Re: [+18] We are back to the business [Trama 4.2 de Spirit Soul]

por **Reiv Black** Vie Mar 20, 2015 2:08 pm

La detonación en dos puntos clave como son las dos puertas de la zona de habitaciones de guardias ha resultado satisfactoria, reducirá un poco el número de guardias que puedan llegar hasta nosotros, quedando ahora muchos de ellos bloqueados por los escombros que han quedado. El zumbido de los oídos provocado por la explosión va pasando poco a poco, así que puedo escuchar cada vez con más claridad el griterío procedente del motín de la lucha entre reos y carceleros. Sin perder más tiempo echo una última carrera a la oficina del custos carceris en la que dejé a Greed, encontrando la puerta abierta al llegar. Nada más entrar me encuentro con el líder revolucionario que ya había llegado al lugar, con Greed rebuscando por todos lados y para mi sorpresa con la joven muchacha que creí muerta en la fiesta del Lord. Después de lo que vi aquel día pensé que no había posibilidad alguna de que sobreviviera, sin embargo aquí está, luchando como el resto por salir de aquí. – Bienvenida de vuelta al mundo de los vivos. – saludo al pasar a su lado haciendo una leve inclinación de cabeza como para mostrar admiración por su supervivencia. Por otro lado también está la muchacha del pelo azul, la pirata que se enfrentó al Lord al principio de la fiesta. Alzo ambas cejas sorprendido al oír eso de los ojos colgantes de pulsera, pensando que a todo el mundo se le ha ido la cabeza en esta cárcel. Después me dedico a lo que está haciendo el resto, buscar la supuesta llave del Custos Carceris y que no tenemos ni idea de cómo es. Los cajones ya parecían estar más que mirados, así que busco detrás de cuadros, en lo alto de las estanterías y cosas así, lugares en los que un paranoico guardaría su llave.

Un mal presentimiento me dice que puede que la lleve siempre encima, como un colgante al cuello. Espero que sólo sean suposiciones, porque en ese caso no creo que el tipo venga a recibirnos con la llave al cuello. Resoplo frustrado después de haber mirado entre algunos libros en la estantería, mirando de reojo al grupo de tanto en tanto para ver si ya han localizado algo. Si alguien dominase el elemento de metal y no llevásemos puestos los malditos collares anuladores esto sería muy sencillo, pero así nos toca buscar y buscar. Dejo de sacar papeles cuando escucho que Memeran ha encontrado algo. Me acerco con interés para ver de qué se trata, justo en el momento en que ésta cae al suelo y para colmo se pega un golpe en la cabeza, pensando la mala suerte que tiene la chica. La caja que ha sacado es bastante pequeña y no sé si será la buena, algo tan importante no creo que esté guardado en una caja de ese tipo. Me acerco a la caja del suelo, descargando un pisotón sobre ésta con bastante mala leche. La caja se hace añicos pero no aparece nada que parezca una llave. - A la mierda la caja, ahí no hay nada. - a las malas si no encontramos la llave no podemos perder la oportunidad de huir, así que la última opción era tratar de escapar usando las armas robadas. - Habrá que localizar al Custos Carceris y amenazarlo para que la suelte. Puede que la lleve él encima.

por **Isela A. Ichinose** Vie Mar 20, 2015 3:35 pm

Continuó buscando en diferentes cajones, ignorando por completo lo que pudiese llegar a ocurrir a su alrededor porque precisamente no le importaba nada más que encontrar esa bendita llave que liberaba los collares que oprimían con tanta voracidad los poderes de los presentes, ellos estaban ciertamente jugándose el todo por el todo. Ya nada más había que perder, Isela lo sabía a la perfección y fue entonces cuando recordó esa especie de “sueño” que tuvo mientras los médicos intentaban salvarle la vida. Supuso que seguramente no había sido un sueño, que realmente su padre tuvo las intenciones de regresarla al infierno para ajustar cuentas con ella, pero algo…algo impidió que ese día Isela perdiera la vida tras el brutal ataque del Lord. Seguramente él estaría sentado en su trono infernal, recargando el mentón sobre una mano, regocijándose en parte por todo el infierno que estaba atravesando la revolucionaria de élite. Tenían una expresa conexión, por lo que claramente bien él podría sentir el miedo o la sensación de incertidumbre que la chica experimentaba por esos momentos al no encontrar la llave.

Observó a Reiv de reojo con una sonrisa mínima por sus palabras, dejando incluso dejar escapar una risita poco audible. –Gracias, no podía irme así tan fácil y darle el placer de dejar de existir a más de uno-

-Ya te dije que le dispares a todo lo que se mueva y no sea aliado, Memeran- Musitó entre suspiros entrecortados pero sin observarle, claramente porque estaba dándole la espalda sin dejar de buscar la llave. De un momento a otro gruñó por lo bajo y azotó con fuerza el cajón contra el suelo, terminando por hacerlo añicos contra el mismo por la rudeza con la que había sido golpeado. Sus ojos rojizos mostraban ira, como así también ese brillo que hacía relucir su parte demoniaca, atrás había quedado la chica algo insegura, o temerosa, ahora estaba dándole paso a su otra personalidad, esa digna de temer…una que por momentos ni ella misma podía controlar.

