Re: Exploración y conquista [Trama - Capitulo N°4]

por **Gissel Gremory** Sáb Feb 28, 2015 1:29 pm

Los quejidos de aquella criatura lograban mover fuertes sentimientos dentro del corazón de la valkiria aunque esta pareciese no demostrar absolutamente nada. Sentía por ese entonces el peso que conllevaba pertenecer al ejército, era simple idea de saber que a fin de cuentas era una subordinada del ministro de guerra y que debía acatar sus órdenes al pie de la letra aunque doliese o su lado indómito pidiera a gritos ser liberado. Observó con lastima a su oponente a quien consideraba digno por proteger tanto la isla como a los suyos, sin embargo, negó suavemente como si le indicase de algún modo que no se pusiera de pie, que no volviese a arremeter contra ella porque no tendría más opción que fulminarlo. Inconscientemente retrocedió un poco a medida que iba escuchando los gritos de niños pequeños o incluso el llanto de algunas mujeres residentes de tal paradisiaca tierra que era azotada por los miembros del gobierno, incluyendola.

Desvió la mirada y era imposible que no recordara en parte su vida en el orfanato con aquellas personas que quería, o con la tribu de guerreros. Podía jurar que sentía el miedo ajeno, la desesperación o incluso las suplicas internas de los que no comprendían porque estaba ocurriendo tal masacre contra sus tierras, su amada isla. El corazón de la chica latía con increíble fuerza aunque no hubiese hecho un gran esfuerzo físico, era porque consideraba miles de opciones en ese instante, estaba entre la filosa pendiente de seguir las ordenes o tirar todo por la borda. Fue entonces cuando respiró profundamente a medida que iba recordando otro tipo de misiones o vivencias y que internamente adoraba los contrincantes que pudieran resultar un reto para su persona, ya que a fin de cuentas por simple razonamiento…era una valkiria, su lugar siempre estaría en el campo de batalla.

Rápidamente avanzo hacia la criatura de piel roja y herida, deteniéndose después de manera abrupta cuando estuvo a menos de dos metros de ella para rodearse de corrientes de aire, impidiéndole que impactase contra su cuerpo y por ende volviendo a rempujarla con más fuerza todavía hacia atrás. Por esta acción, sus largos cabellos carmesí se sacudieron con furia hacia un costado, otorgándole una impronta todavía más severa o digna de la que ya podía poseer.

Con esa misma destreza que tanto la caracterizaba formó una estrella de fuego que parecía doblarla en tamaño tanto en ancho como altura antes de que la dejara escapar de manera brusca contra esa peculiar criatura de la isla. Finalmente dio unos pasos más hacia adelante, observándole sin ninguna aparente emoción en su cristalino mirar, pudiendo notarse incluso tal frialdad como si el mismo hielo recorriera la sangre de la mujer quien trataba en lo posible de matar todo tipo de emociones, volverse alguien completamente racional como solo en su trabajo podía serlo. Seguido de esto, anillos de fuego comenzaban a rodear tanto sus muñecas, tobillos y otras partes de su cuerpo en lo que adoptaba una posición completamente defensiva, pero dispuesta a cometer fuertes ataques ofensivos. Su mano derecha se mantenía extendida tan solo un poco, terminando en un delicado movimiento de sus dedos dio la señal de que volviera a acercarse, si es que podía resistir las llamas con las que había sido repelido.
-Obedecer para vivir- Murmuró para ella misma en clara mención a tener que dejar de lado todo tipo de sentimentalismos, ahogarlos o retorcerlos entre su llameante personalidad hasta convertirse en ese campo de batalla en la guerrera que sabía que era, la que muy pocos conocían, en concisas palabras…una mujer que respira por y para batallar.

stat:

por **Auros** Sáb Feb 28, 2015 1:29 pm

El miembro 'Akasha Gissel Gremory' ha efectuado la acción siguiente: Dados de batalla

'Tirada Divina' : 16, 23

por Invitado Sáb Feb 28, 2015 2:07 pm

El desembarco fue un problema... Hasta la mas mínima altura me hacía temblar las piernas. Tal fue, que de no ser por empujones varios, no hubiera saltado; y eso que era nada el salto. Curioso fue el cambio, pues mi licantropía se encontraba a la altura con el rabo entre las piernas.

