Re: • Décima Trama de Spirit Soul • Highway To Hell

por Invitado Mar Sep 06, 2016 5:44 pm

Permanecía lo suficientemente absorta en las conversaciones que dio un pequeño sobresalto cuando sintió al cazarecompensas tan cerca, a quien le sonrió ligeramente para terminar desviando la mirada hacia el frente. —En efecto, pensé que la oportunidad podía ser propicia, pero creo que se me irá de las manos— Admitió al reconocer que jamás había estado en un sitio similar y como tal, la titanide desconocía. Esa no era su realidad. —Parece que tú también optas por estos lados, cuervo, cuidado, no te vayan a sacar las plumas de un zape— Susurró en broma, arqueando una ceja en lo que no dejaba de caminar a un paso lento pero tranquilo…Cabía que de tanto en tanto observase hacia atrás, su propia naturaleza desconfiada hacia que recayera de modo continuo en esa acción, ¿Quién mierdas era capaz de darle la espalda a potestades del infierno?, ah no, ella apreciaba su vida por encima de cualquier cosa. —¿Será que este sitio nos probará en potencia?— Le preguntó sin más, agradeciendo la mejoría gracias a la curación de este, aunque nuevamente el intenso calor parecía hacer mella en ella…viéndose obligada a ponerse a curar otra vez su propia persona, un gasto significativo de energía.

Y de repente, todo comenzó a temblar. Maldijo para sus adentros y a lo único que atinó fue a extender la mano para tomar la de Andrew en plan: “si me muero, te vienes conmigo cabrón”, pero no, ni tiempo quedó que tras esto, toda estabilidad empezó a ceder dramáticamente. Fueron literalmente tragados por la tierra. Los cabellos negros de la titanide ondearon suavemente, incluso terminó raspándose un poco las piernas pero fue lo suficientemente ágil como para ir saltando entre los salientes rocosos, tanto como para ir aminorando la caída. Para su desgracia, el último que piso terminó resquebrajándose, haciendo que la cazadora se precipitara al suelo en los últimos tres o cuatro metros de altura. —¡Tu puta madre!— Protestó ante la gran parte del golpe que se llevó su trasero, pero al menos estaba dentro de los parámetros esperados, a salvo.

A todo esto, uno ojos brillantes empezaron a salir de la arena, justo frente a ella, haciendo que se pusiera de pie rápidamente con evidente carita de asco. —¡¿Y qué mierda es esto?!— como reacción natural, terminó pateando al “cosito” que salió despedido varios metros al frente, sin embargo, a su izquierda tenía otro que reclamaba en un pobre lenguaje alguna especie de prenda. Tal vez no era momento de empeorar la situación, así que al no saber que darle, terminó haciendo eso con su capa, dejando aquella figura tan atractiva lo bastante expuesta y como agradecimiento, la criaturilla en cuestión parecía haberle otorgado un poco más de energía. —Gracias, ahora largo de aquí. Shu, fuera— . Suspiró, posando esta vez la mirada en la criatura que hacia tal horripilante aparición, sí que el condenado era feo, pero antes de proceder observó a la rubia que le dirigió la palabra. —He aceptado algunos trabajos para el gobierno en un pasado, pero actualmente suelo prestar más mi colaboración a la facción opositora. Actualmente soy una informante, vendo información del gobierno a los opositores…así que cuando necesite de mis servicios, seguramente podrá localizarme sin problemas—

Tras esto no dijo más, seguramente el ataque estaba de más, pero igualmente se sacó una daga de la correa que rodeaba el muslo derecho para lanzársela a la criatura. Bufó finalmente, observando en todas direcciones el tan curioso lugar. —¿Y ahora?, ¿Hacia dónde vamos?. Por cierto, se les desmayó una—

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por **Auros** Mar Sep 06, 2016 5:44 pm

El miembro 'Rhea Howler' ha efectuado la acción siguiente: Dados de batalla

#1 'Dado Mítico' :
• Décima Trama de Spirit Soul • Highway To Hell - Página 5 Cac75vq