-No, no está…- Las manos de la joven volvieron a apoyarse sobre el mueble de madera, en lo que bajaba apenas la cabeza respirando con algo de dificultad en lo que se disponía a irse hacia el otro extremo de la habitación, sin embargo, no pudo evitar voltearse al sentir la voz del pirata y notar el posterior desvanecimiento de la peliceleste. Terminó por llevarse las manos a los ojos, cubriéndolos por unos segundos e intentando no ponerle atención a esa opresión en el pecho que sentía de manera casi continua cuando se encontraba en ese estado de bipolaridad intensa, casi a foja cero que en más de una vez culminó con ella siendo confinada por su padre hasta que el estado pasara.

-La llave…- Musitó apenas, mordiéndose el labio inferior con tal fuerza que logró herirse a sí misma, incluso podía sentir persistentes voces dentro de su cabeza las cuales procuraba ignorar por completo. Notaba un ligero temblor en sus manos, una fría sensación pero aun con su cuerpo manteniéndose cálido, lo sentía, lo sabía, comprendía que ya no había vuelta atrás en sus parámetros de comportamiento de ahora en adelante. Suspiró, adoptando a nueva cuenta esa racionalidad escalofriante mientras observaba a la pirata tendida en el suelo. No dudó en aproximarse hasta ella siempre manteniendo ese andar casi felino, para después arrodillarse y colocar la diestra sobre el cuello ajeno. –Su pulso no es el mejor pero al menos respira todavía. Debe tener tantas heridas internas que su cuerpo colapso por propia seguridad del sistema circulatorio así que…Seguramente despertará- Comentó en lo que tomaba a nueva cuenta el arma de fuego que anteriormente le había dado mientras huían de la celda. Examinó la llave que Memeran había encontrado para después probarla en vano sobre el collar de la pirata. –No, no es- Comentó para deshacerse de ella. Tras unos momentos de buscar en otros compartimientos, sus ojos se posaron sobre un cuadro, algo grande, más no en demasía. Entonces fue cuando caminó hacia allá para quitarlo de un brusco movimiento, aun sosteniendo con dos o tres dedos dicha arma cargada, para finalmente descubrir lo que parecía ser una caja fuerte amurada a la pared. Esta era de tamaño medio y parecía obviamente imposible de abrir sin alguna llave o tarjeta especial mediante clave.

Sonrió mínimamente, sin ninguna razón en particular. Retrocedió unos dos o tres pasos y a nueva cuenta apunto con la pistola hacia la caja fuerte con tanta precisión que incluso el tirador más experimentado podría envidiar. Unos segundos siguientes, pudieron oírse tres certeros disparos en la apertura de la misma al jalar del gatillo, uno seguramente no bastaría para ese tipo de claustros. Extendió con cuidado la mano izquierda, abriendo la misma con cuidado de no tocar los alrededores de los orificios para no quemarse ante los recientes impactos de bañla.

Arqueó una ceja, incrédula, en lo que comenzaba a sacar del interior diferentes cosas que ella consideraba porquerías, cartas, sobres, dinero, otras pertenencias personales que bien podrían ser del custos carceris. Un pequeño atisbo de esperanza se reflejó en sus ojos ni bien pudo notar en el fondo una pequeña llave dorada, sumamente delicada. –Creo que está aquí…Podría ser- Sonrió un poco más en lo que se disponía a tomarla, sin embargo el fuerte sonido de las alarmas que se escucharon en ese segundo consiguieron detener dicha acción por parte de la hibrida y generar aturdimiento en la joven. Automáticamente, las puertas se cerraron en un sonido todavía más seco.

-¿Qué pasa? ¿Qué está pasando?- Apenas si pudo murmurar, observando en todas direcciones con evidente estado de incomodidad al sentirse más acorralada que antes.

por **Auros** Vie Mar 20, 2015 4:24 pm

Las alarmas de aquella inmensa prisión comenzaron a sonar con un ruido ensordecedor y casi de forma instantánea los pabellones y habitación de la misma fueron cerradas por unas enormes placas de metal reforzado con adamantium que impedían el paso tanto a guardias como a prisioneros. En aquel momento en que la joven tocó la llave, la caja fuerte que la contenía se cerró también con una placa metálica que estuvo a punto de cortar los dedos de la hibrida. En aquel momento las alarmas dejaron de sonar para dar lugar a un sonido mucho mas extraño, como si se tratase de un enorme objeto metálico chocando contra el suelo. Fue en ese segundo exacto en que las estanterías que rodeaban la habitación y que parecían guardar libros viejos y nuevos se abrieron en dos, dejando que unos 15 guardias con entrenamiento de elite rodeara a los prisioneros que habían ocupado aquella habitación. Pero esto no era todo, detrás de los guardias una figura de unos dos metros, con unos ojos completamente rojos que brillaban por si mismos caminaba lentamente entre las sobras acercándose a ellos. Aquella, era la razón por la cuales los guardias se mantenían tan despreocupados respecto a los prisioneros. Era la razón por la cual nadie lograba escapar de Arcadia con vida, una máquina de asesinar dotada de la mejor tecnología de la nación. Elephant Warriors M1H1 era la inscripción que podía leerse en uno de sus brazos, justo bajo el escudo de Tempus. A medida que este se acercaba a aquellos prisioneros se podía ver más y más de su estructura. En uno de sus brazos poseía una potente ametralladora, sin embargo lo más aterrador de este era que terminaba en una motosierra cuya cadena giraba permanentemente alternando la velocidad causando una sensación de terror en quienes le veían. En su otro brazo poseía también el cañón de una ametralladora, sin embargo esta era capaz de lanzar rayos de plasma inmovilizadores. Además, poseía un inmenso mazo/hacha que parecía ser capaz de utilizar con gran facilidad. Aquel ser, era un organismo computarizado que aprendía de los patrones enemigos mediante I.A. (Inteligencia Artificial).