Una vez que llegué, y vi a mis compañeros combatir, me quedé pasmado. Unos no dudaban, sin tutela, convicción ¿Que clase de convicción? ¿Por qué ahora tanta duda?

El revolucionario, se quedaba pasmado y con sus ojos abiertos ante el arremeter de sus compañeros. Las miradas eran distintas antes de comenzar el conflicto. Pero, sus formidables enemigos, no se quedaban atras. En su haber, la magnificencia de la valentía en su máximo esplendor, la voluntad guerrera independiente de cualquier causa o búsqueda, y aún así se atormentaba en saber si eso era lo realmente bueno, o lo terriblemente maquiavélico.

Éste, que clavó su espada en el suelo, se quedó sujetando el mango y divisando como todo el mundo iba encontrándose con sus contrarios. Una gran disparidad de poderes y habilidades, una entremezcla que daba miedo, todo lo imaginable podía existir... por desgracia, sólo, para la guerra. Sus enemigos tampoco se quedaban atrás, rudos, primitivos, rústicos, tercos... pero sobretodo brutos, con un contacto natural que avispó algo más fuerte en el interior de su corazón. Escuchó la palabra tirano entre los recobecos de los alaridos, de los gritos y la guerra, y eso le sugirió un lema que él mismo adoptó como propio; SIC SEMPER TYRANNIS.

Y cuando, entre todo, iba a sacar una respuesta, un intenso dolor atravesó su espalda.

— ¡Argh! —quéjose, cayéndose con sus rodillas y apoyándose aún en el mango de la espada.

Y ahí, en el dolor, perdió la respuesta. Unas ganas ansiosas por responder al golpe le dominaron, una respiración mucho más abrupta y un intenso aguante por no sacar sus colmillos ni forzar mucho su mirada; como suelen hacer los canes cuando se enfadan o rabian.

Esa sensación, lo dominó.

Y sin más, intentó levantarse sin ni tan siquiera planear nada y girarse bruscamente, como un animal, con la espada de su mano sacándola bastamente del suelo.

STATUS:

por **Auros** Sáb Feb 28, 2015 2:07 pm

El miembro 'Marzalek' ha efectuado la acción siguiente: Dados de batalla

'Tirada Rango 2' : 4

por **Alister Winterfang** Sáb Feb 28, 2015 3:29 pm

Quería matarlo, no habia una explicación lógica ni razonable para ello, mucho menos emocional, simplemente sentía deseos de acabar con una vida, sabría que debería tratar de forzar su rendición, por ahora mi acciones estaban bajo las genocidas ordenes del lord, la verdad es que poco me importaba lo que ellos querían, si no eres lo suficientemente fuerte como para evitar ser arrastrado es mejor que no hagas ruido y aceptes tu papel fielmente hasta que llegue el momento en el que puedas actuar, es muy simple pero parecía como que nadie se daba cuenta de ello, mire los pozos de fulgor que mi enemigo tenia por ojos y la verdad es que hubiera tenido alguna pizca de sentimientos me estaría riendo ya que en sus ojos se podía vislumbrar un brillo de esperanza, seguramente fue por que me golpeo, lo que me hizo reflexionar sobre lo fácil que es para que una persona se llene de unas esperanzas que son completamente inútiles, lo que cometí fue un error el cual y me asegurare de no volver a cometerlo, le cortaría los brazos, pero vayamos por partes, primero le quitaría sus esperanzas, me movía con la suficiente velocidad como para tener la apariencia de una sombra, pase por al lado de una piedra que jamas podria alcanzarme, pero pare de moverme cuando llegue a su espalda, estaba tirado en el piso pero no por mucho tiempo, lo tome de el cuello y lo levante para que finalmente con una patada con mi imponente fuerza levantado un poco mas en el aire, unos cuantos metros y yo la verdad no iba a dejar que todo terminara ahí use mi fuerza para saltar y quedar a su misma altura, luego de unos cuantos golpes que seguramente rompieron unas cuantas costillas empece a sentir como la gravedad no reclamaba por lo que con la idea de darle una golpe con mi talón lo levante y empece a concentrar mi fuerza en el hasta que finalmente golpee su espalda con mi talón, seguramente agrietando parte de los huesos de la columna vertebral y mandándolo hacia abajo, la verdad es que cabía la posibilidad de haberlo dejado paralitico, la verdad es que no me molestaba la idea ya que si estaba en ese estado no podria pelear y yo me quedaría feliz y contento.