#1 Resultados : 37

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#2 'Tirada Divina' : 5

por **Lucius H. Ichinose** Mar Sep 06, 2016 6:11 pm

Al entrar al infierno, cada expresión, movimiento o pensamiento se paralizaron por varios segundos a causa de la vasta impresión y ambiente del lugar. Ese endemoniado calor proveniente de su interior había logrado golpear con relativa fuerza el pequeño cuerpo del Príncipe con una hostilidad casi instantánea. Todo aquello produjo en el chico un daño bastante considerable en ese enclenque físico, algo inevitable por el mero hecho de encontrarse en el mismísimo Infierno. Su presencia se mantenía siempre al lado de su maestro, pero siempre con sus orbes pegados a las eminencias de sus padres, ni tan lejos ni tan cerca, lo peor que podía hacer era estorbar a los presentes y eso… pudo dejárselo en claro Adam con aquella “sutil” palabrería que siempre mostraba. Las gotas de sudor resbalaban por cada rincón del joven; heridas, agobiadas y llenas de pánico, caían y rozaban por la piel del chico hasta desaparecer en la nada, esfumarse en aquel infierno de llamas y caer en un olvido infinito. Los jadeos eran continuos y el malestar aumentaba cuanto mayor tiempo pasaba con vida. Cada paso era agotador, pues pareciese que sus piernas pesaran más de lo normal; su estado era sumamente triste, pero ¿Qué más esperar? Desde luego hacia el esfuerzo de aguantar cada minuto que permanecía allí. Era el Príncipe después de todo, no debía dar una mala impresión a ninguno de los allí presente… y menos decepcionar a su padre.

El numeroso grupo que allí permanecía en silencio, tuvo el problema de dividirse en dos debido a las acciones de “Belcebu”. Cada bando comenzó a caer por un oscuro abismo hasta alcanzar el nuevo e inesperado destino que nos deparaba; una zona llena de horror y caos. Las llamas lo dominaban todo con su alta y escalofriante presencia; la calor tornó a aumentar hacia un nivel más superior, algo que molestó claramente a cierto peliazul. Este pudo tener una caída “suave” gracias a las acciones de su maestro, Adam Benjamin, cosa que agradeció dentro de sí aquel acto “heroico”. Pero seamos sinceros, pronto se dibujó en su rostro una expresión de contrariedad algo razonable, pues él mismo Mayordomo le dejo caer una vez alcanzado el terreno, sufriendo este la ira del magma dentro del piso, lo cual provocaba toda esa increíble cantidad de calor que no tenía pensamiento de ceder ante nada ni nadie. –Gracias… por ayudarme a “aterrizar”, Adam.– Da igual lo molesto que se encontrara, el agradecerle por la ayuda que le brindó era necesaria y honesta, pues seguramente hubiera tenido las de perder en caso de encontrarse solo. –Sé que es lo más importante ahora…– Sus orbes comenzaron a localizar rápidamente el paradero de sus padres, algo que no llevó mucho tiempo pues, al parecer, la mayoría pudo caer en la misma diana que todos. –Lo se perfectamente, sí… Pero necesito fortalecerme y llenar mis recuerdos de experiencias, no por ello debo quedarme de brazos cruzados convirtiéndome en una molestia. Necesito avanzar al siguiente nivel… es algo que tú mismo me enseñaste, ¿cierto?– Lucius pudo tener aquella milésima de segundo que le otorgó la posibilidad de ver el movimiento de su maestro, conociendo el objetivo al que iba directo dicha arma de alta gama respecto a peligrosidad.

"Demostraré lo que he podido avanzar en este tiempo"

Uno de los sellos en su cuerpo comenzó a brillar a causa de su activación por medio del pecado que deseó cometer, la Gula. Ante ello, toda energía viva que existía a su alrededor, por muy malévola y despiadada que sea, por muy negra que fuera su alma, comenzaba a ser consumida por la misma ansia de alimentar su magia interior. Ratas infernales, seres mórbidos insignificantes, y semejantes seres ocultos en cada una de los restos de los edificios esparcidos por el lugar se despidieron de su esencia con tal de aumentar el poder del Príncipe. Prosiguiendo, su energía vital se tornó a un color más apagado y lleno de calamidad; todo su alrededor, todo su cuerpo se envolvió en llamas negras con una intensidad inimaginable. –Mi turno– Con aquella expresión de inocente superioridad, Lucius alzó la mano en dirección a su objetivo con tal de atacarlo utilizando la mayor brutalidad posible en su estado actual; de la palma de su mano, una masa oscura consumida por las llamas y el calor se concentró hasta formar una esfera negra altamente destructiva. Esta misma figura geométrica logró ser disparada por su usuario con un tamaño considerable con el fin de impactar de lleno en el engendro que osó por atacar a su grupo. Ese movimiento sería clave para demostrar lo que había logrado conseguir en sus pocos meses de entrenamiento… su camino como ser oscuro ya dio comienzo.