Justo en el momento en que se acercó lo suficiente, uno de los guardias se acercó a este y colocó la llave dentro de una capsula de vidrio antibalas que el robot llevaba a la altura de lo que parecía ser su cintura. Por lo que todas las personas presentes deberían luchar en su actual condición y vencer a aquella bestia antes de poder liberarse de sus collares. Sumado a esto, los guardias armados les apuntaban con sus ametralladoras. Aquel robot con forma de elefante comenzó a acercarse poco a poco hasta finalmente ponerse delante de los guardias y elevar aquel brazo que poseía la potente ametralladora de gran calibre cuyos cañones comenzaron a girar gradualmente hasta que en el punto en que más velocidad podían tomar, esta comenzó a disparar generando que el polvo de la pared comenzara a volar por todos lados. Dificultando la visión de guardias y reos, mas no la propia pues era capaz de guiarse por sus medidores de calor para reconocer a sus enemigos.

Elephant Warriors M1H1:

Stats:

por **Auros** Vie Mar 20, 2015 4:24 pm

El miembro 'NPC' ha efectuado la acción siguiente: Dados de batalla

#1 'Tirada Divina' : 25

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#2 'Tirada Divina' : 9

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#3 'Tirada Divina' : 13

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#4 'Tirada Divina' : 8

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#5 'Tirada Divina' : 28

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#6 'Tirada Divina' : 19

por **Isela A. Ichinose** Vie Mar 20, 2015 4:42 pm

Todo culminó en una repentina presentación de más guardias, eso no preocupó del todo a la hibrida quien no dudo en retroceder con calma a la espera de tener que enfrentarse a ellos a mano limpia si era necesario. Sin embargo, su rostro mostró increíble sorpresa e incluso temor al notar aquellos rojos ojos lejanos que poco a poco fueron haciéndose más nítidos para finalmente dar paso a un androide que Isela recordaba haber visto en las instalaciones de la marina junto a unos cuantiosos planos del mismo. Claramente desconocía su uso, como así también capacidades, pero ya desde ese entonces cuando era una vicealmirante, se rumoreaba que era una máquina de destrucción masiva y que traería buen soporte a los miembros del ejército.

Los ojos de la hibrida se posaron directamente sobre aquella cierra que solo ocasiono avivar más su miedo interno, se sentía como un felino acorralado y no dudaría en reaccionar de las peores maneras ni bien tuviera la oportunidad, algo estaba claro, jamás suplicaría por su vida, si moría, debía serlo con el orgullo intacto con el que había entrado. Sonrió de una forma vacía y de reojo pudo observar a Takumi al otro extremo de la habitación, como así también a Reiv y los demás, no podía llegar hasta el líder de los revolucionarios tan rápido sin hacer uso de sus habilidades mágicas las cuales estaban dormidas por el maldito collar que les habían puesto al ingresar. –El que a hierro mata…a hierro muere- Pronunció tal famoso dicho apenas unos segundos antes de que tal balacera infernal comenzara a hacerse presente y por ende destruyera algunas cosas a su alrededor.

Indudablemente se hizo hacia atrás con velocidad destacable, más no sobrenatural, al mismo tiempo que extendía la mano derecha hacia Greed, precisamente hacia el cuello ajeno para tirarlo tras el escritorio del custos carceris, ni bien pudo, ella se agachó para ocultarse ahí mismo. Sabía que Takumi estaba en malas condiciones, pero si en algo lo conocía podía esquivar con facilidad ese ataque, lo peor es que ella no estaba tan cerca a él como hubiera querido y lo único que tenía al alcance era al otro revolucionario de élite, Greed. Permaneció de rodillas en lo que inspeccionaba el arma de fuego en sus manos, cuantas balas podrían haber quedado si ya había gastado al menos cuatro. –Maldición, solo esto nos faltaba- Gruñó por lo bajo, en lo que desde la inmediata seguridad de su posición no dudó en asomarse mínimamente para ver las diferentes posiciones de uno y de otro, fijando su atención únicamente en aquel androide. –Oye, Greed, ¿te puedes encargar unos momentos de los guardias?, necesito tiempo…tres…cuatro minutos, quiero ver algo- Musitó apenas para finalmente apoyar la mano libre sobre el suelo y sin pensarlo dos veces largarse a correr hacia el robot con sumo cuidado de no ganarse un disparo a nueva cuenta en un acto increíblemente arriesgado por parte de ella.