-Vamos, levántate si es que puedes, la fiesta apenas comenzó-dije en un tono muerto y unos ojos igualmente varios, a este hombre no le quedaba mucho de vida, no habia que ser un experto para darse cuenta.

Stat:

por **Auros** Sáb Feb 28, 2015 3:29 pm

El miembro 'Alister Winterfang' ha efectuado la acción siguiente: Dados de batalla

'Tirada Rango 3' : 11, 20

por **Auros** Sáb Feb 28, 2015 7:18 pm

Catoblepas no se lo esperaba, si golpe iba directo al cuello de la pelirroja, pero algo lo detuvo en medio de su trayecto. Unas corrientes de aire, que la bestia no alcanza a comprender de donde provenían ni porque habían tomado repentinamente tanta fuerza, le impedido dar con su objetivo.
Cuando aquellos vientos impactaron en la bestia, esta comenzó a ser llevada con las corrientes de aire como si se tratara de una simple hoja, giró un par de veces en el aire y finalmente cayó al suelo. Esas corrientes estaban repeliéndole, esta bestia cerró los ojos tratando de aguantar el dolor, ya que esta vez no había soltado lamento o gemido. Como era de esperarse, esta se puso de pie pocos momentos después de que su cuerpo impacto contra la arena de la playa resintiéndose de todas sus heridas.

Era una bestia, un animal, en su mente solo cabía la idea de proteger la isla, y con ello acabar con las amenazas presentes. Afirmaba sus músculos para no caer, mientras veía generarse en su contraria aquel fuego, el brillo de este se vio reflejado en los oscuros orbes de la criatura, pero sin mostrar una muestra de flagelación. Con su mirada decidida se preparó para recibir ese ataque, sabiendo que le era imposible evitar algo de esa magnitud con el estado de su cuerpo.

Aquellas llamas envolvieron el cuerpo de la criatura, esta no pudo evitar soltar unos gritos, lamentos, y gemidos, debido al dolor que le causaba este fuego quemando su piel. Se le pudo ver sacudirse, rodando por el suelo, intentado apagarlas llamas que aún quedaban sobre su cuerpo, mientras seguía con aquellos lamentos. Finalmente, cuando las llamas se extinguieron, la criatura pudo, con gran dificultad, volver a ponerse de pie, para clavar su mirada vacía sobre los ojos fríos y helados de la pelirroja. Catoblepas, apenas podía sentir un leve temor por esa mirada, él era un depredador, no solía encontrarse en la posición de desventaja todos los días, lo que posiblemente seria la razón por la que no reaccionara como tal.

Gruñó por unos momentos sin quitarle la vista de encima a la amenaza. Volvió a su posición de ataque, inclinando su cuerpo hacia el frente, apoyando suavemente las patas delanteras sobre la arena. Sin pensarlo demasiado, la criatura volvió a correr en dirección a la pelirroja, ahora en un zigzag, aún no había descubierto que las corrientes de aire que le habían detenido la vez pasado eran obra de su enemiga, pero buscaba con aquello ser más difícil de evitar y menos predecible para lograr causar daño en su oponente.

Catoblepas (Bestia de la isla):

Catoblepas (Bestia de la isla) Stats:

por **Auros** Sáb Feb 28, 2015 7:18 pm

El miembro 'NPC' ha efectuado la acción siguiente: Dados de batalla

#1 'Tirada Rango 2' : 11

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#2 'Tirada Rango 2' : 2

por Invitado Sáb Feb 28, 2015 7:38 pm

La isleña lancera frente a mí no parecía que iba a contestar, a pesar de eso no le quitaba de encima la mirada decidida solo con mi ojo derecho, pues el izquierdo iba tapado con aquel parche negro. No podía evitarlo, pero mis pensamientos no eran firmes, no era correcto matar a la isleña y por eso la pregunta hacia su persona, si hubiera estado totalmente convencido de las órdenes del Lord no hubiera abierto la boca y tan solo me hubiera dedicado a eliminar las amenazas. Dentro de mi mente, ese momento era crucial, y todo parecía detenerse, o ir más lento, parecía que la respuesta de la lancera nunca llegaría. La batalla se estaba dando fuera de mi pequeño mundo, podía oír los disparos y claramente las órdenes de la Yokko, ni ella ni sus soldados la iban a tener fácil y por dentro ya me había decidido a brindarle apoyo en cuanto tuviera la respuesta de esta isleña. Para mi sorpresa, esta apenas pareció darle importancia a mis palabras, de su mano comenzó a aparecer una lanza, no consideraba que los isleños contaran con magia o habilidades especiales incluso. Apreté mis dientes mientras intentaba dar un paso y retroceder buscando distancia entre mi cuerpo y el de la lancera. Mi reacción seria claramente lenta, ella ya se había decidido incluso por un punto a donde apuntar el cual pude reconocer al prestar suma atención a cada movimiento en el cuerpo de la pelinegra escasa de ropas. Fruncí el ceño, y en un movimiento arriesgado intenté mover mi cabeza inclinándola hacia un costado, con suerte conseguiría evitar que el impacto sea mortal.

Mi precisión fue perfecta, evite aquella lanza y la energía que le cubría por unos delicados centímetros. Sentí la ráfaga de aire siendo cortada tan cerca de mi rostro que sentía la sensación de ser cortado aún que no estaba seguro. Ahora, en menos de un segundo, mi mente se había aclarado. La isleña no buscaba un trato con nosotros, al igual que las órdenes del Lord, las que ella tenía eran de aniquilarme sin compasión. Era una guerrera, estaba ahí porque ser el camino que había elegido, rechazo dos veces la oportunidad de evitar esta pelea, ella no quería salvarse. Casi por un reflejo chasqueé mis dedos, una pequeña explosión se generó directo al pecho de la isleña, permitiéndome tomar la distancia que necesitaba.

Mi mirada ahora estaba nuevamente calma, no había dudas en mi mente, estaba haciendo lo correcto, si les dejáramos vivos sin dudas buscarían un ataque a nuestros reinos y Tempus correría peligro. Hubo una sonrisa en mi rostro, estaba feliz de estar en el camino y bando correcto sentí una calma llenarme. Esa calma fue interrumpida, cuando la realidad me devolvió al campo de batalla, gritos de dolor, sonidos de disparos, explosiones y demás. Fruncí el ceño y me paré firme borrando completamente la sonrisa en mi rostro. Preparé mi mano para otra explosión más sin quitar la mirada decidida de mi enemiga, no quería gastar palabras, esta batalla debía terminar lo más pronto posible, derramando la menor cantidad de sangre. No dudé y chasqueé mis dedos, esta precisa explosión fue directo al brazo con el que la lancera sostenía sus lanzas, supuse que lograba arrancarle ese brazo mínimamente tomaría una ventaja en la batalla. Le oí gritar ante el producto de la explosión, pero no titubee, me mantuve firme en mi lugar.

Una voz conocida me voltear, se trataba de otro teniente de fragata, Jin Minamimoto, estando este a mi lado le dedique una mirada seria dejando de fruncir el ceño. Le recordaba bien, concia su corazón bondadoso que en situaciones como estas se podía ver débil, por lo que no dude en darle la confianza que seguro necesitaba. –¡Teniente de fragata minamimoto! Debemos acabar con los Isleños en el menor tiempo, cada uno de ellos es una amenaza, para mí, para ti, y para cada uno de los marinos y soldados en esta isla.- Antes mis propias palabras caí en cuenta, y desvié mi mira comenzando a buscar con ella a Yokko, había perdido su posición en la lucha y necesitaba saber su condición para no estar preocupado. No la encontré y no podía distraerme mucho, apreté los dientes y volví la mirada al humo de la explosión donde debería de estar la isleña preparando su próximo ataque. – Esta isleña parece ser una lancera, genera lanzas con su propia energía como una clase de magia, curiosamente me hace recordar un viejo enfrentamiento con un revolucionario, pero el punto es que no es débil, mantengamos la guardia arriba Teniente, en cuanto acabamos con ella buscaremos a los soldados en apuros y les ayudaremos mientras seguimos avanzado.- Dije firme, a modo de orden aún que con una total soltura en mis palabra debido a la confianza generada con el Teniente. No quitaba la mirada decidida y preparada, atento a cada punto y cambio en el lugar no solo por mi enemiga, si intentando deducir la posición de Yokko por la cual comenzaba a preocuparme.