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por **Auros** Mar Sep 06, 2016 6:11 pm

El miembro 'Lucius H. Ichinose' ha efectuado la acción siguiente: Dados de batalla

'Tirada Divina' : 12

por Invitado Mar Sep 06, 2016 6:37 pm

La situación iba empeorando para Charlotte, cada vez estaba más convencida que no estaba preparada para ese lugar. Si bien el temblor no fue capaz de hacerla “asustar”, que el suelo empezara a resquebrajarse de ese modo, obviamente si…sentir el vacío bajo sus pies no era la sensación más agradable del mundo, pero ante esto solo posó la mirada sobre el grupo contrario unos segundos antes de desaparecer. ¿Qué tan dura podía ser la caída?, tal vez demasiado si no tomaba el recaudo, pero fue lo suficientemente diestra como para caer de pie en primera instancia para finalmente inclinarse hasta quedar de rodillas ahí mismo…La misma situación se iba repitiendo, el calor agobiante, sus intentos por curarse, que si bien no eran los mejores, servía. “Estoy siendo una carga, no tengo el nivel para afrontar esto” Pensó para sus adentros, preocupada, siendo que procuraba ser el menor estorbo posible.

Para su sorpresa terminó apareciendo un duendecito también a su lado, y como observó a los demás darle una prenda, ella terminó soltando los listones de su cabello, increíblemente largo pero tan bien cuidado que le profería una apariencia relativamente “dulce”. —Oh, si…toma. Gracias por curarme, eres muy amable— Susurró bajo, sonriéndole apenas hasta que debió centrarse en lo que realmente importaba, intentar salir con vida de allí. Ante las palabras de sus superiores fue poniéndose lentamente de pie, asintiendo en señal de aprobación, procuraría seguir las indicaciones lo mejor posible, pero de buenas a primeras no vio necesario atacar a esa horrenda criatura que apareció en un tono bastante amenazante. Al parecer ya estaba muerta, o eso esperaba. —…— Observó a la chica desvanecida, aproximándose lentamente pero sin pausa, arrodillándose frente a ella para poner la diestra sobre la frente de la rubia. —Está hirviendo— Mencionó a los demás, mostrando preocupación sincera por una de sus compañeras.

Finalmente, en lo que decidían que hacer con ella, terminó arrodillándose a un costado para ir desplazándose y colocar con sumo cuidado la cabeza ajena sobre su propio regazo, al menos para que estuviese un poco más cómoda dentro de ese letargo.

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por **Auros** Mar Sep 06, 2016 6:37 pm

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'Tirada Divina' : 17

por Invitado Mar Sep 06, 2016 6:44 pm

Las frías palabras de Astartea fueron mucho más dulces para la soberana infernal, cada palabra o gesto de desprecio por parte de ella o sus seguidores era un halago, porque por mucho que la odiaran o despreciaban, ninguno movería un dedo contra ella, bien por el acuerdo entre los dos o por el respeto que todos los presentes debían mostrarle. Mientras alguno se atrevió a contestarle, Luzbell no se molestó en absoluto en responder, no pretendía perder el tiempo con la chusma, los únicos merecedores (y eso por necesidad) de su “respeto” eran los líderes revolucionarios.
En absoluto silencio caminaba por el infierno, su hogar, nada allí le dañaba o inquietaba, para ella cada detalle era una maravilla, el olor a putrefacción, el calor asfixiante y muchas más cosas que se encontrarían a medida que avanzan. Las personas allí reunidas avanzaban según el rango, al parecer, siendo Luzbell la que iba en cabeza pues era quien les guiaba por el infierno. Era una tontería pero de cierto modo la situación le agradaba, le daba poder. Notaba la mirada odiosa de los que marchaban detrás de ella, cualquiera podría atacarla por la espalda en un intento por matarla, sin embargo continuaba acompañada de sus otros dos amigos, quienes parecían haber aceptado sus planes y los seguían desde cierta distancia. Los demonios eran impredecibles y así fue como en un segundo la cosa se torcieron para todos los pobres idiotas que iban tras de ella. Una vez las puertas se cerraron tras de todos, Belcebu quiso participar.