Ni bien estuvo a menos de dos metros delante de él, terminó por dejarse caer y deslizarse por debajo de sus piernas, aun con el creciente temor de que este fuera capaz de reaccionar más a prisa, si es que podía al ser de última generación. –Malditos enfermos de Tempus- Recriminó en clara referencia al androide que tenían de oponente, en lo que se volvía a poner de pie, contando en su mente los segundos. Procuró entonces, colocar la mano izquierda sobre la espalda del androide, mejor dicho uno de los salientes para impulsarse hacia arriba, sujetándose en parte con ayuda de sus piernas pero sin llegar a rodearlo con las mismas. Buscaba entre la nuca de tal forma humanoide cierta entrada o pequeño circuito vital que tenían la mayoría de ellos, , una especia de punto ciego, al menos los que Isela había alcanzado a conocer en sus tiempos de servir al gobierno, pero claro…para su gran sorpresa no podía observar nada similar a lo anterior. Prefirió arriesgarse, apoyando el caño de la pistola a nueva cuenta sobre esa misma zona que había divisado para así gatillar sin duda alguna a la espera de que quizás las balas pudiesen penetrar el acero.

stat:

por **Auros** Vie Mar 20, 2015 4:42 pm

El miembro 'Isela Adramelech' ha efectuado la acción siguiente: Dados de batalla

'Tirada Divina' : 16, 16

por **Greed Gaziel** Vie Mar 20, 2015 5:45 pm

El Joven revolucionario estaba demasiado entusiasta en su búsqueda por la llave, tanto que no dio mucho importancia a la llega de de las dos mujeres a pesar de sorprenderse por ver a Isela viva a la cual consideraba muerta. Siguió buscando sin dar demasiada importancia a los demás hasta que la pirata de cabellos celestes se desmayo tras soltar unas pocas palabras -Dejala, nosotros tenemos otros asuntos, no importa las vidas que se pierdan para que podamos salir de aquí- Resonó la voz macabra en la cabeza del pelinegro. Greed no iba a ayudarla, tenia que hacer caso a esa voz que le hablaba, no estaba en sus planes pero mantuvo su mirada e interés en ella cuando los demás comprobaron su salud. La entrada repentina de Bartolomeo le hizo clavar su vista en aquel sable que fue botado del canasto, era el suyo, sabia reconocerlo y eso era lo que importaba en aquellos momentos. -Parece que por fin la suerte está de nuestro lado- Le comentó la voz, la cual Greed intentaba ignorar o al menos no responder mientras estuviera frente a los demás. Se apartó tranquilo de aquel escritorio, intentaba calmarse pues no veía progresos, dirigiéndose a tomar su sable el cual para su suerte llevaba con el la funda y se lo colocó para dejarlo colgado en su espalda. Al voltear vio a Isela encontrar aquella caja fuerte, sonrió y se acerco a ella para comprobar aquel lugar, pero esta sonrisa se borró rápidamente cuando las puertas fueron bloqueadas logrando ese sonido de impacto metálico que ensordeció al pelinegro por unos momentos.

Todo sucedió rápido y debido a tanto sonido metálico comenzó a sentirse desorientado, si pudiera quitarse el collar todo ese metal cercano seria una gran ayuda para un combate, pero en esas condiciones solo era una molestia. Quedó casi inmóvil al ver aquella maquina, poco importancia tenían para él los incompetentes guardias, pero sin poder hacer uso de sus habilidades se encontraba atemorizado por la alta tecnología que blandía ese titan de engranajes. Apretó los dientes, su primera reacción fue buscar donde cubrirse al momento en que le vio levantar la metralleta, pero antes de poder reaccionar fue arrastrado por Isela hasta detrás del escritorio del custos carceris. Una de todas esas balas había logrado llegar al revolucionario, solo cerca de su brazo creando una pequeña herida que no le molestaba demasiado por ahora. Escuchó a Isela con cuidado, aún algo atontado por todo lo que había pasado, pero comprendió sus palabras y puso su mano el sable listo para desenfundarlo y acatar las ordenes de la pelinegra. Ésta si quiera le dio tiempo a contestarle, pero parecía estar segura de que el la cubriría. A Greed le agradó la confianza que le daba, el que ella crea en el era algo que de alguna forma alimentaba la avaricia del revolucionario por lo que salió de escondite casi momentos después de Isela.