stats:

por **Auros** Sáb Feb 28, 2015 7:38 pm

El miembro 'Roy Mustang' ha efectuado la acción siguiente: Dados de batalla

#1 'Tirada Suprema' : 23

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#2 'Tirada Suprema' : 14

por **Auros** Sáb Feb 28, 2015 10:16 pm

Aún si les ofrecían piedad y tratos, no podían aceptar porque de igual manera, terminarían matando a familiares y conocidos. Nerta sabía que rindiéndose no conseguiría nada, matarían igual a su hija, a su marido y a todos sus amigos. No tenía sentido irse a Spirit Soul con su vida destrozada, así que era mucho mejor morir luchando que ver morir a los demás huyendo como un cobarde. Podían haber intentado negociar sin armas de por medio, sin amenazar, sin llevar un ejército de cientos de personas que tenían la exclusiva orden de matar. Ya era demasiado tarde.

Los espinos de Nerta habían dañado un poco a la mujer pelirroja, que susurró algo que no pudo escuchar con claridad, no comprendió nada, demasiado bajo. Había visto sus labios moverse pero no los había interpretado. Aquella mujer le arrojó unas bolitas pequeñas que apenas pudo ver, demasiado diminutas como para saber como bloquear eso. Bloqueó solo tres de ellas mediante sus raíces, pero el resto, las otras doce chocaron terriblemente sobre el cuerpo de la mujer espíritu del bosque. Esta se quejó, desde luego, pero no fue suficiente. Nerta volvió a atacar de la misma manera a la otra chica: Los espinos eran difíciles de esquivar porque uno no sabía dónde saldrían, pero también eran fáciles de romper.

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A pesar de todos sus esfuerzos por herir a su enemigo, Astrid no lo conseguía, no veía que él se resintiera. Usaba sus mejores ataques, con toda la fuerza que poseía, pero definitivamente él era demasiado poderoso. Sabía reconocer cuando la derrota era imposible de evitar, pero no podía echarse atrás tampoco. La explosión extraña del Almirante, le dio justo cuando volvía a arrojar otra de sus lanzas, por lo que simplemente no pudo atacar y se arrodilló unos momentos. El dolor era insufrible. Un grito detrás de ella hizo que se diera la vuelta: Era una niña de pelo negro y casi sin ropa, la hija de Astrid. Sin importarle si él volvía a atacar, se centró en decirle a la niña, que estaba asustada y buscaba un abrazo de su madre, que debía marcharse muy lejos en la jungla. Justo después, volvió la vista hacia el Almirante, sin hacer nada.

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En otro lugar, más alejados de estas dos cazadoras, se encontraba un gran guerrero, musculoso y agresivo, dispuesto a darlo todo por su aldea y su tribu. Khrull provenía de un linaje de cazadores de bestias gigantes, sobretodo las marinas. Era casi un marinero, pero él no sabía manejar un barco, solo luchar en el mismo para derrumbar serpientes marinas, leviatanes y otros monstruos con ayuda de sus compañeros. Portaba un casco de hierro con dos enormes cuernos y una piel de de oso albino también con pinchos, atada al cuerpo mediante fuertes cadenas. No estaba muy cubierto, pero gracias a esto, se podía ver que estaba muy dotado y era un hombre fornido por y para la batalla. En la mano derecha llevaba una gran maza, con la que podía desgarrar y aplastar casi cualquier cosa.

En este caso el objetivo fue una joven mujer con el pelo rosáceo. Le daba igual si era una mujer o un hombre, en la batalla no había distinción de sexo: Tú me atacas, yo te ataco. No puedes aprovecharte de ser mujer para que no te golpeen, no contra él. Ni siquiera tiene tiempo de darse cuenta cuando ya le ha hecho algunas heridas, lo que provoca que el "Gran Oso", como le apodan cariñosamente los demás, se enfurezca y suelte un rugido más animal que humano. Digno de la bestia que él era. Khrull, maza en mano, corrió con un estruendo en sus pisotones, directo a la chica que le lanzaba dagas. Blandió su arma y las dagas fueron desviadas como si nada, para luego intentar impactar sobre la cabeza ajena. La bola de la maza de por si era bastante más grande que la cabeza de la joven.