Escuchó las casi inaudibles palabras de Belcebu todas ellas rezumaban un rencor abismal, desde luego el demonio también quería divertirse con los invitados. Se dio la vuelta para ver el estropicio causado por su amigo, vio cómo toda esa masa de cuerpo caía al abismo separados en dos grupos. Con las manos en la espalda se acercó al borde para observar el interior, una oscuridad total.- Vaya… se han caído, que lastima.- Murmuró.- ¡Nos vemos luego!- Se despidió con la mano como si pudieran verla. Más le hubiera gustado que todos ellos murieran en la caída pero era fuertes, demasiado, con mucha suerte alguno caería tarde o temprano. Retrocedió observando con una sonrisa satisfecha a Belcebu.- Eres un diablillo, seguro que eso les cabrea mucho.- Rió y se sentó en una roca cercana, para esperar el regreso de sus invitados. Chasqueó los dedos resonando en el lugar; un condenado de aspecto esquelético apareció ante ella.- Anda, quiero una bebida, esperar me agota la paciencia y necesito algo que me haga no recordar lo que hago.- Sí, Luzbell iba a beber en aquella situación, mientras los demás luchaban por sobrevivir, salir de aquellas trampas infernales, la reina les esperaría con una copa llena y una sonrisa. El esclavo desapareció de la misma forma en que desapareció, regresando segundos después con una copa y una botella de vino.- Que detalle, te has acordado de los pastelitos.- Tomó de la bandeja un cuenco lleno de restos humanos, las partes más pequeñas de estos. Metió la mano rebuscando, atrapando un ojo de iris azulado.- Mira, estabas con llena de esperanza… pero te portaste muy mal.- Nada más terminar de hablar, devoró el ojo de una, lamiendo el líquido carmesí que había manchado sus manos al meter la mano dentro del cuenco. Suspiró aburrida.- Tardan demasiado… - Continuó comiendo y bebiendo.

por **Isela A. Ichinose** Mar Sep 06, 2016 7:24 pm

Ah sí, pudo haber sido una caída estrepitosa aunque no llegó a sorprender del todo a Astartea, pues era imposible que algunos de la triada no intentase dificultarles las cosas al grupo, para variar. Antes de desaparecer por aquel gran agujero, observó con notable desprecio a Belcebu, claramente aquella acción no le había gustado en lo más mínimo. —Serás bastardo— Musitó lo suficientemente molesta como para que olvidase por un momento que todos estaban cayendo al mismo vacío. Automáticamente, casi con movimientos felinos rotó su cuerpo para posicionarse mejor y fue cuando de su espalda emergieron dos pares de alas increíblemente hermosos, imponentes, que contradecían evidentemente la propia figura de aquella joven mujer que de buenas a primeras parecía un demonio…Un par blanco, el otro negro, las batió con fuerza pero elegancia, dejando en claro una impronta altiva como era de esperarse en Astartea, el ángel del infierno con la capacidad para hacer temblar los círculos del averno a causa de su mestizaje… —Inepto, Belcebu, no pienso morir en los dominios donde próximamente se elevara mi reinado— Susurró en un tono de voz lo suficientemente filoso y prometedor como para dejar en claro que ella no pararía hasta dar vuelta la situación. Porque quería y porque podía.

En el descenso pudo notar un fulgor carmesí, la propia atmosfera parecía como si fuera un amanecer o atardecer potenciado, todo ardía demasiado. Se veía una ciudad derruida e incluso apenas sus delicados pies tocaron el suelo, se vio obligada a esquivar los chorros de lava que surgía cada segundos imprecisos ante su criterio. Lamentablemente uno de ellos no pudo ser evadido, el que iba directamente hacia el rostro de la Novarum Inferno. A duras penas interpuso el brazo, cubriéndose esa mitad del rostro con la mano pertinente, logrando que la lava golpease tanto en la mano, como así también en brazo y lateral de su cuerpo. Apretó la mandíbula, ardía y dolía demasiado a tal punto que optó por cubrirse con aquel doble par de alas en un intento de protegerse del mismo calor que emanaba todo el sitio en sí. —¡Aléjense de los muros!— Gritó en un tono de voz imperativo, al mismo tiempo dando un potente salto, también batiendo sus alas para alejarse tan solo unos instantes. —Demonios…— Claro que le dolía, tanto así que podía sentir segundo a segundo esas zonas del cuerpo lacerarse a una velocidad magistral, mostrando sectores en carne viva como si evidentemente la hubiesen arrastrado sobre el cemento ardiente.