Con una sádica sonrisa sobre su rostro comenzó a correr hacia los guardias, desenfundo su sable para llamara la atención de estos al menos por el momento en que Isela se acercaba a la maquina asesina frente a nosotros. Aquellos guardias apuntaron sus armas a Greed, el joven comenzó a moverse agilmente desconcertando a los hombres armados que sin poder fijarle completamente comenzaron a abrir fuego. La complexión de su cuerpo le brindaba la agilidad necesaria para evitar aquellos disparos mientras continuaba acercándose a aquellos hombres. Finalmente al encontrarse a la distancia correcta aprovechó su experiencia en el uso con el sable y cortó la mano del guardia que tenia más cerca, esté comenzó a gritar mientras perdía la sangre de su miembro desprendido, aquellos desconcertó al resto que prácticamente comenzó a disparar a quemarropa sin tomarse la molestia mínima de apuntar a su objetivo. Greed se movió en zig-zag por el suelo, complicando esto a sus agresores acercándose al siguiente de los guardias sin hacer contacto con una sola de esas balas.

En un solo movimiento cortó la garganta de éste guardia, la sangre comenzó a brotar y se cubrió tras el usando el cuerpo moribundo que se desangraba como escudo para los disparos de los demás guardias. Greed no tenia idea de como usar las armas de fuego, no era hábil con el gatillo así que prefirió solo arrojar el cuerpo a un costado cuando pudo notar al resto de los guardias detener su balacera, aún con la sonrisa sobre su rostro aprovecho este momento para retroceder y tomar distancia de sus agresores en un salto que lo ponía peligrosamente cerca de la maquina la cual ahora mismo estaba siendo objetivo de Isela. La pudo ver luchando por quitarse a la flexible chica de encima y Greed no dudó en aprovechar esta situación para clavar su sable sobre la pierna de Elephan Warrior, en un lugar donde podía verle desprotegido pues el metal necesitaba hacer espacio para simular las articulaciones, pudo ver chispas salir de dentro de la maquina y retiro el sable rápidamente en reflejo mientras volvía a ponerse como objetivo a los guardias. - Bien recapitulemos, 2 tontos menos, solo faltan 13 y un enorme ganesha metálico- Irónico y sarcástico se pronuncio aquella oración en la boca del Avaricioso revolucionario que se preparaba para otra ronda contra los guardias que terminaban de recargar sus armas.

stats:

por **Auros** Vie Mar 20, 2015 5:45 pm

El miembro 'Greed' ha efectuado la acción siguiente: Dados de batalla

'Tirada Divina' : 10, 21

por **Ichinose Takumi** Vie Mar 20, 2015 6:22 pm

El revolucionario claramente no podía ver lo que sucedía, por lo que su ayuda sería nula para encontrar la llave. Teniendo esto en cuenta simplemente se recostó contra una de las paredes del lugar, estaba algo cansado realmente y sus heridas habían comenzado a doler nuevamente. Durante aquel tiempo mantuvo los ojos cerrados y se sentó en el suelo intentando recuperar energía mientras greed comenzaba a desbaratar el lugar tras aquella broma que seguramente se cobraría en el momento oportuno. Fue en aquel momento en que su esposa y la pirata llegaron al lugar, aunque él no les prestó demasiada atención a ninguna de las dos. En aquel momento no deseaba ser molestado, ni tocado, todo lo que deseaba en ese justo momento era llevar uno de sus gitanes entre los labios. Quizás por un cambio del destino, por pura suerte azar o coincidencia pero en ese justo momento una pequeña cajita metálica voló hasta llegar a los pies del revolucionario. Cuando este la abrió justo ahí descubrió al pasar sus dedos sobre esta que se trataba de una cigarrera con unos habanos muy caros dentro de ella e incluso lo que parecía ser un mechero grabado. Rápidamente tomó uno de estos y cortó la capa de este con una de sus dagas, colocándolo entre sus dientes para luego dejar escapar una espesa bocanada de humo mientras se ponía de pie. En aquel momento la muchacha se acercó a él y le devolvió aquella pulsera que el guardó en uno de sus bolsillos. En cuanto se quitara aquel collar seguramente serían muy útiles, mientras tanto no servirían de mucho debido a que su factor curativo había sido mermado. Tal vez por el simple hecho de que la joven le había devuelto sus ojos, fue la única razón por la que no se la quitó de encima en cuanto esta puso sus manos sobre él. De cualquier forma le debía uno o dos favores y se aseguraría de pagarlos, pues incluso a pesar de ser un revolucionario aún continuaba siguiendo algunos dictados de los demonios. Lo siguiente que pudo notar fue que todos comenzaron a destrozar los inmuebles del lugar, o por lo menos eso era lo que llegaba a sus oídos.

No se preocupó demasiado y continuó fumando aquel puro de forma tranquila mientras se mantenía alerta, aquello estaba saliendo tan fácil que trajo a su mente una vez más la imagen del castillo, no debían cometer una vez más el mismo error. En aquel momento estaba seguro de que todo lo que podría salir mal lo haría por lo que tenían que estar preparados para todo. Pudo darse cuenta al oír las voces ajenas, que tanto Reiv como Bartolomeo estaban vivos. Aquello era bueno, mientras mas numerosos fueran mejor y el número de personas en el lugar se había multiplicado gracias al pirata que parecía haber traído consigo a varios reos.