Stats Astrid:

Stats Nerta:

Stats Khrull:

Astrid:

Khrull:

Nerta:

por **Auros** Sáb Feb 28, 2015 10:16 pm

El miembro 'NPC' ha efectuado la acción siguiente: Dados de batalla

#1 'Tirada Rango 1' : 6

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#2 'Tirada Rango 1' : 8

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#3 'Tirada Rango 1' : 1

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#4 'Tirada Rango 1' : 8

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#5 'Tirada Rango 1' : 7

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#6 'Tirada Rango 1' : 10

por **Auros** Dom Mar 01, 2015 3:30 am

Exploración y conquista [Trama - Capitulo N°4] - Página 5 Ht23Swb

Nala (isleño 6 vs Marzalek)
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Maten a los intrusos, esas eran las palabras absolutas. Nala era como muchas de las mujeres que estaban en el campo de batalla, una fiera guerrera, a comparación de muchos de los presentes, ella era la excepción, ella no peleaba por proteger un padre, una madre, hijos o hermanos. Nala peleaba por que eso era lo que mejor hacia, pelear.
El amor jamas llego a ella, los dioses no le brindaron fortuna en esa área. Crecio sola desde que su padre murió victima de la fiebre.

Aprendio a cazar y siempre fue callada y reservada. Rara vez sonreía, para ella no había nada mas en esa isla para proteger, ni una sola persona importante. Vivia porque sus leyes le impedían el morir por su propia mano, y no tenia quien le matase…lo único que le quedaba era el honor.
Con el paso del tiempo se volvió cazadora, a la corta edad de 10 años mato su primer liebre, pero en lugar de quedarse con ella, la ofrecio a la aldea, ella podía comer setas y frutos secos que aprendio a preparar gracias a su padre. Además de que siempre podía encontrar insectos que asados al fuego, si bien no tenían el mejor sabor, daban suficientes nutrientes para que no pasara hambre. Ese solo acto le hizo ganarse el nombre de “rocio de la selva” y siempre que cazaba, dejaba sus presas en la aldea. Ella vivía en el bosque, sin familia ni amigos, pero aun asi siempre alimentaba a la aldea, sus presas eran para quienes carecían de hombre que cazara o de quien estuviese enfermo para alimentarse.

Nadie la llamo a luchar, pero ella se ofrecio sola. Y por primera vez en muchos años, los ancianos escucharon su voz, dulce, melodiosa, era la caricia de los dioses hablando a sus oídos. De toda la isla Nala tenia la voz mas dulce y hermosa y entonaba canticos que transpasaban la frondosa flora del lugar y daban tranquilidad a los isleños. Ella había sido dotada con la voz de las sirenas…pero si la usaba adecuadamente podía volverse tan mortal como el grito de una banshee.

El dia llego y Nala corrió entre todos, no se paro a preguntar si venían en paz, su dulce voz hubiese bastado para calmar la furia de todos, pero no, su voz estaba llena de ira y no seria usada para deleitar a los enemigos…seria usada para matarlos.
En cuanto piso la playa se avalanzo sobre un joven de cabellos de extraño color. Atacar a matar, no importaba mas, No hay ser mas peligroso que aquel que lo ha perdido todo. Su vida no valia y si dándola en el campo de batalla aseguraría la seguridad de quien si tenia familia entonces asi seria. Aquel ataque de espada había sido solo un saludo, su forma de decir hola a quienes se atrevían a pisar en son de guerra su hogar.

La reacción del aquel ser, que al ver a la cara no estaba segura si era hombre o mujer, hasta que miro su pecho plano y varonil, la desconserto, era mas animal que hombre, por lo que al tratar de defender en lugar del escudo puso la espada, la cual en el choque de las mismas se hizo hacia atrás y ella retrocedio, un corte en alguna parte había pasado, sentía algo de ardor y su sangre tibia recorrerle el hombro, pero no verificaría, no era grave, lo sabia por la sensación y el leve dolor que sentia. Sin mas ella ataco embistiendo con su escudo para en ese momento su cuerpo brillara con un resplandor verde y una enrredadera se posara en su cuerpo, marcas negras como tatuajes adornaran su piel. La Bendicion de los dioses le acompañaba, si moria, iria a donde ellos, a formar parte del todo, si no, dedicaría su victoria a los dioses que la vendecian.