Desde la altura en la que se encontraba, notó movimientos que no eran de sus compañeros y que fueron confirmados cuando dejaron sus patéticos agujeros. Unas ratas por demás de asquerosas que pretendían devorarlos…Con atención analizó los primeros ataques recibidos a uno en particular donde intervino su hijo, a quien no le quitaba la vista de encima, después de todo estaba más preocupada de lo que podía imaginar. Terminó descendiendo velozmente, a sabiendas que muchos estaban cansados tanto físicamente como mentalmente a nada más de iniciar el recorrido…eran de admirar, totalmente de admirar. Acto seguido, concentró en sus manos energía sanadora, primero una esfera de tamaño medio que se decidió en tres. —Quizás no es mucho, pero de algo puede servirles en este momento— Prometió antes de que las esferas buscasen un blanco en quien impactar, en las tres personas elegidas. —Resistan por favor—

Automáticamente, buscó con la mirada y gran necesidad a Lucius, él estaba dando una buena batalla, esforzándose para estar a la altura de la situación, de una que más de uno quizás no podría soportar. Astartea entornó la mirada a medida que se aproximaba al menor…cada paso que daba con seguridad su figura era enmarcada por aquellos negros que ondeaban sutilmente…sus alas desprendían muy rara vez alguna que otra pluma y al tocar el suelo, el mismo sector se desintegraba solo en ese pequeño radio. Quizás porque ella poseía genética tanto de un demonio supremo como de un arcángel, un ser totalmente prohibido en el averno. La mera existencia de los Nefilims no tenía lugar en ninguno de esos mundos.

—Lucius— Llamó tranquila, posando esos orbes rojizos que por segundos se tornaron condescendientes, cariñosos. De buenas a primeras, se arrodilló ante él, apoyando la rodilla izquierda en el suelo en lo que llevaba una de sus manos al propio cuello. Ahí pendiente de una cadenita de plata había dos frasquitos redondos pero muy pequeños y obviamente, desprendió uno de estos. —Ten, es un elixir muy concentrado, pero te ayudará a resistir. Bébelo todo— Así mismo, tomó la diestra del pequeño para dejarle el objeto, incorporándose pero no sin antes dedicarle una efímera caricia en la mejilla. —Lo estás haciendo muy bien. Permanece alerta y enfocado— Le susurró en el oído con sinceridad, antes de alejarse para tomar posición acorde a la situación…¿Por qué?, no era su hijo de sangre, pero había aprendido a quererlo como tal y además, ella sabía muy bien que se sentía anhelar aprobación por parte de las personas que debían ser una guía en vida y no tenerla…si, tal vez podía entender por las cosas que aquel chico transitó en tan pocos años porque de algún modo diferente, Isela también lo padeció.

—¡Hades! ¡Sin piedad!— Dijo esto, las alas de la fémina desaparecieron en el instante en que se lanzó contra una de esas ratas, desenvainando la katana de lado derecho y ejercer un corte horizontal, a la altura del cuello del oponente. Por otra parte, el felino apoyó lanzándosele por la espalda a tal rata asquerosa, enterrando tanto garras como colmillos. —Los demás estarán bien, seguro, hay revolucionarios aptos con ellos y nosotros…si sabemos proteger a nuestra gente, sean del mismo cargo o no—

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Interacciones:

por **Auros** Mar Sep 06, 2016 7:24 pm

El miembro 'Isela A. Ichinose' ha efectuado la acción siguiente: Dados de batalla

#1 'Dado Cósmico' :
• Décima Trama de Spirit Soul • Highway To Hell - Página 5 Baw6yAz

#1 Resultados : 30

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#2 'Curación Cósmico' : 64

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#3 'Dado Hiper Mascota' : 19

por **Asura Shaytan** Mar Sep 06, 2016 7:55 pm

El calor infernal que hacia en el infierno ciertamente era algo molestamente infernal en mas de una ocasión. Digamos que en este caso estamos presentes ante una situación dantesca que no pintaba nada bien y que podía condenar a nuestras almas al fracaso si es que no sabíamos bien que es lo que debíamos hacer para evitar los problemas que han de surgir. Problemas que en realidad tengo la sospecha provienen mas de la interacción de esta banda de hombres y mujeres alegres con ese ser despreciable conocido como Luzbell. En serio, ¿Para que demonios estamos haciendo tratos con esos patanes si todos saben que al final van a querer robarnos el crédito y las almas?