Fue en aquel instante en el que su esposa anunció que había encontrado la llave y tras algunos disparos ensordecedores, una alarma aún más intensa comenzó a sonar. Duró tan solo unos segundos, pero fueron suficientes como para que el revolucionario quedara un tanto atontado por este pues su sentido más agudizado era ahora el oído. Aún así, en cuanto recobró la compostura pudo escuchar perfectamente el sonido de aquella cierra y las pisadas de aquel ser que se acercaba lentamente hacia ellos.

-¿Qué diablos se está acercando a nosotros? –Fue lo único que el revolucionario logró decir en tono calmado, antes de escuchar aquel ruido que la ametralladora hacía al comenzar a rotar.

En aquel momento se dio cuenta de su clara desventaja, huir era inútil pues no podía saber dónde estaría a cubierto de los proyectiles que aquel arma lanzaría en segundos. Su única opción valida fue tomar a uno de los reos que habían llegado junto a Bartolomeo y ponerlo frente a él para usarlo de escudo, salvándose por muy poco de que aquel ser fuera capaz de dañarle en algún órgano vital aunque para su sorpresa la mayor parte de las balas impactaron en aquel brazo cercenado, o lo que quedaba de el. Que ahora había quedado reducido a nada más que un trozo de carne desgarrado que colgaba de su hombro. Fue en aquel momento en que el revolucionario se quitó la chaqueta rápidamente, descubriendo su abdomen para atar esta con un poco de dificultad alrededor de su herida.

-Ahora si… Me hiciste enfadar –Musitó el revolucionario que de haber podido habría lanzado una cruel mirada capaz de atemorizar incluso a los más valientes guerreros.
Se puso de pie y esperó con la espada enfundada manteniendo su mano sobre una de las dagas que portaba en el cinturón. Aprovechando el justo instante en que greed hizo chispear al mastodonte para guiarse y comenzar una carrera hacia aquel monstruo metálico a gran velocidad. Cuando estuvo a unos metros de aquel ser lanzó dos de sus dagas a aquel lugar chispeante del que podía oir que salía el sonido y nuevamente se retiró hacia atrás esperando haber inhabilitado por lo menos una de sus funciones.

Stats:

por **Auros** Vie Mar 20, 2015 6:22 pm

El miembro 'Ichinose Takumi' ha efectuado la acción siguiente: Dados de batalla

#1 'Tirada Divina' : 12

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#2 'Tirada Divina' : 19

por **Bartolomeo** Vie Mar 20, 2015 7:40 pm

Al llegar al lugar y ver la pirata sobre el suelo mis neuronas enloquecieron un poco, y mas lo hicieron cuando greed tomo su sable luego de decir que no importaba si la pirata moría.
Apreté mis dientes, tenía pensado acabar con el revolucionario en ese mismo instante cuando la pelinegra, la revolucionaria que parecía ser la mujer del líder de los revolucionarios hizo enfadar a la prisión haciendo que las puertas se cerraran repentinamente.-Tks, esto no pinta bueno- Dije entre dientes al ver la entrada de la gran cantidad de guardias que rodeaban la zona, junto con lo que parecía ser un elefante legendario súper-fuerte-algo-feo-pero-formidable-tresmil. –Wow-Dije, algo asombrado, y no solo algo, sino que muy asombrado al ver que este tomo la llave y seguido de eso comenzó con un muy pero muy potente ataque.

Me cubri con mis espadas las balas que tal vez me hubiesen podido tocar haciendo que estas perdieran el rumbo, desviándolas. No perdía de vista ni a greed ni a la bestia, mientras que el montón de imbéciles que habían llegado conmigo al lugar se pusieron a pelear con los guardias.
-Tu ven aquí!- dije señalándole a uno de los que solo estaba observando.
Lo tome por el cuello, este gritaba pero poco me importaba. Con todas mis fuerzas se lo arroje en la cara al elefante haciendo que este retrocediera a causa del empujón.
No tenia mis habilidades especiales, no podía aprovechar las sombras del lugar ni la tierra del suelo, pero tenia bastante condiciones físicas a pesar de aun no haber sido curado totalmente por la herida que yo mismo me provoque en la costilla.

Estaba algo cegado, no distinguía bien lo que estaba sucediendo, el sonido de los tiros era muy fuerte y enloquecedor pero algo tenía en claro, debíamos acabar con esa bestia si queríamos poder sacarnos los estúpidos e incómodos collares que llevábamos puesto.
Apreté fuertemente mi espada derecha, y me encamine hacia el elefante, o lo que sea que fuese, al estar lo suficientemente cerca me pare al frente y sin decirle nada , clavándole la vista me senté.
Cruzando las piernas en el suelo como solía hacerlo, quería llamar la atención de la criatura, al menos para que se centrara en mi, no era un plan suicida, solo que confiaba en las habilidades del resto de las personas dentro de la habitación y sabia que si ganaba algo de tiempo, podían resolver la situación en un abrir y cerrar de ojos, aunque me quedaría pendiente saldar cuentas con el inútil y engreído de greed.

