el trayecto, detente y paramos para comer un poco.

Menos mal que se agarró fuertemente a la chica. De lo contrario, probablemente se habría llevado un buen susto al arrancar tan rápidamente, y se habrían caído las dos. O ella sola, quizás. Casi sin darse cuenta, aumentó la presión que ejercía sobre la cintura de Kuroi, pero sin llegar a hacer la fuerza suficiente como para hacerle daño. Maldecía en voz muy baja, manteniendo los ojos cerrados. Pensó que incluso era posible que fuesen a más velocidad que el día anterior, y eso no le resultaba nada agradable.

Ambas mujeres se quedaron en silencio durante la travesía. Astrid, por su parte, estaba bastante acobardada, por no decir que ser consciente de ello hería su orgullo. Tras un par de horas, sin embargo, notó cómo su compañera reducía la velocidad de la motocicleta, por lo que la morena relajó sus brazos y abrió poco a poco los ojos. Ya parecían estar en una zona de pesca, así que se sintió más aliviada. Eso quería decir que pronto bajarían de esa maldita máquina de dos ruedas.

No se fijó apenas en el joven que les atendió, ni tampoco en lo que conversaba con Kuroi. Tras acompañarla a dejar el vehículo y los cascos en un angar, la joven le propuso parar en un lugar que conocía, a lo que Astrid afirmó con la cabeza. —Claro. No me viene mal una guía turística por Chaos.—No tenía nada en contra de los barcos, pero le alegraba saber que llegarían tan pronto. —Debo confesar que el viaje se me ha hecho mucho más corto de lo que esperaba.— Desvió la vista, haciendo una pequeña mueca. —Pero tampoco es que haya viajado muchas veces en motocicleta, así que tampoco sé calcular distancias con esos vehículos.— Se descolgó la mochila del hombro y se la entregó a su compañera. —¡Y come algo, maldita sea! Toma lo que quieras de ahí. No acepto un no por respuesta.

Quizás eso no aliviaría el hambre de la súcubo, pero poco más podía ofrecerle. Y no quería esperar a llegar a algún restaurante en Chaos. Aunque, por suerte para ambas, el viaje en barco sería sumamente tranquilo y llegarían incluso antes de lo esperado.

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Christa Hellemond AdministradoraMensaje privado	Astrid Dagmar AdministradoraMensaje privado
Adam Benjamin AdministradorMensaje privado	Kougyoku Ren AdministradorMensaje privado

Aldara Sashenka NarradoraMensaje privado	Katja Duhn NarradoraMensaje Privado
Atreyu NarradorMensaje Privado	Fingon Sindar NarradorMensaje Privado
Ithel Ibner NarradorMensaje Privado	Kvothe Arliden NarradorMensaje Privado
No disponible NarradorMensaje Privado	Hikari Hiroshi NarradorMensaje Privado

Fingon Sindar
Kuro Usagi	Orion Ärud	Aldara Sashenka	Quintus Dei (Libre)

Ichinose Takumi
Isela Adramelech	Baphomet (Libre)	Libre	Adam Benjamín

SISTEMA MUNDIAL DE SPIRIT SOUL
Categorías	Chaos	Spatium	Tempus	Revolucionarios & Anti gobierno
Territorio	225	240	110	80
Infraestructura	170	320	330	60
Vehiculos	150	150	195	250
Armamento	90	21	21	45
Soldados	80	70	70	110
Prestigio	80	50	120	120
Total:	1435	3747	1531	2085

MEJORAS MUNDIALES DE SPIRIT SOUL
Categorías	Chaos	Spatium	Tempus	Revolucionarios & Anti gobierno
Vehiculos	Lvl 0	Lvl 0	Lvl 0	Lvl 0
Infraestructura	Lvl 1	Lvl 1	Lvl 1	Lvl 1
Armamento	Lvl 1	Lvl 1	Lvl 1	Lvl 1
Links Necesarios:	Info del sistema	Ramas de mejoras	Tierras dominadas	Contador de puntos

MEJORAS DE CHAOS
Tipo	Nivel	Mejora	Adquirida el día
Mejora de Armamento	1	Armadura reforzada. Los soldados cubren su espalda, hombros, y brazos con armaduras mágicas. (+17 puntos al dado de defensa de cada soldado)	26/5/2016
Mejora de Infraestructura	1	Geisers de lava.Tus murallas son cubiertas por geisers de magma que queman todo lo que se acerca. (+100 hp a cada muralla al defender de una invasión)	21/8/2016

MEJORAS DE SPATIUM
Tipo	Nivel	Mejora	Adquirida el día
Mejora de Armamento	1	Pólvora Delux. Las armas del reino sufren una mejora total. (+20 al dado de ataque de cada soldado)	26/5/2016
Mejora de Infraestructura	1	Se refuerzan las murallas del reino en edificios gubernamentales. (+100hp a todas las murallas al defender de una invasión )	24/8/2016

MEJORAS DE TEMPUS
Tipo	Nivel	Mejora	Adquirida el día
Mejora de Infraestructura	1	Campo tecnológicamente alterado. Un campo electro-magnético rodea tus murallas protegiéndolas del daño enemigo. (+150 hp a todas las murallas al defender una invasión)	26/5/2016
Mejora de Armamento	1	Cañón electromagnético. Los soldados son armados con tecnología de punta. (+15 al ataque de cada soldado)	21/8/2016

MEJORAS DE REVOS & ANTI-GOBIERNO
Tipo	Nivel	Mejora	Adquirida el día
Mejora de Armamento	1	Armas cortantes (Espadas): los forjadores y herreros abdicados a la revolución son considerados los mejores entre las regiones. (+20 al dado de ataque de cada soldado)	26/5/2016
Mejora de Infraestructura	1	Diavolik Force. La manipulación con éxito de materiales para crear tus murallas, hace que la protección que esta otorga aumente considerablemente. (+120 hp a todas las murallas al defender de una invasión)	21/8/2016


Disponible	Hikari Hiroshi	Jellal Slater