Supongo que en si es necesario tener un poco mas de apoyo moral, pero hasta ahora no es como si ellos hubieran hecho algo por la revolución que pueda considerarse de importancia. De hecho, hasta hace poco y eso yo no tenia idea de que estaban realmente haciendo algo o que siquiera existían y querían tener una parte activa en todo el asunto. Casi como si hubieran surgido de la nada, podría decirse, siendo productos de una mente enferma que constantemente agrega contenido a este mundo.

Y yo que creía estar loco...

En fin, la cosa es que no estaba prestando mucha atención a lo que pasaba. Por eso, no pude hacer mucho a la hora de reaccionar cuando el suelo se fue mas abajo de lo que corresponde al mismo, resquebrajándose como si de un terremoto se tratase y, al venirse abajo, hizo que el resto de los que estaban arriba de el se desplomaran a su vez hacia una oscuridad insondable, al menos hasta que se llegó al final del trayecto por ascensor rocoso: Una ciudad en ruinas, en medio de un lugar con mas temperatura que un horno y que me estaba haciendo sentir como un pavo de día de Acción de Gracias siendo cocinado.

Y, para adornar mas la situación, los hijos feos del Maestro Splinter estaban saliendo de recovecos de esa ciudad destruida y nos miraban con cara de hambre, pocos amigos, muchos enemigos y ganas de matarnos. Supongo que por eso fue que miré a Takumi, que parecía ser que estaba presente en el lugar por pura arte y gracia del destino.

-Sus ordenes, Gran Líder.-Fueron mis únicas palabras a quien ciertamente es la única figura a quien yo respeto desde lo mas profundo de mi negra y corrompida alma mellada por marcas imposibles de definir, una luz de adoración eterna y verdadera brillando en mis ojos al ser capaz de considerarme un devoto servidor de aquel que me dio un propósito a seguir, única persona capaz de apaciguar las llamas de mi locura caótica al suplantarlas con el frío ardor de la voluntad inquebrantable poseída por quien daría su vida por un líder digno de ser necesario-Aunque creo que puedo saber que ordenes serán esas.

Sonriendo ferozmente, lancé a correr hasta llegar a la primera de las criaturas que mas a mano tenia en este momento, honestamente poco importándome que fueran seres infernales de ultratumba que bien son como animales carroñeros cuya existencia se reduce solamente a ser devoradores de cadáveres y restos putrefactos, sobras y despojos arrojados al suelo por sus amos demoníacos. A decir verdad, yo he comido cosas mucho peores y esta vez no sería la excepción, pues realmente la carne de rata no es tan mala si uno sabe como prepararla... pero a mi siempre me gusta cruda la misma.

Es gracioso, ahora que lo pienso. Tan gracioso que me hace reír mientras muerdo fuertemente a uno de los monstruos, sintiendo como las quemaduras por el calor seguían molestando en mi cuerpo sumadas ya mismo a otras producidas por un súbito disparo de magma salido de una de las paredes, rociando apenas el brazo que usé para cubrirme de ese chorro de roca fundida. El dolor sentido me hace sentir bien, la verdad, pero eso no va a dejar de ser molesto porque daña mi cuerpo, del cual tengo uno solo. Ah, bueno, igualmente, me gusta mucho lo de comer mi comida caliente, pese a que las ratas no dan mucha energía vital que me sirva para seguir rompiendo los sellos que bloquean mi poder verdadero.

Hasta ahora, no hay nada como esa hidra que comí cuando fui de juerga con la muñequita.

No, no soy un spoiler de serie de TV. Debería darles vergüenza por pensar eso (?):

Menciones honorificas para los Grammy, premio que a nadie le gusta (?):

por **Auros** Mar Sep 06, 2016 7:55 pm

El miembro 'Asura Shaytan' ha efectuado la acción siguiente: Dados de batalla

'Tirada Divina' : 6

por **Maya Natsume** Mar Sep 06, 2016 8:08 pm

No pensaba que la incluirían para participar en una misión tan importante y arriesgada. Se sentía preocupada por poder demostrar que realmente podían contar con ella, acaba de unirse a la facción revolucionaria, no conocía a nadie, no destacaba en nada y su apariencia tampoco ayudaba mucho más. Adentrarse en el infierno era algo que a su parecer se le quedaba grande, pero este era el camino que había elegido y con todas las consecuencias debía permanecer en el, tenía que darlo todo, el poco tiempo que se relaciono con estos extraños le aportaba una calma en su interior que hacia tiempo no sentía, tampoco había nada que perder, nadie esperaba su vuelta.