Stats:

por **Auros** Vie Mar 20, 2015 7:40 pm

El miembro 'Bartolomeo' ha efectuado la acción siguiente: Dados de batalla

'Tirada Divina' : 22, 15

por **Reiv Black** Vie Mar 20, 2015 9:36 pm

Los cuadros de la sala...tras ellos estaba la respuesta. La primera vez que lo hice fue tan rápido que apenas me percaté del cuadro que mueve Isela para descubrir una caja fuerte. Por suerte alguien ha traído armas y esto le sirve a la revolucionaria para pegar varios tiros a la puerta. La expectación se mantiene hasta el momento triunfal en que encuentra la llave, aunque la alegría dura poco. Las alarmas empiezan a sonar como locas y quedamos más encerrados que un hámster en su bola. - Venga ya...¿Y ahora qué más? - me arrepiento al momento de hacer esa pregunta porque evidentemente sí, venían más cosas. Entre ellas 15 guardias armados hasta los dientes y un intimidante gigante metálico que parece de todo menos un amable robot de servicio. En ese instante me da esa especie de risa que te entra en momentos de desesperación, como si todo esto se tratase de un chiste. La llave queda fuera de nuestro alcance, encerrada ahora en una especie de chisme protector que dudo que se rompa con un golpe. Paseo mi mirada por la sala, analizando la situación de desventaja en la que nos encontramos.

El tenso silencio apenas dura unos segundos, enseguida se ponen manos a la obra con la intención de asesinarnos allí mismo. El mastodonte metálico alza un brazo que comienza a disparar de manera indiscriminada por toda la sala, haciendo que muchos de los disparos den en la pared y contribuyan a levantar polvo. Por mi parte mi primera reacción es tratar de esquivar echándome a un lado cuando una bala me pasa muy cerca, rozando el hombro pero sin llegar apenas a herir. Las balas siguen sonando a mi alrededor, en medio del caos, el polvo y el ruido no distingo bien lo que hacen el resto de compañeros, aunque me guío un poco por lo que escucho por parte de Greed, que según dice ha acabado con dos. Choco con una cesta la cesta de armas que trajo Barto, sacando la primera arma que pillo, una espada más larga que me servirá mejor que los cuchillos de cocina o que el bisturí que llevo bajo la manga. Vigilo de reojo la bolsa en la que había traído algunas cosas más, que por suerte ha quedado en un rincón más apartado. El principal objetivo pasa a ser el robot, así que trato de llegar hasta él como han hecho los demás.

Intento abrirme paso a través de los guardias que portan armas, soltando un tajo a la muñeca de uno de ellos, cercenando su mano y haciendo por tanto que caiga su rifle al suelo, además de él mismo sangrando y sujetándose la muñeca. El segundo guardia que me cruzo en mi camino hacia el robot tiene menos suerte, me lo encuentro de frente y a punto de dispararme a la cabeza, así que atravieso su garganta casi en un acto reflejo para quitármelo de encima. El hombre cae al suelo gorgoteando sangre, su destino ya está sellado. No sería necesario ni rematarlo, pero puede que sea lo mejor, tanto por seguridad como para ahorrar la agonía. Procuro no dudar demasiado porque no puedo perder el tiempo y creo que de todos modos me va a costar hacerlo, acabando por separar del cuerpo la cabeza del hombre. Una extraña sensación se apodera de mí, es la primera persona a la que arrebato la vida con mis propias manos. Me obligo a reaccionar rápido y a moverme, ya más tarde habría tiempo para pensar. - Otros dos menos. - anuncio en voz alta y sin ningún tipo de tonalidad, simplemente a modo informativo. Por fin llego hasta el robot, fijándome en el maldito brazo que nos había disparado. Voy derecho a la zona del codo, clavando la punta del arma ahí como buenamente puedo, tratando de hacer palanca y girarlo en dirección al pecho de la máquina para que si se le ocurre disparar el destrozado sea él. Hago toda la fuerza posible para aguantarlo en esa posición, aunque no sé si conseguiré mantener el cañon apuntando hacia el bicho.

STATS:

por **Auros** Vie Mar 20, 2015 9:36 pm

El miembro 'Reiv Black' ha efectuado la acción siguiente: Dados de batalla

#1 'Tirada Divina' : 17

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#2 'Tirada Divina' : 8

por **Memeran Anarchy** Sáb Mar 21, 2015 11:49 pm

Todo se volvió negro, no sabia cuanto tiempo había durado inconciente, pero fue el dolor punzante en una pierna la que le hizo despertar de forma abrupta de su desmayo, soltango un grito de dolor, pues le había desgarrado la piel que poco a poco se había formado en aquella parte de su cuerpo. No espero mucho a entender la situación, miro a todos peleando por lo que se oculto detrás del escritorio al que le había destrozado los cajones. Se busco en la bolsa aquella arma que Isela le había dado.

La pierna le sangraba y se sentía muy mareada aun. Ademas de que había perdido una cantidad considerable de sangre, ahora sangraba mas. Tomo lo que encontró filoso, un trozo de espejo que seguro estaba en los cajones,y con ese rasgo la parte superior de la prenda, para hacerla jirones tan rápido como pudo gracias a la descarga de adrenalina en su cuerpo por aquello. Realizo un vendaje con suficiente presión apra que le sirviera de torniquete y parar al emorragia. Se asomo y miro aquella cosa parecida a un elefante mecanico.