Status:

por **Auros** Dom Mar 01, 2015 3:30 am

El miembro 'NPC' ha efectuado la acción siguiente: Dados de batalla

#1 'Tirada Rango 1' : 5

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#2 'Tirada Rango 1' : 3

por **Yokko Ichihara** Dom Mar 01, 2015 3:55 am

La explosión dejo un rastro de humo que el viento esparcio lentamente. Ella empezó a correr para evitar mas ataques sorpresas.
Yokko era experimentada en el campo de batalla y era algo que nadie nunca podría discutirle. Su cabeza estaba llena de pensamientos sobre su amigo en prisión, sobre su hermana, a quien agradecia que no enviaran a esta misión, y sobre el almirante que le preocupaba demasiado como para solo concentrarse en ella. A eso se le sumaban las decenas de hombres a su cargo directo.

Puso su mano en el comunicador presionando para dar ordenes.
– Brigada delta despliegese! Avancen con cautela! Brigada alfa, disparen los cañones! Brigada Kappa! Listos para recibir heridos! Brigada zigma creen barrera de contension de hielo para los tiradores! Brigada omega fuego a discreción! Brigada Alfa ustedes se encargan de las defensas mágicas y las curaciones al escuadron y por ultimo Mi fiel escuadron suicida a hacer su trabajo cabrones! – El escuadron suicida…la escoria de sus hombres, hombres sedientos de sangre y ganas de asesinar, sin miedo de morir, porque no tenían nada que perder…hombres ofrecidos por su propia volundad como carne de cañon, la primera fila en movimiento, seres despreciables y asesinos frios y sin escrupulos, que si bien eran la escoria de su escuadron, eran el orgullo de todo este pues sus malditas manias asesinas les salvaban el tracero a quienes no querían mancharse las manos. La teniente sabia dividir a sus hombres por puntos fuertes y estos puntos fuertes cubrían los puntos débiles de otros, que a su vez con sus puntos fuertes cubrían las de otros y asi sucesivamente.
— Escuadron de salvamento suicida, hombre caído hombre curado entendieron?! Prioridad nuestros hombres entendieron?! A quien abandone a un compañero yo misma me encargare de su castigo. — Este escuadron eran solo 10 de los 60 hombres que conformaban en total el escuadron suicida. Arcanistas, magos y hechiceros que con sus artes se dedicaban a matar y curar a sus compañeros, eran los únicos curanderos dentro del campo de batalla sangriendo que estos hombres desencadenaban.

Yokko seguía moviéndose rápidamente, tumbando con eficacia hombres, no se detendría. Saco su cuchillo de su bota. Usando eficaces cortes a la garganta de sus rivales isleños y una perfecta danza mortal llamada CQC entre un contrincante y otro. Debido a los cortes en sus gargantas no pudo evitar mancharse el rostro y las manos de sangre. No era la primer sangre que derramaba…pero si la primera que era inocente de toda culpa y de la cual su único crimen era ser libres y tener sus propias costumbres. Aun asi, ella los estaba asesinando uno por uno y sus hombres no se quedaban atrás, gritos de dolor, hombres que corrian envueltos en fuego, quemándose vivos, enemigos que ella veia mas como victimas, caian uno tras otro mientras ella seguía en su lucha contra aquella pelirroja.

Quedo a un lado del almiranto Mustang degollando enemigos, matando a sangre fría, Para seguir en su danza de muerte entre enemigos mientras unas lagrimas limpiaban su camino de aquellas marcas sangrientas. Si, lloraba, porque cada muerte que causaba le dolia mas que a nadie en ese ejercito, sus labios se movian a cada corte de cuello diciendo "lo siento" sin voz alguna.
De repente se giro por instinto, y aquellos espinos salieron a su espalda, atacándola, clavandosele en la piel desgarrándole la chaqueta y las medias y dejando su sangre cubrir su propia sombra. Haciendola caer de rodillas por el mismo impacto de las espinas sintiendo su piel arder.
Ahogo su grito en su garganta cerrando los ojos fuertemente. Extendio la mano y de ella emano un poder demoniaco que podría causarle escalofríos a cualquiera que no la conociera. Y entonces, las sombras de muchos de los isleños se separaron de sus dueños, tomando forma tangible y tomando a sus dueños los interpusieron entre el resto del ataque de la peliroja y ella, recibiendo aquellos espinos y callendo, algunos gravemente heridos, otros muertos… Yokko solo la miro mientras se sacaba los jirones de su chaqueta. Aseguro su tesoro, aquella fotografía y se piso de pie.