Tras la entrada de todo el grupo al inframundo las puertas se cerraron, dejándoles en una especie de antesala en la que fueron recibidos por la mismísima Luzbell. Mientras la diablesa hablaba, inspeccionaba los alrededores. - “Este lugar es una puta locura…”- La temperatura era insoportable, gritos y alaridos se escuchaban por doquier entremezclandose con rugidos de bestias ocultas a sus ojos por el momento. De repente el suelo bajo sus pies empezó a temblar provocando que se quebrase, antes de caer pudo ver a Belebu apoyado en el suelo con una macabra sonrisa en su rostro.

Un calor insoportable la rodeaba, respiraba con dificultad, Intentaba por todos los medios mantenerse en pie y ser de utilidad, aún con la vista borrosa por el calor, pudo divisar a un enemigo que se acercaba a ellos, sin desenvainar la katana, arreó un golpe al bicho que sirvió de bien poco. Un ruido burbujeante provocó que se girara para encontrarse de lleno con un chorro de lava, solo pudo usar como barrera sus brazos, pero la presión era tan grande que salió disparada hacia el suelo, notaba sus antebrazos como escocían y olían a carne chamuscada. Todo se volvió negro, poco a poco perdió la consciencia sin saber que le había sucedido hasta quedar inconsciente.

Datos:

por **Auros** Mar Sep 06, 2016 8:08 pm

El miembro 'Maya Natsume' ha efectuado la acción siguiente: Dados de batalla

'Tirada Rango 3' : 13

por **Frederik L. Damgaard** Miér Sep 07, 2016 12:05 am

Como revolucionario, estaba acostumbrado a las repentinas vueltas que daban cuando algún evento importante emergía. Nunca venían con alguna advertencia, simplemente llegaba la noticia que debían partir a cierto lugar ya determinado. Era claro que para muchos que apenas empezaban a unirse a las filas revolucionarias, esta clase de abruptas órdenes caían como baldazos de agua helada pero para el pelirrojo se habían vuelto una costumbre ya normal. A pesar de eso…sintió un terrible nudo en su garganta cuando se enteró del sitio al que iban a partir…una dimensión de la cual había escuchado cuando aún habitaba en el Omnia pero que jamás pensó llegar a conocer.

Estaba seguro que todos los que habitaban en la isla flotante llegarían juntos pero el pelirrojo opto por un viaje en solitario en lo que preparaba sus objetos. Tenía la certeza que ser un semidiós no le aportaría ningún beneficio en la tierra natal de los demonios…viéndose en la necesidad de preparar toda clase de pociones y otra clase de artilugios destinados a mantener su cuerpo vivo. Aun encontraba muy molesto tener que depender de esa clase de cosas siendo que era un dios pero siempre terminaba recordando que no era más una criatura inmortal y morir realmente no era algo que le interesara demasiado —Maldigo esta fragilidad terrenal —Murmuró luego de colocarse la gruesa gabardina negra junto a un collar del mismo color donde sus cristales malditos colgaban. Aun recordaba lo útiles que fueron durante su última pelea y eran una buena carta de gracia para una emergencia.

El antiguo dios del chaos hizo su camino hasta el portal que permitía el acceso al infierno. En su cabeza imagino un sitio macabro envuelto en puro fuego y cenizas pero la entrada no era realmente algo sorprendente aunque claro eso cambio una vez que cruzo el lumbral. Lo primero que percibió no fue el calor o el “agradable” paisaje…lo primero que su cuerpo sintió fue un subidón descontrolado de energía, algo que se desbordaba por sus poros y sin poderlo contener, provoco una transformación espontanea a su verdadero aspecto. Cuando se dio cuenta su ropa se había cambiado por su antigua armadura de combate, en su espalda portaba su poderosa lanza además que su gabardina paso a volverse una mera capa que cubría solo el costado izquierdo de su cuerpo — Interesante…—Dijo por lo bajo mientras movía ligeramente sus manos, aun logrando sentir rezagos de esa energía correr por su piel. Al parecer su travesía infernal tendría que llevarse a cabo bajo su verdadero aspecto y mientras caminaba, se preguntaba que otras sorpresas irían a encontrar en el camino.