—que demonios es eso?— pregunto en un tono claramente algo cansado pero alarmado, lo examino tan rápido y eficazmente como pudo. Conforme vio aquella escena se percato de aquello. Habia demaciados guardias pero esa cosa era el principal enemigo, por eso, le vacio todo el cargador directo a donde podía ver el cableado de las extremidades, cuando eso paso se volvió a esconder. Respiraba ajitadamente y no sabia que mas hacer, sabia que si intentaba pelear cuarpo a cuerpo no seria muy prudente, pues en su estado, podrían herirla con mas facilidad.

Empuño y abrió su mano algunas veces podía reaccionar de forma algo rápida, pero no lo suficiente, estaba demasiado lastimada y desgastada como para ser demasiado útil.

—Pasenme un arma!— grito, pero entonces cuando miro los huecos donde iban las gavetas vio una caja, al parecer uno de los cajones tenia un fondo falso que daba al hueco donde estaba eso. Saco la caja del tamaño del cajón y al abrirla sonrio. Era nada menos que una hermosa .45 de revolver. La reviso y estaba cargada y la caja tenia bastante municion. En su condición solo podía disparar y esconderse.
Disparo a los guardias que tenia mas cercas, el calibre era suficiente para perforarles la cabeza a travez de los ojos.

Gracias a esos disparos certeros que le costaron una eternidad apuntar, dos de los guardias cayeron a manos de la pirata, para volverse a ocultar y recuperar el alineto.
—maldición….tengo que salir de aquí, tenemos que salir de aquí con vida!—

Miro a todos lados y encontes miro esa cresca conocida sonriendo de alegría. Bartolomeo estaba vivo y eso le hizo sonreir de gran manera. —Bartotan…Es bueno saber que tu tracero sige en su lugar— dijo mirándole de reojo regalándole una sonrisa.
—Ise tan! Estas bien?— pregunto, pues no la podía ver bien debido a la polvadera, de hecho, de no ser por la cresta de Barto tan, seguro no sabia que era el.

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SISTEMA MUNDIAL DE SPIRIT SOUL
Categorías	Chaos	Spatium	Tempus	Revolucionarios & Anti gobierno
Territorio	225	240	110	80
Infraestructura	170	320	330	60
Vehiculos	150	150	195	250
Armamento	90	21	21	45
Soldados	80	70	70	110
Prestigio	80	50	120	120
Total:	1435	3747	1531	2085

MEJORAS MUNDIALES DE SPIRIT SOUL
Categorías	Chaos	Spatium	Tempus	Revolucionarios & Anti gobierno
Vehiculos	Lvl 0	Lvl 0	Lvl 0	Lvl 0
Infraestructura	Lvl 1	Lvl 1	Lvl 1	Lvl 1
Armamento	Lvl 1	Lvl 1	Lvl 1	Lvl 1
Links Necesarios:	Info del sistema	Ramas de mejoras	Tierras dominadas	Contador de puntos

MEJORAS DE CHAOS
Tipo	Nivel	Mejora	Adquirida el día
Mejora de Armamento	1	Armadura reforzada. Los soldados cubren su espalda, hombros, y brazos con armaduras mágicas. (+17 puntos al dado de defensa de cada soldado)	26/5/2016
Mejora de Infraestructura	1	Geisers de lava.Tus murallas son cubiertas por geisers de magma que queman todo lo que se acerca. (+100 hp a cada muralla al defender de una invasión)	21/8/2016

MEJORAS DE SPATIUM
Tipo	Nivel	Mejora	Adquirida el día
Mejora de Armamento	1	Pólvora Delux. Las armas del reino sufren una mejora total. (+20 al dado de ataque de cada soldado)	26/5/2016
Mejora de Infraestructura	1	Se refuerzan las murallas del reino en edificios gubernamentales. (+100hp a todas las murallas al defender de una invasión )	24/8/2016

MEJORAS DE TEMPUS
Tipo	Nivel	Mejora	Adquirida el día
Mejora de Infraestructura	1	Campo tecnológicamente alterado. Un campo electro-magnético rodea tus murallas protegiéndolas del daño enemigo. (+150 hp a todas las murallas al defender una invasión)	26/5/2016
Mejora de Armamento	1	Cañón electromagnético. Los soldados son armados con tecnología de punta. (+15 al ataque de cada soldado)	21/8/2016

MEJORAS DE REVOS & ANTI-GOBIERNO
Tipo	Nivel	Mejora	Adquirida el día
Mejora de Armamento	1	Armas cortantes (Espadas): los forjadores y herreros abdicados a la revolución son considerados los mejores entre las regiones. (+20 al dado de ataque de cada soldado)	26/5/2016
Mejora de Infraestructura	1	Diavolik Force. La manipulación con éxito de materiales para crear tus murallas, hace que la protección que esta otorga aumente considerablemente. (+120 hp a todas las murallas al defender de una invasión)	21/8/2016


Disponible	Hikari Hiroshi	Jellal Slater