—Veamos que tan bien peleas contigo misma….— La sombra de Nerta se separo de ella y tomo forma física como las otras. Yokko esperaría para recuperarse un poco mientras la sombra de la hechicera se encargaba de atacarla con una ráfaga de espinas. Las sombras que controlaba gracias a su técnica master of puppets eran fieles copias que sus dueños, por lo que tenían sus mismas habilidades y esto yokko lo utilizaría para recuperar el aliento.

Mientras eso pasaba, su escuadron se encargaba de hacer una verdadera carniceria con sus rivales, hasta el momento no habia bajas...pero sabia que perder a mas de uno de sus hombres era una probabilidad en toda guerra.

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SISTEMA MUNDIAL DE SPIRIT SOUL
Categorías	Chaos	Spatium	Tempus	Revolucionarios & Anti gobierno
Territorio	225	240	110	80
Infraestructura	170	320	330	60
Vehiculos	150	150	195	250
Armamento	90	21	21	45
Soldados	80	70	70	110
Prestigio	80	50	120	120
Total:	1435	3747	1531	2085

MEJORAS MUNDIALES DE SPIRIT SOUL
Categorías	Chaos	Spatium	Tempus	Revolucionarios & Anti gobierno
Vehiculos	Lvl 0	Lvl 0	Lvl 0	Lvl 0
Infraestructura	Lvl 1	Lvl 1	Lvl 1	Lvl 1
Armamento	Lvl 1	Lvl 1	Lvl 1	Lvl 1
Links Necesarios:	Info del sistema	Ramas de mejoras	Tierras dominadas	Contador de puntos

MEJORAS DE CHAOS
Tipo	Nivel	Mejora	Adquirida el día
Mejora de Armamento	1	Armadura reforzada. Los soldados cubren su espalda, hombros, y brazos con armaduras mágicas. (+17 puntos al dado de defensa de cada soldado)	26/5/2016
Mejora de Infraestructura	1	Geisers de lava.Tus murallas son cubiertas por geisers de magma que queman todo lo que se acerca. (+100 hp a cada muralla al defender de una invasión)	21/8/2016

MEJORAS DE SPATIUM
Tipo	Nivel	Mejora	Adquirida el día
Mejora de Armamento	1	Pólvora Delux. Las armas del reino sufren una mejora total. (+20 al dado de ataque de cada soldado)	26/5/2016
Mejora de Infraestructura	1	Se refuerzan las murallas del reino en edificios gubernamentales. (+100hp a todas las murallas al defender de una invasión )	24/8/2016

MEJORAS DE TEMPUS
Tipo	Nivel	Mejora	Adquirida el día
Mejora de Infraestructura	1	Campo tecnológicamente alterado. Un campo electro-magnético rodea tus murallas protegiéndolas del daño enemigo. (+150 hp a todas las murallas al defender una invasión)	26/5/2016
Mejora de Armamento	1	Cañón electromagnético. Los soldados son armados con tecnología de punta. (+15 al ataque de cada soldado)	21/8/2016

MEJORAS DE REVOS & ANTI-GOBIERNO
Tipo	Nivel	Mejora	Adquirida el día
Mejora de Armamento	1	Armas cortantes (Espadas): los forjadores y herreros abdicados a la revolución son considerados los mejores entre las regiones. (+20 al dado de ataque de cada soldado)	26/5/2016
Mejora de Infraestructura	1	Diavolik Force. La manipulación con éxito de materiales para crear tus murallas, hace que la protección que esta otorga aumente considerablemente. (+120 hp a todas las murallas al defender de una invasión)	21/8/2016


Disponible	Hikari Hiroshi	Jellal Slater