Hablando de sorpresas, la primera de muchas se presentó cuando dio con el grupo de revolucionarios. Estaban casi todos los soldados presentes además de algunos miembros de grupos neutrales, tal parecía que no solo fue enviada la misiva a los miembros de la facción pero a otros posibles útiles activos. En realidad poco le importaba, no había nada en el infierno que fuera de su interés puntal…no le atraía ningún tesoro o promesa que pudieran ofrecerle pero aun así, debía permanecer junto a sus “compañeros”. Por ello se abrió paso hacia el centro del grupo pero apenas logro acercarse a la revolucionaria de cabellos negros, sintió una terrible presión en el pecho a la vez que bajo sus pies el suelo se abrió y antes de lograr reaccionar, fue comida de la creciente oscuridad en ese abismo.

Exactamente el tiempo que tardó en llegar al suelo no estuvo claro pero basto dos movimientos de sus manos para cambiar la estructura del suelo, evitando sufrir algún daño en la caída. De acuerdo a lo que podía apreciar, estaban en una especie de bosque metálico. Usualmente eso podría ser considerado extraño pero tomando en cuenta que se encontraban en pleno infierno, seguramente sería el lugar más normal que visitarían en mucho tiempo —Sitio para “pintoresco” —Murmuró sin perder la compostura mientras observaba de reojo a unas pequeñas criaturas que aparecieron de los “arboles” a la vez que por precaucion, ingeria un de los cristales de su collar. No se veían peligrosas pero parecían querer algo y siguiendo el ejemplo de otros que allí también se encontraban, les entrego su “capa”, sintiendo casi de inmediato un alivio en su cuerpo —Oh…gracias —Dijo a las criaturas en lo que notaba la aparición de una bestia nueva pero ni intento combatirla ya que otros comenzaron a atacarla —Bueno…tú te ves lastimada…no te muevas —Señaló mirando a una mujer de cabellera negra junto a la rubia novarum. Concentrando su energía, libero una viva corriente rojiza que empezó a aliviar todavía más su cuerpo a la vez que se dividía en un segundo “relámpago” que envolvió a la muchacha para solventar sus heridas también.

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Constancia:

por **Auros** Miér Sep 07, 2016 12:05 am

El miembro 'Frederik L. Damgaard' ha efectuado la acción siguiente: Dados de batalla

'Curación Cósmico' : 62

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Territorio	225	240	110	80
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Armamento	90	21	21	45
Soldados	80	70	70	110
Prestigio	80	50	120	120
Total:	1435	3747	1531	2085

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Categorías	Chaos	Spatium	Tempus	Revolucionarios & Anti gobierno
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Armamento	Lvl 1	Lvl 1	Lvl 1	Lvl 1
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MEJORAS DE CHAOS
Tipo	Nivel	Mejora	Adquirida el día
Mejora de Armamento	1	Armadura reforzada. Los soldados cubren su espalda, hombros, y brazos con armaduras mágicas. (+17 puntos al dado de defensa de cada soldado)	26/5/2016
Mejora de Infraestructura	1	Geisers de lava.Tus murallas son cubiertas por geisers de magma que queman todo lo que se acerca. (+100 hp a cada muralla al defender de una invasión)	21/8/2016

MEJORAS DE SPATIUM
Tipo	Nivel	Mejora	Adquirida el día
Mejora de Armamento	1	Pólvora Delux. Las armas del reino sufren una mejora total. (+20 al dado de ataque de cada soldado)	26/5/2016
Mejora de Infraestructura	1	Se refuerzan las murallas del reino en edificios gubernamentales. (+100hp a todas las murallas al defender de una invasión )	24/8/2016

MEJORAS DE TEMPUS
Tipo	Nivel	Mejora	Adquirida el día
Mejora de Infraestructura	1	Campo tecnológicamente alterado. Un campo electro-magnético rodea tus murallas protegiéndolas del daño enemigo. (+150 hp a todas las murallas al defender una invasión)	26/5/2016
Mejora de Armamento	1	Cañón electromagnético. Los soldados son armados con tecnología de punta. (+15 al ataque de cada soldado)	21/8/2016

MEJORAS DE REVOS & ANTI-GOBIERNO
Tipo	Nivel	Mejora	Adquirida el día
Mejora de Armamento	1	Armas cortantes (Espadas): los forjadores y herreros abdicados a la revolución son considerados los mejores entre las regiones. (+20 al dado de ataque de cada soldado)	26/5/2016
Mejora de Infraestructura	1	Diavolik Force. La manipulación con éxito de materiales para crear tus murallas, hace que la protección que esta otorga aumente considerablemente. (+120 hp a todas las murallas al defender de una invasión)	21/8/2016


Disponible	Hikari Hiroshi	Jellal Slater